Capitulo Veintinueve

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[Jueves]

Tras varios intentos fallidos de abrir los ojos finalmente lo logro.
Al despertar mi atención se pasea en la habitación, la cama, las pesas, las cadenas... espera,¿Pesas? En mi habitación no hay pesas.

Me siento rápidamente y empiezo a detallar la habitación donde estoy. Ropa varonil sobre una silla; una mesa de noche al lado mío que arriba puedo apreciar el estuche de los lentes de contacto; unas pesas en una esquina; unas cadenas con un poco de mugre en el techo; una silla de madera; un clóset; y finalmente la puerta de lo que creo es el baño.

Me pregunto dónde estoy, lo último que recuerdo es haberme desmayado en el bosque gracias al dolor de cabeza que sufrí. Pero bueno, ya eso es pasado, lo mejor que puedo hacer ahora es buscar una forma de saber dónde estoy.

Aunque.... Revisar no sería malo...

Empiezo a curiosiar las lentillas y abro su estuche, encontrándome con unas lentillas color negro. Sonreí ante la idea de como me vería con las lentillas y las volví a colocar en su sitio. Abrí una gaveta de la mesa de noche, solo para llevarme la sorpresa de que esta, está repleta de estuches de lentillas.

-¿Quién usa tantas lentillas? - susurro para mí misma.

-Yo - dice una voz a mis espaldas. Me volteo rápidamente y me encuentro con Joseph, el cual tiene la mirada baja y el cabello mojado - ¿Me puedes pasar las lentillas negras?

-¿Puedo verte? - me niega rápidamente - por favor...

-No, en algún momento, pero por ahora no - asiento y le pasó las lentillas - ¿Que hacías en el bosque?

-Yo... estaba leyendo - asiente una vez que se coloca las lentillas - ¿Cómo llegue aquí?

-Vi que faltabas y salí a buscarte - me dice rápidamente - ¿Que hacías con el diario de mi abuelo? - levanto una ceja sin entender y el me tira un libro/cuaderno que llevé ese día al bosque.

-Solo quería leerlo...

-¿Sabes que si Marcus se entera te va a poner a trabajar durante semanas?

-Ya se... tu papá es... - me callo rápidamente al darme cuenta que la e jodido.

-¿Quién te a dicho que Marcus es mi padre? - me pregunta alzando el tono de voz, sin embargo, yo no digo palabra - ¡Responde!

-¿Que tiene de malo?

-¡Que eso no es tu incumbencia! - lo miro sorpresivamente.

¿Ayer me dijo que me amaba y ahora me está faltando el respeto así?
En fin...
La hipocresía.

-Escuchame, no tienes permitido decir ni una sola palabra sobre mi o lo que as visto en esa habitación,¿Entendido? - asiento - ¿Pregunté que si entendiste?

-S-Si.

-Sal de aquí, ahora.

★★★

Una vez terminada mis prácticas decidí sentarme a descansar y beber un poco de agua, el dolor de cabeza aún estaba presente y la vista se me nublaba en vez en cuando, por lo tanto, me caí un par de veces.

También sigo con la incógnita de que si Joseph es un Vampiro o no. Ahorita el único que podría ser capaz de responderme ducha duda, sería Max.

Al ver a Max dirigirse a su oficina decidí seguirlo, el entra y segundos después yo toqué la puerta.

Escuché un gruñido del otro lado junto a un "pase" que sonó más bien a una amenaza de que si lo hacía, el me mataría.

Entré de todas formas.

En medio del caos⅓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora