La Vida en Otro Campamento Desde Cero: Capítulo 2

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Capítulo 2

Un Hombre Extraño.

El sonido de la pluma sobre el papel es lo único audible en esta oficina. En frente de mi hay dos pequeños sofás, desde aquí puedo ver a Félix disfrutar de un libro. Miro las pilas de papeles que hay por completar y cierro mis ojos unos segundos.

«Hoy debo terminar con todo este papeleo, de no hacerlo, tendré mucho más mañana.» Continuo en mi deber, mientras estamos aquí.

Solo los dos...

Últimamente han estado volviendo a mi memoria aquellos momentos, nunca los había olvidado, pero siento que su recuerdo se hace más y más vivido. Ahora debo esforzarme por las elecciones que se harán; quizás solo estoy melancólica.

Me levanto, pero, antes que pueda decidir algo, la puerta se abre.

Wilhelm entra, inclinándose y posicionándose detrás de la puerta. Me quedo unos segundos mirando hasta que veo la silueta que va entrando. Vistiendo una bata y con una expresion confiada, lo vuelvo a ver. El entra a la oficina, desprovisto de ese temor que tenía antes.

El aura anterior también ha desaparecido, pero eso solo me deja más alerta.

Como si esto fuese parte de su plan.

—Buenos días. —Se inclina, manteniendo esa expresion desagradable.

Cierro por unos segundos mis ojos y le señalo el sofá delante de Félix.

—Siéntate —digo, y esté empieza a caminar siguiendo mi orden.

Félix se levanta sorprendida, mirando a Marco con sorpresa.

—¡Nya! Estás casi desnudo. —Félix señala hacía Marco, pero este no parece realmente sorprendido.

Se cruza de hombros, suspirando con una sonrisa.

—No sé dónde tienen mi ropa, me acabo de despertar y solo me dejaron esta bata. —Él se sienta en el sofá, como si nada le importase.

Escudriña la oficina, para luego mirarme a los ojos. Su mirada seria, sus ojos cafés fijos en los míos.

—Has roto las cadenas del destino. —Él se levanta, inclinándose ante todos—. No me he presentado correctamente. ¡Mucho gusto! Soy Marco Luz, un inventor.

«¡Fue lo que se dijo en mi sueño!» Abro mis ojos en sorpresa, pero rápidamente tomo la compostura. Si le dejo ver así sea un poco de mi se aprovechará de eso. «Es solo un estafador más.»

Félix mira hacía Marco con curiosidad, mientras que Wilhelm se mantiene al margen. Al ver que quien debe romper el silencio soy yo, entonces abro el cajón de mi escritorio. Tras abrirlo veo esos dos objetos extraños con los que vino.

Uno parece un espejo con partes de metal, no sé qué hacen los botones a su costado, pero cuando imbuí maná no hubo reacción alguna. No creo sea algo peligroso, pero los metías tienen todo tipo de formas, asi que lo mejor es estar alerta.

Además de ello está esta cuerda rara hecha de un material que nunca había visto; no sé qué utilidad tenga, pero ambas cosas se ven valiosas.

—Primero me gustaría que respondieses unas preguntas —con una voz sería, pero no intimidante doy inicio al interrogatorio. No me interesa presentarme, especialmente ante un estafador.

«Además, él sabe quién soy».

Hice que unos magos lo inspeccionaran para saber más sobre él; lo que descubrí fue algo crítico.

Re:zero SC| Empezando la Vida como un Ingeniero desde CeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora