Capítulo 66

229 19 18
                                    

Habia sido una noche realmente dificil. Para ambos. El pobre mitad pomeranian habia dormido entre lagrimas y chillidos mientras que la pobre mujer, por otro lado, se mantuvo firme como un roble. Como un ancla ató al chico a la realidad, y lo dejó llorar por esas penas que hace tanto lo habian dejado tranquilo. Pero como cualquier herida el tiempo la hizo mas amarga, y aquel dolor que se le habia olvidado volvio a renacer a flor de piel. 

La vida le habia dado motivos para llorar, pero (Nombre) fue lo suficientemente diligente para asegurarse que las lagrimas secaran antes de que el chico despertara. Había caido dormida profundamente, segura de que su prometido iba a descansar con tranquilidad entre sus brazos. Si tenía una pesadilla ella lo sentiria en su piel. Las lagrimas mojarian su pecho, y los sollozos la despertarian nuevamente. No importaba qué, ella sería capaz de sacarlo de esas horribles pesadillas causadas por la fiebre. 

Había caído dormida segura de que su prometido estaba bien. Segura de que no habia nada en el mundo que pudiera separarlos. Ninguna cosa. 

[...]

Despertó a las once de la mañana, cuando la luz del sol entraba por la rendija en la ventana. Sus ojos se sentian hinchados, y su cuerpo dolía un poco todavia por su resfriado, mas estaba seguro de que ya estaba casi como nuevo. Un día más o dos y ya no tendría nada de que preocuparse. 

Por otro lado, la adorable mujer a su lado respiraba ritmicamente. Tenía el ceño levemente fruncido, y debajo de sus ojos habían ojeras. No quería ni imaginarse cuando se fue a dormir. Conociendola, fue mucho despues que el. 

Se sentó en el futón, decidiendo qué hacer. Podría quedarse una hora más con ella, a su lado, disfrutando de su calidez y su aroma. Podría levantarse y comenzar a preparar el desayuno. Podría incluso ir a dar un paseo corto...

Un paseo.

[...]

—¿Quieres casarte conmigo?—

Los ojos de (Nombre) se hicieron grandes cuando siquiera dejé que las palabras salieran por mis labios, y no pude evitar notar la manera en que su corazón dió un brunco inesperado justo cuando terminé de hablar. Quería sonreír como un maldito, realmente quería. Pero tambien quería pretender que no lo había notado. 

Realmente quería pero deben entenderme. Estaba putamente aturdido. Sus ojos se hicieron grandes, y sus pupilas parecían intentar expulsar el azul de sus ojos de lo grandes que se habían vuelto. Supe que intentaba retener la imagen de mi, un pobre bastardo que había caído por sus encantos, tomandola por la cintura pidiendole que sea mi esposa. La luna se veía hermosa reflejada en su mirar, y pensé que no había mejor momento. Pensé que no había ninguna otra mujer para mi. Pensé que mi vida estaba a punto de iniciar, y la iniciaría con ella a mi lado. 

Pidiendole que sea mia. 

Se veía tan hermosa que fue dificíl ocultar esa boba sonrisa de estupido. A ella no pareció importarle. 

No se lo esperaba. No de mi. No ahora. Pude reconocer un poco de duda, fue un solo segundo. No se preguntaba qué responder. Se preguntaba si me habia escuchado bien. Joder. Gracias al cielo tuvo piedad de mí, pues no preguntó que dije. 

Después de ese segundo ahi estaba, esa sonrisa brillante, adornando con calidez su bello y fino rostro. Mis orejas, ocultas como malditas cobardes en esta jodida cabellera que me acompaña, ansioso por su respuesta. Eran tan solo unos segundos de silencio, pero joder que esos segundos eran suficientes para hacer que casí me diera un ataque al corazón. 

Esa mujer podía ser todo lo que quería, pero parecía querer hacerme rogar. Ya hice la pregunta, ni de mierda iba a rogar. 

O eso pensé, hasta que esta lunatica comenzó a saltar de un lado a otro, incapaz de contener su alegria. Gritaba y saltaba como nunca antes la había visto. Reía como una colegiala enamorada, y parecia importarle muy poco si alguien la veía haciendo el ridiculo en medio del bosque. 

Pero, siendo honestos nunca pensé que pudiera hacer algo como esto. Hacer feliz a alguien. No de esa manera. No de esa forma tan genuina. Con tanto fervor. No pensé poder hacer que alguien no cupiera en su piel de tan feliz que era. Pero ahi estaba ella, como siempre, probando que soy nada más que un estúpido. Siempre incorrecto. No importa lo que piensé, si ella piensa lo contrario. 

No dijo nada. No me respondió inmediatamente, pero asentía con la cabeza. Una y otra vez. Me preocupaba que le diera una contusion si seguia asintiendo asi. 

—Preguntame. Otra vez. Hazlo.— Pidió. Lo dijo con tanto entusiasmo que fue dificil siquiera recordar que acababa de prometerme no rogar. Abri los labios, a punto de volver a preguntar, pero la ingrata se atrevio a interrumpir: —De rodillas, como un caballero.— 

Podré haber pensado que no rogaría, pero esta mujer ya me tenía a sus pies. ¿En que me había metido? ¿Esto por el tresto de mi vida? ¿Esta loca todos los dias a mi lado? 

Me arrodillé.

—No tengo anillo, (Nombre)—

—Me compras uno de caramelo luego, no me importa. Sólo dilo.— Soltó apresurada, casí trabandose con sus propias palabras. 

Si. Con esta loca. El resto de mi vida. 

Solté una risa, divertido ante tanta emoción. La pobre de (Nombre) parecía retener el aliento. Tomé un respiro. Y me preparé mentalmente. 

—Nishimura (Nombre),— Sus ojos se abrieron grandes, y se mantuvo firme en el lugar, cambiando de las puntitas de sus pies a sus talones, balanceandose inquieta. —No sé que habria hecho sin ti. Que haría sin ti. Me haces una mejor persona, o eso sigues diciendo— Rodé los ojos, pero la verdad es que la boba sonrisa en mi rostro tardaría decadas en desaparecer. —Me has mostrado la belleza de una noche oscura, y el dolor de un dia soleado. No hay nadie como tú, y si los hubiera el mundo sería un lugar mejor.— Si esta mierda de compartir mis emociones seguia así iba a llorar, y no podía permitir esa mierda. —Sé que no hay nadie más que... Se capaz de aguantar tu horrible caracter, o la manera en que roncas al dormir, o ser tu burro de carga cuando vas de compras, así que, si me lo permites, te haré el favor de ser tu esposo.— 

Sus mejillas estaban rojas como un tomate, pero sus manos no fueron lentas al darme un golpe en la cabeza.  

Solté una risa, y pensé por un momento que a eso me referia con su horrible caracter. 

—Siempre pensé que mi vida no me pertenecía. Siempre estuve equivocado. Desde que te conocí, me doy cuenta. Soy libre. Realmente libre. Siendo honesto, no suelo saber que quiero. O, bueno, solía. Quiero ser mejor, (Nombre). Quiero ser más de lo que ya soy. Quiero ir a la universidad. Quiero conseguir un buen trabajo. Quiero olvidarme de estas heridas que me acompañan a donde voy. Y quiero que me acompañes, mientras hago todo eso. Quiero que estes ahi, animandome, de la misma manera en la que no puedo esperar por animarte yo. De la misma manera en que no puedo esperar para acompañarte a donde vayas. De la misma manera que no puedo esperar para estar ahi contigo. Nishimura (Nombre), ¿me honrarias con la dicha de estar contigo el resto de nuestras vidas, hasta que la muerte nos separe, sin devoluciones?— 

Derrame mi corazón frente a esa mujer. Los idiotas son los unicos guiados por el amor. Desgraciadamente, en el momento en que postré mis ojos en ella me volví un idiota más.  

—¡Si! ¡Dios mio! ¡Si. acepto!—

Todo estaría bien, porque ahora somos dos idiotas juntos. Ni viento, ni tierra, ni marea, ni las mismisimas llamas del infierno cambiaran eso. 




Holi!! ¿Me extrañaron? Seguramente no. La verdad, me dió pereza corregir el capítulo, asi que ahi lo tienen, triste y con errores, o mejor dicho, horrores gramaticales. Es lo que hay. Google ni corrige tan shido—por el contrario, creo que muchas veces lo hace peor, he visto como corrige puto a puro y me estoy hartando eh! 

De cualquier manera, espero que les haya gustado, estoy muy segura que el siguiente capítulo será el último, y después de eso nos moveremos para la historia del Mirrodilla. Jugosa y brutal, la historia de un hibrido falso. 

Gracias por leer, comenten y estrellita, que los comentarios son lo que me motivan para escribir!

1407 Palabras.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 09 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Híbrido!  Katsuki Bakugou x tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora