🌹 Capítulo 78🌹

70 15 12
                                    

Kakashi y Sakura entraron a la habitación, parecía decente, Sakura miraba el lugar, aún no estaba convencida, pero, no dirían nada, por lo cansada que se sentía al estar viajando por horas y dormir en una cueva.

— ¿Que les parece?

— Es perfecto, solo estaremos aquí unos días.

— Bueno, los dejaremos solos para que descansen...

— Si, después bajen a comer con nosotras...

Ambas salen de la habitación, dejando a Kakashi y a Sakura a solas.

— Ven, sientate..— Toma de la mano a Sakura y la sienta en el cama.— ¿Cómo te sientes? ¿Aún sientes mareos?

— No, de hecho no he sentido nada desde que llegamos aqui.

— Segura, hay un médico muy cerca de aquí.

— Estoy bien, hoy que descansemos, me sentiré mucho mejor mañana.

— Aún así, nos quedaremos unos días, quiero estar seguro de que es así.

— ¿Unos días?

— Si.. unos días.

Sakura no le agradaba esa idea, pero, le demostraría a Kakashi que solo era el estrés y el cansancio lo que la hacía sentir así.

Más tarde ambos bajaban a comer, Sakura fingiendo buena cara ante las amigas de Kakashi, por el.

Al llegar, Sakura miraba el comedor, veía a todos los hombres ser muy asquerosos con la comida, los veía masticar con la boca abierta y hablar con la boca llena de comida, veía como escupían.

Sakura miraba con asco el lugar.

— Ven nos sentaremos por aquí.— Kakashi la lleva hacia una de más mesas del rincón.

Mientras pasaban, Sakura sentía la mirada de los hombres del lugar.

Sakura y Kakashi se sentaron en una mesa en el rincón, buscando un poco de privacidad. Hanabi y Ayame se acercaron con dos platos de comida y se sentaron junto a ellos.

—Espero que les guste. La comida aquí no es tan mala como parece. — Dijo Ayame con una sonrisa.

—Gracias — Respondió Sakura, esforzándose por mantener la compostura a pesar de su incomodidad.

Kakashi observó a Sakura, preocupado por su bienestar. Intentaba mantener una conversación casual con Hanabi y Ayame, pero no podía dejar de notar el malestar de su esposa.

— Entonces, Kakashi.— Dijo Hanabi.— Cuéntanos más sobre cómo terminaste casado. Fue una sorpresa para todos nosotros.

Kakashi sonrió levemente, mirando a Sakura antes de responder. Kakashi tomó un sorbo de su bebida antes de responder, mirando a Sakura con una mezcla de cariño y preocupación.

— Fue una situación un poco complicada. Verán, el padre de Sakura quería casarla con alguien más, alguien con quien ella no quería estar. Para evitar eso, hice un trato con él. Le pagué para que nos permitiera casarnos.

Hanabi y Ayame intercambiaron miradas sorprendidas.

—¿Le pagaste a su padre?— Preguntó Ayame, incrédula.

—Sí —respondió Kakashi.— Fue la única manera de asegurarme de que Sakura no terminara en una situación peor y aparte su padre me pagó para hacerla regresar a casa.

Sakura miró a Kakashi con gratitud, recordando todo lo que él había hecho por ella. Su amor y su sacrificio la conmovían profundamente.

— Lo cual, no termine cumpliendo porque, ella prefirió quedarse conmigo y continuar nuestro matrimonio.— Le decía sonriendo a Sakura.

Ella le regreso una sonrisa genuina a el.

— Fue un acto noble, Kakashi.— Dijo Hanabi, sonriendo.— Y se ve que ahora se aman ¿Verdad?

— Gracias, Si ahora es un matrimonio real.— Respondió Kakashi.

— Ay Kakashi, es que es raro tener te aquí y no como nuestro cliente favorito.

— Si, es que envidia te tengo Sakura, me imagino que siempre disfrutas estar en la cama de el.— Recordaba aquellos momentos.

Sakura se atraganta un poco con la bebida.

— Pero cuéntenme ¿Que han hecho ustedes?

La conversación continuó en un tono más ligero, con Hanabi y Ayame compartiendo historias del pasado y anécdotas divertidas y sobre todo mi que habían vivido con Kakashi, cada vez, hablaban de como habia sido Kakashi en la cama con ellas o con otras mujeres, Sakura comia en silencio, se sentia incómoda, pero, se repetia en la cabeza que solo, seria unos días.

Después de un rato, Kakashi se levantó, indicando que era hora de regresar a la habitación.

— Gracias por la comida y la compañía —dijo Kakashi.— Nos retiraremos a descansar un poco más.

—Por supuesto, descansen bien.—Respondió Ayame.— Si necesitan algo, no duden en pedirlo.

— Sakura, si necesitas ayuda en bañar a Kakashi, hablamos...

Las dos comenzaron a reír, Sakura se reía de lo incómoda que se sentía y para que no hacer ningún drama.

Kakashi y Sakura regresaron a su habitación, donde Sakura se dejó caer en la cama con un suspiro.

— No puedo esperar a que esto termine.— Murmuró Sakura.

Kakashi se sentó a su lado, acariciando su cabello.

— Lo sé. Pero pronto estaremos en un lugar mejor. Solo necesitamos un poco de paciencia.

Sakura asintió, cerrando los ojos y dejándose llevar por el cansancio. Kakashi la observó por un momento, asegurándose de que estuviera cómoda, antes de acomodarse a su lado. Sabía que los próximos días serían difíciles, pero estaba decidido a hacer todo lo posible para protegerla y asegurar su bienestar.

Esa noche, mientras Kakashi dormía profundamente, Sakura se encontraba despierta, incapaz de encontrar consuelo en la cama. El silencio de la habitación contrastaba con sus pensamientos agitados. A pesar del ruido que había en la parte de la cantina.

Miraba las sombras en las paredes y el techo, su mente recreando imágenes involuntarias de Kakashi con Hanabi y Ayame. La idea de que él hubiera compartido momentos íntimos con ellas en esa misma habitación la inquietaba profundamente. Cada susurro de la noche, cada crujido de la madera parecía traerle a la mente esas imágenes, intensificando su incomodidad e inseguridad que comenzaba a crecer en ella.

Intentó cerrar los ojos y pensar en otra cosa, pero las imágenes seguían apareciendo, como una película que no podía detener. Se levantó en silencio, tratando de no despertar a Kakashi, y se acercó a la ventana. El aire fresco de la noche la ayudó a calmarse un poco. Miró la luna y las estrellas, buscando una distracción en el vasto cielo nocturno.

Sus pensamientos volvieron a cómo Kakashi la había rescatado de una vida que no quería volver a vivir. Volteó a verlo sabía que él la amaba y que estaba haciendo todo lo posible para protegerla. Pero las inseguridades seguían ahí, alimentadas por las palabras y risas de Hanabi y Ayame durante la cena.

Finalmente, volvió a la cama, tratando de enfocarse en los aspectos positivos. Se acurrucó junto a Kakashi, buscando el consuelo de su cercanía. Aunque no podía borrar las imágenes de su mente, se prometió a sí misma que hablaría con él al respecto en la mañana, quería serle sincera.

Cerró los ojos y, poco a poco, el cansancio finalmente la venció, llevándola a un sueño inquieto. A pesar de sus preocupaciones, sentía la calidez y la protección de Kakashi a su lado, sentía como el se movía y la abrazaba, escondia su rostro en el pecho de el, para tratar de dormir.

Continuará....🌹

🌹La Princesa & El Ladrón🌹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora