🌹La Princesa & El Ladrón🌹

🌹 Capítulo 77🌹

El sol volvía a asomarse entre las montañas, trayendo consigo la promesa de un nuevo día. Kakashi y Sakura despertaron temprano en la cueva donde habían pasado la noche. El aire fresco de la mañana y el canto de los pájaros les daban una sensación de renovada esperanza, a pesar de la situación en la que se encontraban.

— ¿Estás lista para seguir? — Preguntó Kakashi, estirándose y preparándose para la marcha.

— Sí, estoy lista — Respondió Sakura, estaba algo adolorida por dormir en la cueva.

— ¿Te pasa algo?

— Me duele un poco el cuerpo.

Kakashi sabía que ella no estaba acostumbrada a dormir en estás condiciones, no era como dormir en una cama de pajas.

— Iremos por otra dirección, nos tomara un poco más de tiempo en llegar a nuestro destino, pero será mejor para ti.

— Tu decides que es lo mejor Kakashi.— Decía levantándose.

Se comenzó a sentir mareada, sentía como su vista se nublaba y comenzó a tambalearse un poco.
Kakashi rápidamente la sostiene y hace que se siente.

— ¿Amor estás segura que estás bien?— Decía muy asustado.

— No hemos cenado y comido Kakashi...— Decía Sakura.— Y más el estrés.

— Lo sé...— La acerco a el y beso su frente.

— Te llevará un lugar para comer...

— Está bien.. lamento todo esto, si mi padre entenderá que no quiero regresar... Estaríamos en nuestro hogar.

— No es tu culpa, nada de esto...— Decía acariciando su mejilla.

Más tarde, ambos emprendieron su viaje, Kakashi vigilaba los alrededores, por si habían guardias realea o otros ladrones, en eso Kakashi podia ver un lago, miro a Sakura, la ve palida.

— Descansaremos aqui y pescare algo para desayunar.— La toma de la mano para ayudarla a bajar.

— Y ¿Cómo pescaras?— Lo miro con curiosidad.

— Ya lo verás... Ven con cuidado.

La ayuda a bajar por las rocas y cuando estaba cerca del lago, Kakashi, prende una pequeña fogata con dos rocas y palos secos.

La pequeña fogata, le daba un poco de calor a Sakura, eso la hacía sentir mejor, miro a Kakashi afilar un palo con su navaja y ve que se comenzó a quitar las botas y las calcetas, se levanta un poco el pantalon y entra al lago.

— ¿Que haces?

— Mi padre me enseñó a pescar si una caña de pesca.

Sakura lo miraba con entusiasmo, Kakashi notaba lo feliz que estaba Sakura, comenzó a concentrarse para poder pescar.

Y así fue, fue pescando varios pescados, Sakura le aplaudía cada que lo hacía.
Después, Kakashi comenzó a preparar los pescados en unos palos y los ponía en la fogata.

Después de un breve desayuno, recogieron sus pertenencias y se dirigieron hacia una aldea. Allí se encontraba un antiguo refugio para Kakashi, conocido como "La Taberna de la Luna Llena". Este lugar solía ser un refugio para él durante sus robos y sabía que era un lugar discreto donde podrían encontrar información útil.

El camino hacia la taberna era largo y sinuoso. Avanzaron por senderos ocultos entre los árboles, cruzando arroyos y subiendo colinas empinadas. A medida que se adentraban más en el bosque, la vegetación se volvía más densa y el terreno más accidentado. Sin embargo, Kakashi conocía bien el camino y guiaba a Sakura con confianza.

— Estamos cerca — Dijo Kakashi, señalando un claro en la distancia— La taberna está al otro lado de esa colina.

Sakura asintió ya que nuevamente, no se sentaba si entiendo bien, sentía nauseas y no quería que Kakashi lo notará. Finalmente, después de varias horas de marcha, llegaron a la entrada de la taberna. El establecimiento tenía una fachada no era muy buena, tenía ventanas rotas, el cartel casi se caia, Sakura ni estaba muy convencida de estar ahí, pero, no tenian de otra, se acerca a la puerta de madera desgastada, Kakashi empujó la puerta y entraron.

Dentro de la taberna, el ambiente era cálido y bullicioso, con varias mesas ocupadas por diversos personajes: viajeros, mercenarios y aldeanos. Kakashi buscó con la mirada hasta que encontró a dos mujeres sentadas en una mesa en el rincón más alejado. Con una sonrisa, las saludó.

—¡Hanabi! ¡Ayame! —exclamó Kakashi, caminando hacia ellas con Sakura a su lado.

Las dos mujeres levantaron la vista y, al reconocer a Kakashi, sonrieron ampliamente.

—¡Kakashi! — Dijo Hanabi, una mujer de cabello oscuro y ojos brillantes—  ¡Cuánto tiempo sin verte!

Ayame, una mujer de cabello castaño y aspecto fuerte, también se levantó para abrazarlo.

—Ven, siéntate con nosotras.— Dijo Ayame, señalando las sillas vacías en su mesa.

— Me alegra volver a verlas...— Kakashi acerca a Sakura un poco a ellas.— Les quiero presentar a mi esposa, Sakura.—Dijo Kakashi, tomando la mano de Sakura y acercándola a la mesa.

Hanabi y Ayame intercambiaron una mirada sorprendida, y luego Hanabi se volvió hacia Sakura con una sonrisa algo pícara.

—¿Esposa? — Preguntó Hanabi, levantando una ceja— No sabíamos que te habías casado, Kakashi.

Ayame sonrió, pero su expresión también era una mezcla de sorpresa y curiosidad.

— Sí, nos has sorprendido. ¿Cuándo sucedió esto? — Preguntó Ayame, mirándolo con interés.

—Hace un mes y medio. — Respondió Kakashi, sin soltar la mano de Sakura.— Todo fue muy rápido.

Hanabi se recostó en su silla, mirando a Sakura con una expresión evaluativa.

— Encantada de conocerte, Sakura. —Dijo Hanabi— Eres tan hermosa... ¿En qué bar trabajas? Eres muy hermosa, de seguro eras una cabaretera muy cotizada.

— ¿Bar?— Miro con sorpresa a la pregunta.— ¿Cabaretera?

— Si, es que nunca te había visto...— Dijo Ayame.

— Es que ella no es de aquí y ella no es una cabaretera.— Decía Kakashi algo incómodo.

— ¿No? ¿No me digas que ya te gustaron las mujeres decentes?

Las dos se comenzaron a reír, Sakura estaba muy sorprendida y algo incómodo por la situación.

— Sabes Sakura, Kakashi y nosotras, solíamos ser bastante cercanos, ¿sabes?

— Si, tanto que comportiamos cama.

Nuevamente se comenzaron a reír.

Sakura sintió una punzada de incomodidad, pero sonrió educadamente.

—Vaya, que bueno que estamos entre amigos. —Respondió, tratando de mantener un tono neutro.

— ¿Quería pedirles que si nos podíamos quedar unos días aquí, es que... Sakura no se ha estado sintiendo bien últimamente.

— Kakashi, por supuesto que se pueden quedar aquí.

Ambas se levantan de su silla.

— Síganos, lo llevaremos a la mejor habitación que tenemos...

— La que no tiene chinches.

Ambas se reían, incluso Kakashi se rió un poco.

— Es broma...— Decía Ayame entre risas.

Sakura miraba el lugar, parecía sucio y descuidado, esperaba que solo fuera este día, no quería quedarse otros días aquí.

Continuará.....🌹