—Lamento no haber estado en el funeral de Dagmar.
Keanu mencionó mientras se aproximaba a Petrus y a James, sostenía en sus manos dos pares de guantes blancos que les extendió a cada uno, los tres se encontraban en la caballeriza del centro de equitación que Keanu solía frecuentar, decidieron disfrutar de un momento a solas, así que alquilaron el lugar solo para ellos tres. Ya vestían la indumentaria, por lo que era momento de elegir a sus caballos.
—No te preocupes, solo asistió su familia. También llegó Stanley, solo le dejó una rosa, habló con su madre y luego se fue, supongo que aún la ama.
—¿Y aún lo dudas? —dijo James, mientras se colocaba sus guantes— Tú fuiste quien se involucró con ella, ella fue la que le fue infiel a su marido, es evidente que él está lastimado, quizás nunca dejó de quererla.
—Tienes razón.
—En todo caso. —agregó James— Me disculpo porque tampoco pude asistir, ese día tuve que viajar a Miami junto a Bárbara, teníamos una cita con el doctor.
—¿Ella está bien? Mencionaste que se sentía un poco mal.
Keanu se mostró preocupado al escuchar lo que James dijo, así que se aproximó a ellos, instándolos a comenzar su andar por los pasillos de los establos.
—Creímos que estaba enferma, resulta que tiene dos meses de embarazo.
—Serás padre. —Petrus sonrió llevando una de sus manos hacia su hombro para brindarle dos palmadas— Felicidades, viejo.
—Seré tío por segunda vez. —dijo Keanu con emoción— Lo cuál me preocupa, soy el único del grupo que está soltero y que no tiene ningún heredero.
—¿Qué hay de Katherina? Supe que salieron por un tiempo.
—Las cosas iban bien, pero... No logramos coincidir, ella estaba ocupada en su carrera, yo lo estoy con la banda y mis ocupaciones personales, además de ser el baterista de la banda, soy doctor. Tengo otras preocupaciones más allá de lo sentimental.
—Siempre creí que Keanu sería el que terminaría por casarse y tener hijos, en cambio fue Petrus el que nos sorprendió con Ava y con Landon. —James rio tras decir esto— Por cierto, ¿cómo está Landon?
Petrus dirigió su vista hacia uno de los establos, observando al caballo negro que tenía por nombre: Arion. Se detuvo para apreciarlo con más detenimiento.
—Las cosas no han sido sencillas desde que Dagmar murió... He tratado de manejar la situación lo mejor posible. Le asignaron una psicóloga. Lo visita dos veces por semana, también está intentando trabajar conmigo.
—¿Contigo? Creí que solo sería para el niño. —cuestionó Keanu.
—También creí eso, pero tuve que decirle que yo pasé por lo mismo, ustedes saben que mi padre y mi madre también se suicidaron. No fue fácil llevar esa situación.
—Especialmente para ti que atravesaste la pérdida y te viste forzado a cuidar a Katherina que estaba igual o peor de afectada que tú.
—Lo sé. La psicóloga analizó esas carencias de mi parte y supo que yo sólo no podría manejar la situación de Landon.
—Petrus. —Keanu centró su mirada en él— ¿La situación estaba tan mal con Dagmar como para que haya sido capaz de hacer eso?
—Supe que sufría depresión, estaba medicada, los policías que llevan su caso se dieron por enterado de eso la tarde que murió, había tomado mucho y añadió pastillas, así que, supongo que atravesaba una situación difícil, admito que nuestra relación pudo haberla afectado, pero, no podía ceder ante sus peticiones.
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CABELLOS NEGROS. ©
Mystery / ThrillerEsas pastillas podrían acabar con el vacío que ha sentido por los últimos años. Su cerebro está perdido, quiere algo diferente, venganza, odiar, ejecutar... Está cansado, triste, vacío, tal como un cadáver vivo que necesita soñar. No conoce el amor...