17: La Chispa de los Celos

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Victoria salió de la escuela con el ánimo decaído, todavía sintiendo el peso de los días de encierro en su habitación. Al girar la esquina para dirigirse a casa, sus ojos captaron una escena que la hizo detenerse en seco. Michael estaba allí, otra vez, hablando con la misma muchacha de la otra vez. Pero esta vez fue peor: la chica le puso la mano en el hombro y Michael no la quitó.

Un sentimiento de furia y celos se encendió en su pecho. Su rostro se tensó y apretó los puños, intentando contener las lágrimas. Sin pensarlo dos veces, siguió caminando, decidida a no mostrar debilidad.

Michael, quien se percató de su presencia, se despidió rápidamente de la muchacha y, asegurándose de que nadie lo veía, corrió tras Victoria.

—¡Victoria! ¡Espera! —llamó, alcanzándola y poniéndose a su lado—. ¿Estás celosa otra vez?

Victoria se detuvo bruscamente y lo miró con los ojos llenos de rabia.

—No estoy para bromas, Michael —dijo con voz fría—. No entiendo cómo puedes ser tan insensible.

Michael, viendo la seriedad en su rostro, levantó las manos en señal de paz.

—Lo siento, de verdad. No era mi intención molestarte. Ella es solo una amiga, nada más.

—¿Amiga? —replicó Victoria, sus palabras cargadas de dolor—. No parece que seas tan claro con ella. ¿Sabes lo que siento cuando te veo con ella? No entiendes nada.

Michael la miró con preocupación, notando la seriedad de la situación. Sabía que su relación había avanzado, y las bromas ya no eran apropiadas.

—Victoria, tú eres la única que me importa —dijo suavemente—. No quiero que pienses lo contrario.

Pero Victoria no podía ser consolada tan fácilmente. Se apartó de él y siguió caminando, su corazón latiendo con fuerza.

—Déjame sola, Michael. Necesito tiempo para pensar.

Michael se quedó quieto, observándola alejarse. Sentía un nudo en el estómago, sabiendo que la había lastimado. Quería arreglar las cosas, pero entendía que ella necesitaba espacio.

Victoria llegó a casa aún molesta, sintiendo una mezcla de rabia y tristeza. Ese día era el último de su cautiverio, pero la liberación física no alivió su tormento emocional. Subió a su habitación y se dejó caer en la cama, permitiéndose finalmente soltar las lágrimas que había estado reteniendo.

—¿Por qué duele tanto? —se preguntó en voz alta, abrazando la almohada con fuerza.

La relación con Michael era más que una simple amistad, y los celos que sentía eran una prueba de ello. Pero la sociedad en la que vivían complicaba todo, y cada día se sentía más atrapada entre su amor por Michael y las restricciones impuestas por su familia y su entorno.

Esa noche, Victoria se durmió con el corazón pesado, deseando que las cosas fueran diferentes y que el amor no tuviera que ser tan doloroso.

Más tarde esa noche, mientras Victoria estaba sumida en sus pensamientos, escuchó un leve ruido en la puerta. Se levantó y vio un pequeño papel deslizarse por debajo de la puerta. Con el corazón latiendo rápido, recogió la carta y la abrió. Era de Michael.

"Querida Victoria,

Sé que estás molesta y lo lamento. Quiero que sepas cuánto significas para mí. Mira por la ventana.

Con amor,
Michael"

Victoria, sin muchas ganas, se acercó a la ventana y miró hacia afuera. Lo que vio la dejó sin palabras. Michael había recolectado un montón de flores y había formado un corazón en el césped del patio. A pesar de su enojo, no pudo evitar sonreír un poco.

Michael, al notar que ella lo miraba, comenzó a bailar un vals solo. Levantó los brazos en un gesto dramático y gritó:

—¡Se siente tonto bailar vals sin ti!

Victoria no pudo evitar reír ante la escena. Michael siguió bailando tontamente, haciendo gestos exagerados que finalmente le arrancaron unas carcajadas a Victoria. Por un momento, el peso de sus problemas se alivió con la simple alegría que él le ofrecía.

Al verlo, Victoria sintió que, a pesar de las dificultades, había algo genuino y hermoso entre ellos. Y aunque la sociedad y su familia intentaran separarlos, siempre encontrarían una manera de estar juntos, incluso en los momentos más oscuros.

Tu mundo y mi mundo (MJ fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora