🌹 Capítulo 91🌹

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Kakashi había pasado las últimas horas moviéndose sigilosamente por las calles, evitando patrullas y escondiéndose en las sombras. Cada minuto que pasaba, su determinación crecía, impulsada por el amor que sentía por Sakura y la urgencia de salvarla del peligro inminente.

Finalmente, llegó a un punto estratégico desde donde podía observar el castillo a la distancia. El imponente edificio, con sus altas torres y muros de piedra, parecía casi inaccesible. Sin embargo, Kakashi sabía que debía encontrar una forma de entrar.

Justo cuando estaba ideando un plan, sintió un movimiento a sus espaldas. Antes de que pudiera reaccionar, una mano firme lo agarró del hombro y otra presionó una daga contra su costado.

— No te muevas, Kakashi.— La voz de Daiki era baja pero amenazante.

Kakashi sintió un escalofrío recorrer su columna vertebral. Lentamente, levantó las manos en señal de rendición.

— Daiki...— Murmuró, tratando de ganar tiempo para evaluar la situación.

— Sabíamos que eventualmente vendrías aquí.— Continuó Daiki, apretando la daga contra Kakashi.— Has sido una espina en el costado del rey durante demasiado tiempo.

— Que alargador...— Decía sonriendo.

Kakashi intentó moverse, pero otros dos hombres robustos lo rodearon rápidamente, sujetándolo con fuerza. Daiki se puso frente a él, sonriendo con satisfacción.

— Ahora, vas a acompañarnos.— Ordenó Daiki, señalando a sus hombres que lo llevaran al castillo.

Sin otra opción, Kakashi fue arrastrado a través de las calles y llevado al castillo. Cada paso que daba, su mente trabajaba frenéticamente, buscando una forma de escapar y llegar a Sakura. Pero con las manos atadas y bajo la vigilancia constante de los hombres de Daiki, sabía que sus posibilidades eran escasas.

Al llegar al castillo, fue llevado a una sala oscura y fría. Lo arrojaron al suelo y cerraron la puerta detrás de él, dejándolo en la oscuridad. Kakashi se quedó en silencio, escuchando el sonido de sus propios latidos. Sabía que tenía que mantenerse calmado y encontrar una oportunidad para escapar.

Mientras tanto, en el castillo, Sakura estaba comenzando a sospechar que algo andaba mal. Había notado la tensión en el aire y las miradas preocupadas de los sirvientes. Su intuición le decía que algo grave estaba ocurriendo.

Decidida a descubrir la verdad, salió de su habitación y comenzó a explorar los pasillos del castillo. Su corazón latía con fuerza mientras se acercaba a la sala donde Kakashi estaba prisionero. No sabía lo que encontraría, pero estaba decidida a enfrentar cualquier peligro por el bien de su amado.

Al llegar a la puerta de la sala, Sakura escuchó voces al otro lado. Se agachó, intentando escuchar mejor.

— El rey Kizashi quiere que Kakashi sea eliminado inmediatamente.— Dijo una voz que Sakura reconoció como la de Daiki.

— ¿Matarlo así de fácil?— Preguntó otra voz.

— El rey nunca específico como.— Respondió Daiki con frialdad.

El corazón de Sakura se hundió. Sabía que debía actuar rápidamente para salvar a Kakashi. Con determinación, se enderezó y empujó la puerta, entrando en la sala sin dudar.

— ¡Alto!— Gritó, sorprendiendo a Daiki y a los guardias.

Todos se volvieron hacia ella, sorprendidos por su aparición inesperada. Kakashi levantó la vista, sus ojos llenos de alivio y amor al verla.

— Sakura...— Murmuró, sintiendo una oleada de esperanza y sonriendo al verla.

Sakura se mantuvo firme, enfrentando a Daiki con valentía.

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