¿Me estás tirando?

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Violeta la beso con necesidad y Chiara lo noto enseguida. Cuando se recuperó un poco rápidamente giró sus cuerpos y quedó encima del de Violeta, haciendo que esta gimiera por el contacto de sus cuerpos desnudos. Chiara no se entretuvo mucho ya que sabía que Violeta seguramente estaría empapada, por lo que la beso en la boca e hizo lo mismo que ella le había hecho pero más rápido.

Siguió besando su mandíbula, cuello, donde se quedó más de lo que esperaba de lo mucho que le gustaba besarla ahí, mandíbula, clavícula, pechos, donde también se quedó más tiempo haciendo que Violeta empezara a suspirar, vientre y ombligo. Cuando llegó a su cintura le quito los pantalones con facilidad, al ver si ropa interior totalmente empapada sonrió y la beso por encima. Haciendo que Violeta gimiera de necesidad, ya tenía los ojos cerrados, la respiración agitada, la boca entreabierta y buscaba con sus manos la cabeza de Chiara para empujarla hacia ella.

Chiara sonrió al verla y le quito el tanga destrozado,  no perdió tiempo con ella, pero se deleitó por un momento en la visión de su novia completamente desnuda, disfrutando del poder de hacerla sentir así. Comenzó a besar el interior de sus muslos, cada vez acercándose más a su centro de placer, pero aún sin tocarla donde más lo deseaba. Los gemidos de Violeta se volvieron más intensos, su necesidad era palpable en cada sonido que escapaba de sus labios.

Finalmente Chiara decidió que había esperado lo suficiente, bajó la cabeza y dejó que su lengua hiciera el trabajo, comenzando con suaves caricias que pronto se volvieron más firmes y rítmicas. El sabor de Violeta era algo que nunca dejaría de encantarla, y el sonido de sus gemidos aumentaba la intensidad de su propia excitación.

Violeta arqueó la espalda y dejó escapar un grito ahogado, sus dedos enredándose en el cabello de Chiara, empujándola más cerca, necesitando más. Chiara la complació, aumentando la velocidad y la presión de su lengua, sintiendo cómo los muslos de Violeta temblaban a su alrededor.

-¡JODER AMOR!- gimió Violeta con desesperación y deseo.

Chiara introdujo dos dedos dentro de Violeta mientras seguía succionando y lamiendo su clítoris. Los gemidos de Violeta se volvieron casi frenéticos, y Chiara sintió cómo los músculos de su novia se contraían a su alrededor, prácticamente ahogándola. Antes de que Violeta pudiera decir alguna cosa, su cuerpo se tensó y se arqueó en un intenso orgasmo. Chiara no dejó de moverse hasta que sintió que Violeta se relajaba, cuando lo hizo Chiara se movió hacia arriba, besando el cuerpo de Violeta nuevamente, pero esta vez con ternura y calma. Cuando llegó a sus labios, la besó suavemente, compartiendo el sabor de su placer.

Se quedaron un rato besándose hasta que el cansancio empezaba a aparecer de verdad. Chiara se tumbó sobre el cuerpo de Violeta, posando su cabeza entre sus pechos mientras la abrazaba y sentía las caricias de esta por la espalda.

-Oye Kiki- susurró Violeta, por si está ya se había dormido, mientras le seguía acariciando la espalda.

-Mhm...- balbuceó Chiara con los ojos ya cerrados.

-Que te parece si nos hacemos un álbum de fotos compartido, bueno, compartido no, pero él mismo. Tipo que nos hacemos un álbum repetido para las dos.- dijo Violeta sonriendo mientras la seguía abrazando simplemente de pensar en su idea, le encantaría que tuvieran un álbum compartido en el que las dos fueran añadiendo fotos importantes.- Si quieres también podemos meter alguna foto de Rus, Denna o Martin, de quien quieras que sea importante.- dijo pensando en que con sus mejores amigos también podrían estar presentes, aunque no tanto como ellas.

Amor temporal ||KiviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora