Capítulo 28: La verdad oculta

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Recibí la llamada de Ian justo cuando estaba decidiendo qué ponerme para nuestra cita. Al escuchar sus palabras, un nudo de decepción se formó en mi estómago.

—Emma, tengo que cancelar nuestra cita. Tengo unos asuntos de trabajo que no puedo posponer —dijo, su voz sonando afectada a través del teléfono.

—¿No puedes encontrar otro momento? —pregunté, tratando de mantener la calma aunque sentía la frustración creciendo.

—Lo siento mucho. Prometo compensarlo con un picnic en la playa, ¿te parece bien?—Suspiré, sintiéndome atrapada entre la tristeza y la felicidad. La idea del picnic era encantadora, pero la cancelación de la cita sin una explicación clara me molestaba.

—Está bien, Ian. Pero me gustaría que fueras más abierto conmigo sobre estos "asuntos de trabajo" —dije, sin poder ocultar mi descontento.

—Lo sé, Emma. Es complicado, pero te prometo que te lo explicaré cuando sea el momento adecuado. Lo siento mucho, de verdad.—respondió, sonando realmente afectado.

Después de colgar, no pude quedarme tranquila. La actitud de Ian era sospechosa. Sabía que tenía un trabajo aparte del club de peleas, pero cada vez que intentaba averiguar más, él cambiaba de tema. Decidí llamar a Sophie para pedirle consejo, pero estaba demasiado ocupada con Thomas como para atenderme. Así que, sin más opciones, tomé la decisión de investigar por mi cuenta.

Encendí mi ordenador y empecé a buscar información sobre Ian y los Miller. No encontré mucho, excepto algunos comentarios antiguos sobre su radicalidad y sugerencias sobre posibles actividades delictivas pero no había nada claro del todo. Sin embargo, una noticia antigua captó mi atención: "Ian Miller es investigado por asesinato". Tenía quince años en ese momento y fue declarado inocente, pero el video adjunto de varias mujeres llorando gritándole "asesino" me puso los pelos de punta y me revolvió el estómago. ¿Realmente podía confiar en él? ¿Qué más estaba ocultando? Mis dudas se intensificaron al recordar escuchar algunos rumores en la universidad y las pistas que Kate había mencionado sobre su pasado. 

Decidida a descubrir la verdad, cogí el autobús hacia Rustvale, donde vivía Ian, con el objetivo de investigar quién era él en realidad. Al llegar a su casa, no había mucho movimiento, así que decidí preguntar en una tienda cercana. La señora Pepper, la dueña, se presentó amablemente.

—Hola soy Emma, por casualidad conoce a Ian Miller, no lo encuentro por ninguna parte.

—Así que tú eres la famosa Emma. No sé cómo puedes soportar a ese niño —dijo, con una mezcla de cariño y resignación en su voz. Me sorprendí y le pregunté de qué conocía a Ian. Su mirada se oscureció un poco antes de responder.—Lo cuidé de pequeño. Es un buen chico, pero ha tenido una vida muy complicada —dijo, sin darme muchos detalles. Frustrada por la falta de información, le pedí educadamente que me contara más sobre el pasado de Ian.

Nos sentamos en una pequeña mesa al fondo de la tienda.—Sé que Ian ha tenido una vida difícil, y no quiero juzgarlo sin saber la verdad. Pero últimamente he sentido que hay algo que no me está contando. Necesito saber más sobre su pasado —dije, tratando de sonar convincente. La señora Pepper suspiró y me miró con ojos llenos de preocupación. Era una señora no muy alta de piel oscura, con el pelo gris recogido con un moño y unos ojos marrones que transmitían una gran calma y calidez.

—Ian es un buen chico, pero ha tenido que enfrentarse a muchas cosas solo. Su familia... bueno, no es fácil. Los Miller fueron una vez una familia poderosa en el bajo mundo, pero cayeron en desgracia. Ian ha estado intentando salir de esa sombra, pero no es tan sencillo cuando hay personas que no te dejan olvidar quién eres —explicó, su voz llena de tristeza.

Entre Sombras y Susurros de AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora