Tan hermosa como una flor || Sebastián Córdova ||

🤍 Capitulo 38 🤍

Ya llevo las 2 semanas con mi padre. Sinceramente la ha sabido llevar muy bien, creo que está preparado para vivir solo.

Las cosas con mis hermanos, Justo después de que mi padre estuviera "estable" en el hospital, volvieron a la normalidad. Ellos se fueron, Mauro regreso con su familia, Diego a Europa y yo a la Universidad. Si llaman solo es para saber cómo está mi padre, pero no han hablado conmigo, supongo que no tiene tiempo para mi.

Por otro lado, mis amigos están enterados de que me quedaré un tiempo en Ciudad de México. Con Sebastián casi no he conversado, ya que está ocupado con su nueva transición de préstamo a él America, no se cuando llegará a Ciudad de México, pero me dijo que muy pronto.

Narra Sebastián:

-Ya te lo dije muchas veces, Cordova. Tienes que irte porque no rindes igual en la cancha.- discutía con el DT de tigres por la transición, ya que no quería irme de este equipo, aunque solo sea una temporada.

-Porque no me han dado la oportunidad de mostrarles mi rendimiento en la cancha como titular! Baje mi rendimiento hace meses, acabo de recuperar mi nivel.- me excuse y el DT solo me dio palmadas en la espalda.

-Retírate y ve a empacar tus cosas. El club pasará por ti en unas horas.- molesto, tome mi mochila con mi uniforme de entrenamiento y me dirigí a mi casa para empacar.

(...)

Estaba en el avión mientras pensaba en Daila. ¿Como la estará pasando? Mi pobre linda estaba pasando por un momento difícil con su padre y sus hermanos. Toda la carga estaba sobre ella.

Narra Daila:

Salí a la plaza para comprarme algo de maquillaje nuevo. Iba enfocada en mi celular cuando choqué con alguien.

-Lo siento, no te vi.- dirigí la mirada hacia arriba y ¡que maravilla! Estaba mi grandioso ex.

-Kevin, que sorpresa.- le sonreí. El parecía en shock, pero más que nada, nervioso y desanimado.

-¿Que te trae por acá, Daila?- pregunto amable.

-Mi padre tuvo un accidente y mis hermanos estaban bastante ocupados para cuidarlo así que vine para hacerme cargo de el un rato.- respondí mientras jugaba con mis manos y Kevin asintió entendiendo.

-Lo siento por tu padre, espero se mejore.- yo le sonreí nerviosa.

-Si, igualmente.- negué rápidamente al percatarme de mi error. -Quise decir, claro, gracias por tus buenos deseos.- Kevin me sonrío divertido, se despidió agitando la mano con referencia a un "adiós". Repetí su acción y me dirigí a la tienda de maquillaje.

(Pueden reproducir la música)

Saliendo de la tienda vi a una chica y un chico bromeando mientras comían un helado, sentados en esa banca donde yo solía reunirme con Diego cuando platicábamos sobre nuestras vidas y planes a futuro.

Flashbacks:

-Si quede en la universidad!.- chillo la chica emocionada mientras daba pequeños saltitos. Diego sonrio de oreja a oreja y le dio un fuerte abrazo.

-Estoy muy orgulloso de ti, hermanita. Cada meta que tengas en tu vida yo estaré ahí para celebrarla juntos.- Daila soltó algunas lágrimas de la emoción y el sentimiento de convivir con su hermano y saber que tiene su confianza y amor.

(...)

-Ja! Te lo dije, eres malísimo en FIFA.- Diego recargó su cabeza en el sofá.

-Es imposible, antes yo te ganaba!- se quejó y Daila rio.