Niñez

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Nota: Para algunos un capítulo aburrido, pero les dije que la historia irá lenta.

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Me ha tocado hacer un trabajo con ese niño. Al principio pensé que era bueno, pero me confunde con su actitud. Aunque es muy bonito, sus ojos son azules, un azul cielo, si no fuera tan grosero, me gustaría ser su amiga. Pero en ratos me trata bien y en otros mal.
A Sonsoles creo que la prejuzgue, es super divertida y ocurrente. Este primer día de escuela me he divertido mucho gracias a ella.

— Está muy bonita tú casa ... Ese día por la tarde, le pedí permiso a mis papás para ir a casa de Sonsoles. Solo vivía en cinco casas de la mía y no hubo ningún problema. Mi mamá me llevo hasta la puerta y quedó satisfecha al cerciorarse de que hubiera un adulto responsable. Su papá estaba trabajando, solo estaba su nana. La cuál muy amablemente nos sirvió la merienda.

— Gracias. Papá tiene un excelente gusto para el decorado, me urge crecer para ayudarle. Papá trabaja todo el día, es periodista y quiero seguir sus pasos ... Casi me atragantó con mi bebida.

— Mi papá también es periodista, se llama Jesús y mi mamá es reportera, bueno era, dejó su trabajo para venir aquí. ¿Y tú mamá?

— Yo no tengo mamá, murió el año pasado ... Me sentí muy apenada. Sonsoles solo hablaba de su papá, pero jamás de su mamá, y el decir que había muerto con aquel tono tan casual, me dejaba ver qué era una persona muy fuerte a su corra edad. Yo no concebía la idea de algún día perder a mi madre. En mi había remordimiento, pero ella estaba como si nada.

— Lo siento, no debí preguntar.

— No te preocupes. Tengo a mi papá y él lo es todo para mí, es mi gran héroe. El dice que somos un equipo.

— Que bueno, yo también me llevo muy bien con mi papá. Con los dos en realidad. Me imaginó que has de extrañar mucho a la tuya.

— Oye no te ofendas, pero no me gusta hablar de eso, es complicado. Mejor ven te muestro mi habitación... Al entrar es como si llegará a un cuarto de niño. Todo era fútbol y deportes. Había revistas por todas partes.

— Por lo que veo te gustan mucho los deportes

— Así es, le he agarrado el gusto gracias a papá. ¿A ti que es lo que más te gusta?

— Leer, tengo muchos libros y al igual que tú, yo también quiero seguir los pasos de papá. Mi abuela vive en Asturias y trabaja en la radio, a veces solía llevarme con ella ... Extrañaba mucho a mi abuela, estás semanas sin ella han sido muy duras. Hablamos por teléfono casi todos los días, pero no es lo mismo, sus abrazos y besos me hacían mucha falta.

— Tenemos el mismo sueño entonces, a qué estar siempre juntas ... Me abrazó, y yo le correspondía. Sonsoles es muy extrovertida, incluso cuando la molestan ella saca en todo su esplendor su personalidad. Es fuerte para su corta edad.

— Si. Y no te llevas muy bien con Felipe ¿verdad? ... Su gran sonrisa se borró en un instante. Hoy a sido uno de esos días en los que me gusta meter la pata en todo.

— No, él y yo no somos amigos, ni lo seremos nunca. Es un niño caprichoso y egocéntrico. Pero no lo culpo, viene de una familia miserable. Ellos no se detienen con nada y son capaces de arruinar todo lo que se les antoje. No te juntes con él Letizia ... Me quedé helada, solo es un niño de ocho años, nadie a esa edad tiene tanta maldad. Decidí creer que Sonsoles estaba exagerado. A mí me gusta crear mi propia opinión de las personas.

— Me ha tocado el proyecto con él, imposible no hablarle... Lo que si es que no se cómo le voy a hacer, me pone nerviosa solo de pensarlo. Si tuviera otra actitud, me haría las cosas más fáciles. Solo espero que trabajar con él no sea tan caótico.

La Encrucijada del A+ADonde viven las historias. Descúbrelo ahora