Después de un día lleno de alegría y sorpresas en San Sebastián, la familia Le Normand se preparaba para la siguiente etapa de su celebración navideña. Esta vez, el destino era Bilbao, donde pasarían la Nochevieja con la familia de Alicia. Unai y su familia habían preparado un cálido recibimiento para la familia Le Normand, y los niños estaban emocionados por ver a su tío y celebrar la llegada del nuevo año.
La mañana siguiente, después de abrir todos los regalos en San Sebastián, Alicia, Robin, Leo y Matteo empacaron sus cosas para el viaje a Bilbao. Los niños, especialmente emocionados por la idea de conocer más regalos, se pusieron sus camisetas del Athletic Club, deseosos de impresionar a su tío Unai con su apoyo incondicional al equipo. Leo llevaba una camiseta con el número 10, mientras que Matteo lucía un conjunto de miniatura del equipo.
El viaje en coche hacia Bilbao fue animado. Los niños hablaban sin parar sobre los regalos que esperaban encontrar y sobre su deseo de pasar un buen rato con sus primos. Alicia y Robin estaban igualmente emocionados, anticipando la celebración de la Nochevieja y la oportunidad de compartir la noticia del embarazo con la familia de Alicia.
Al llegar a la casa de Unai, se encontraron con un ambiente festivo. La casa estaba decorada con adornos navideños y luces que daban un aire cálido y acogedor. La familia de Alicia los recibió con abrazos y sonrisas, y pronto el aroma de una deliciosa cena de Nochevieja llenó el aire.
Los niños fueron rápidamente conducidos a la sala donde Papa Noel había dejado algunos regalos adicionales. Leo y Matteo corrieron hacia los paquetes con ojos brillantes. Los regalos no decepcionaron: Leo encontró una bicicleta roja brillante con ruedas de montaña, perfecta para sus paseos y aventuras, mientras que Matteo descubrió un coche eléctrico en miniatura, un elegante Audi que se movía a control remoto. La emoción de los niños era palpable mientras exploraban sus nuevos juguetes.
— ¡Mira, mamá, un coche de verdad en miniatura! —exclamó Matteo, mientras se subía al pequeño Audi y lo manejaba con habilidad.
Leo también estaba encantado con su bicicleta. La rodeaba con orgullo, prometiendo a sus padres que la usaría para recorrer el vecindario con su nuevo juguete.
Con los niños entretenidos y felices, Alicia y Robin encontraron el momento perfecto para reunir a la familia de Alicia y compartir su gran noticia. La cena de Nochevieja estaba en su apogeo, con todos reunidos en la mesa, disfrutando de platos tradicionales y brindando por el año que estaba por venir.
Después de que la cena llegó a su fin y el brindis de Nochevieja se realizó, Alicia se levantó con una copa de champán en la mano, atrayendo la atención de todos.
— Antes de que empiece el nuevo año, tenemos algo muy especial que queremos compartir con todos ustedes —dijo Alicia, mirando a su familia con una sonrisa emocionada.
Todos miraron curiosos, y Robin se unió a Alicia en el centro de la sala. Con una profunda respiración, Robin comenzó a hablar.
— Como saben, este ha sido un año muy especial para nosotros. Y hoy queremos compartir una noticia que hará que este año sea aún más memorable —dijo Robin, mientras sacaba una ecografía de su bolsillo—. Estamos esperando otro bebé. Alicia está embarazada de nuevo.
La sala estalló en vítores y felicitaciones. Unai, visiblemente emocionado, se levantó y abrazó a su hermana y a Robin con un gran entusiasmo.
— ¡Enhorabuena! —exclamó Unai—. ¡Eso es increíble!
La familia de Alicia también se unió a las felicitaciones, abrazando a Alicia y Robin y compartiendo su alegría por la llegada del nuevo miembro de la familia. La noticia del embarazo trajo una ola de felicidad y emoción a la celebración de Nochevieja.
Los niños, aunque distraídos con sus nuevos juguetes, también se unieron a la celebración. Leo, con su bicicleta a un lado y Matteo, con su coche de juguete, miraban a sus padres con orgullo. La noticia del bebé en camino era la guinda perfecta para una celebración ya llena de amor y alegría.
La Nochevieja continuó con risas, juegos y más celebraciones. Alicia y Robin se sintieron rodeados por el cariño de su familia, y la promesa de un nuevo año lleno de momentos especiales se hizo aún más real con la noticia de su próximo hijo.
Cuando el reloj marcó la medianoche y el nuevo año comenzó, la familia Le Normand se abrazó y brindó por el futuro, celebrando no solo la llegada de un nuevo año, sino también la llegada de un nuevo miembro a su familia. Con el corazón lleno de esperanza y amor, la familia se adentró en el nuevo año, lista para enfrentar lo que viniera juntos.
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El gol del corazón: La historia de Robin y Alicia
Short StoryEn el vibrante mundo del fútbol, donde el césped y el brillo de los focos definen el día a día, es fácil olvidar que detrás de cada figura pública hay historias de amor, sacrificio y esperanza. Este es el relato de Robin Le Normand, un talentoso def...