Especial de Navidad

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—No te atrevas a tocar los jodidos bombones ni caramelos!— Dijo el chico mientras trabajaba en el jamón que comerían ambos en aquella fecha tan especial. La nueva casa que habías conseguido era espaciosa, lo suficientemente grande para el gran pino artificial que habías comprado debido a que al delicado canino no le agradaba el olor a pino. Tu solamente sonreíste mientras mirabas los caramelos frente a ti. Los chocolates rellenos de ron ademas de los bombones cubiertos y los bastones de caramelo con un sabor artificial de menta eran simplemente tu sueño.

—No te preocupes, yo sobreviví a la prueba del malvavisco— Dijiste mientras tomabas un pequeño chocolate y lo ponías en tu boca sintiendo el sabor dulce combinado con el alcohol el cual extasiaba tu paladar. (Para quien no tenga claro, la prueba del malvavisco es dejar a un niño frente a un bombón y decirle "Si esperas, tendrás dos bombones, y si te lo comes ahora te quedaras solo con ese bombón," sin mas que aclarar, continuemos!). Por primera vez en años tu hogar se sentía cálido, al mismo tiempo que adorabas como alguien esperaba por ti y te dedicaría un regalo, y no uno barato que compro en el camino como muchos de tus "amigos" hacían, si no uno genuinamente especial. 

—No engañas a nadie con esas patrañas!— Se quejo el mitad pomeranian mientras fruncía el ceño. Claramente se dio cuenta de que te habías comido uno de los chocolates que había comprado para los dos, y aunque haya reaccionado de aquella manera se sentía bastante contento respecto a que era su primera navidad fuera de aquel infierno donde le obligaban a pelear y matar. Era la primera vez que podía considerarse una verdadera feliz navidad.

su cola rubia se movía de un lado a otro mientras que mantenía sus orejas puntiagudas esperando por algún ruido extraño, como el del timbre, pero considerando de que Kirishima aun seguía enojado por haber llamado zorra y suripanta a su novia era casi imposible que alguien llegara en estas fiestas, pero por el chico aun mejor, si planeaban venir solamente para arruinar la hermosa sonrisa de la chica era mejor que ni siquiera pensaran en aparecerse. Nadie se merecía mas una feliz navidad que ella. 

[...]

—Gracias por la comida!— Grito la chica mientras cortaba un trozo de jamón y se lo daba a un molesto Katsuki en la boca. Digamos que tuvieron una pequeña discusión hace algunos minutos, lo que termino en un Katsuki, extrañamente, atado en una silla. Tu, mientras tanto, solo continuabas sentada en sus piernas mientras aun seguías riendo felizmente. 

El pobre muchacho solamente sentía como su dignidad bajaba dramáticamente y su corazón se aceleraba hasta el punto de casi salirse de su pecho. Siendo sinceros, después de haber hecho tantas atrocidades, y matado a tantos, nunca se espero encontrar la felicidad, y aquel día en aquel callejón estaba listo para morir, estaba mas que feliz por finalmente cumplir su condena, feliz por irse y abandonar esta mierda de mundo el cual lo había convertido en una mierda, en un villano... en un asesino. Entonces, cuando perdió la conciencia un ángel llego a su vida y lo cargo dios sabe como hasta su departamento, y después de los millones de problemas que le causo lo dejo quedarse, y ahora estaban celebrando su primera navidad. 

—Abre grande— Dijo la chica mientras tomaba un poco de puré de patatas y lo dirigía a la boca de el semi canino. Era una de las escenas mas tiernas, o raras que una persona podría ver, pero desde la perspectiva de el rubio cenizo las cosas eran perfectas, y aunque no quisiese admitirlo debido a su tonto y gran orgullo desearía que todos los días la chica se encontrara tan feliz por alimentarlo de esa manera. 

El rostro pálido de la chica estaba tan cerca de el del chico que podían sentir sus respiraciones chocar, a lo que el pobre pomeranian solo esperaba que su pequeño amigo no saliese a ver que pasaba fuera ya que seria un momento del todo incomodo. Ignorando las hormonas y feromonas de la situación, ambos terminaron de comer pacifica y divertidamente, por lo que el chico fue desatado finalmente de la silla del comedor para ir a abrir los regalos. 

[...]

—El ultimo regalo Katsuki! Es para ti— Dijiste mientras tomabas un sobre bastante grande y se lo entregabas a las toscas manos del mitad pomeranian. El chico solamente alzo una ceja confundido al respecto, por lo que tu sonrisa solamente se hizo aun mas grande, si eso era físicamente posible. La pobre chica solamente esperaba que el pomeranian le gustara el regalo, el cual le costo inclusive un caso judicial en el que tuvo que representarse a si misma como una abogada. Gracias a dios ella era lo suficientemente brillante para tener argumentos creíbles, ademas de tener la suficiente determinación para lograr tener un caso judicial el cual dejo una marca en la historia de los híbridos. 

El chico abrió el sobre lentamente, y al abrir aquel sobre amarillo sus ojos se clavaron en las letras de aquellos papeles, se veían importantes, al mismo tiempo que la chica se veía realmente emocionada por que abriera ese ultimo regalo. Siendo sinceros no le gustaba demasiado la intriga en la que estaba sometido, por lo que su cola se enrollo en su pierna asustado por lo que sea que fuesen aquellos papeles. 

Entonces, las inmensas letras que estaban frente a sus ojos resaltaron como por arte de magia. 

"Certificado de Independencia para un Híbrido
Bakugo Katsuki recibe la independencia de cualquier ser humano" 

—(Nombre), es esto lo que creo que es?— Pregunto mientras sonreía casi instantáneamente levantando la mirada a lo que la chica solo abrazo una almohada exclamando "Sigue leyendo" mientras aquella sonrisa continuaba en su rostro. El híbrido saco otra hoja de papel, la cual parecía ser un articulo de revista en el cual anunciaban la noticia como una especie de revolución.

"Después un jurado reñido con el juez Gerardo Raul, el representante de la ley, el abogado Henry Basil, la joven Kirishima (Nombre) gano el jurado en el que se le entrega a el híbrido nombrado Bakugo Katsuki un certificado de independencia basado en los argumentos presentados por la representante, Kirishima (Nombre) al jurado. Uno de los cientos de híbridos acaba de conseguir por primera vez en la historia su independencia, la joven uso mismas palabras de gente elocuente en la comunidad para defender su postura para finalmente ganar el caso. "Mantenemos estas verdades para ser evidentes, mantenemos que cada ser humano es creado igual". " 

Finalmente, y después de sentir como su corazón daba un vuelco de felicidad, el chico sin pensárselo dos veces se lanzo a la chica estampando sus labios formando un beso lleno de cariño. Finalmente era libre de la sociedad, y todo por aquel ángel que en poco tiempo tomo control de su vida y de su mente poniendo todo en su lugar. 

Era simplemente la mejor navidad de todas.   




ESTO SI QUE PASO EN LA HISTORIA CHICAS!!!  FELICES FIESTAS

Híbrido!  Katsuki Bakugou x tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora