Felipe
Estudie negocios internacionales y ciencias económicas. La empresa de mis padres era todo un conglomerado y tenía que estar bien preparado para asumir mis funciones. Cuando me gradué, de inmediato pasé a formar parte de las empresas familiares, me llevo casi un año empaparme de todo lo relacionado con importación, exportación, manejo de marketing y muchas cosas más. Ser conciente de la bolsa de valores y un sin fin de cosas más.
Mi vida era muy solitaria, pero estaba acostumbrado porque así fue desde que era un niño. Tengo veinticinco años y en este tiempo no tengo nada real en mi vida. Salgo con mujeres ocasionalmente para llenar un vacío que nadie puede llenar. Mi padre y mi madre siguen casados, pero dejaron de vivir juntos desde hace muchísimos años, él se fue con otra mujer, tiene otra casa, otros hijos. La tiene como la amante pero en realidad es más su esposa. No se divorcia de mamá por miedo a perderlo todo. Así que, se les hizo muy fácil seguir aparentando que son un matrimonio feliz, aunque cada uno hace su vida aparte.
Creí con eso y es muy doloroso, no conocía otra cosa que los placeres momentaneos. Tengo tanta suerte con las mujeres que jamás me he planteado el matrimonio o el tener una familia. El amor se acaba o tal vez no siquiera existe.
Aquella tarde estaba nublado, el invierno está cerca, veía desde los cristales desde mi gran oficina, era el vicepresidente comercial, tenía la mejor vista de todo el edificio.
— Hola guapo, viene a invitarte a tomar un café ... Entró Isabel a mi oficina sin previo aviso, no me gustaba que hiciera eso, pues podía estar ocupado. Con ella tenía una relación ocasional, no éramos novios, solamente nos buscamos para el placer. Ella al igual que yo, venimos de familias disfuncionales. Nos entendemos y de cierta manera nos hacemos compañía, pero de amor, no había nada.
— Te he dicho que te anuncies con la secretaría, ahora estoy muy ocupado.
— Está bien, está bien, no te enojes, pero anda vamos solo por un café, el clima es fresco y no quiero ir sola ... Después de mucha insistencia, acepte, con la condición de que me dejaría de molestar por lo que resta del día. El día era muy melancólico para mí gusto. Entramos a una cafetería, ordenamos. Isabel pido algunos postres y yo solo un café, saque mi tarjeta de crédito y pague, así siempre era, una tarjeta de crédito para las mujeres con las que salía.
Fastidiado sali del local y para mí muy mala suerte una mujer distraída me derramó el café caliente sobre la ropa, era innecesario decir que estaba demaciado caliente y quema.
Después de todo mi drama y al darme cuenta que era Letizia Ortiz, la niña que me había robado el corazón de niño. Me arrepentí de mi comportamiento. Pero estaba acompañada de Sonsoles, hacía muchísimo tiempo que no la veía, y era como si la historia de nuestro odio se volviera a instalar en mi memoria. Fui grosero, pero ella también lo fue conmigo. Letizia se la llevó, y yo solo me quedé observando. Se había convertido en una hermosa mujer, seguía teniendo esos ojos tiernos.
Me fui a mi departamento, después de dejar a Isabel en una estación de taxis, no tenía cabeza para seguir aguantando su presencia. Me cambié el traje y le pedí a la señora de limpieza que lo llevará a la tintorería. Nunca me había dado tanto gusto que alguien me derramará el café. Trabaja en TVmedia, sonreí.
Le pedí a mi secretaría que se encargará de enviar un paquete con una nota en su interior. Estaba muy interesado en volver a verla. Me había comportando como un grosero frente a ella. Aún recuerdo que en la escuela no fui el mejor amigo y compañero. Y ella. Ella siempre fue cálida y dulce. Por lo que veo sigue igual.
Me concentre en el trabajo, esperando una llamada que no llegaba. El día estaba por terminar. Había logrado obtener su número telefónico, pero esperaba a que ella llamará, tal vez tenga compromiso y mi nota fue algo inapropiado.
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La Encrucijada del A+A
RomanceLetizia, Sonsoles y Felipe, se conocen desde que eran unos niños y asistían a la misma escuela. Letizia como la niña becada, Sonsoles como la niña rebelde y Felipe, como el niño que tiene la vida resuelta. Dos de ellos se amaban desde la infancia, p...