Seducida por un Clarck (II)

Capítulo 35: La propuesta.

Narrador Omnisciente.

20 de Abril, 2024.

Era de madrugada, al rededor de las cinco y media de la mañana cuando los primeros rayos del sol saludaban los altos edificios y a los habitantes dentro y fuera de ellos. 

Muchos durmiendo, otros laborando y algunos otros estudiando o celebrando. Familias, parejas, amistades y más. Iniciando su día a día en la ajetreada ciudad que nunca tiene descanso.

Y luego estaba ella.

Joven risueña de alma alegre que con el sudor recorriendole la frente acababa de culminar unos de los entrenamientos más duros que le había impuesto su coreógrafa personal para el evento próximo que estaban por presentar.

Cada vez más el mundo empezaba a conocerla, siendo su talento y ganas de brillar lo que la estaban catapultando a la fama y el estrellato, no siendo el baile su único talento sino además su amor por las letras e historias por contar lo que hace que muchos la admirarán.

Y es que ella era muy especial, al igual que el día de hoy.

¿La razón?

Era el día de su cumpleaños.

Un año más de vida alegrándole la vida a varias personas del mundo con su presencia, pero sobre todo, por su entrega y amor cuando lo demostraba. Convirtiéndose en aquella mujer independiente que lucha día tras día por sus sueños, como ahora, que agotada pero satisfecha abandona el estudio de baile ya duchada y vestida, adentrándose en el estacionamiento en dónde aguarda el nuevo vehículo deportivo que había adquirido con esfuerzo.

No era una de las mejores detrás del volante, pero era prudente, y eso era lo que la motivaba a desplazarse lenta y de forma segura por las calles de la ciudad. Claro está no sin antes enmendarse al señor que la guía en el cielo, pidiendo por su vida y la de los demás conductores y transeúntes.

Estaba de muy buen humor el día de hoy, y su ancha sonrisa adornando sus hermosos labios era una señal de ello. Sabía muy bien, o al menos sospechaba, que algo le planeaban sus dos hermanas por el día de su cumpleaños, era de por sí una tradición en su familia, celebrar por lo alto el año más de vida de cada uno de los integrantes de su núcleo.

Aunque un poco extrañada ojeaba su teléfono, notando que aún no había recibido ni la primera felicitación, ni siquiera por su padre, que desde las doce de la noche en años anteriores se aseguraba de llamarla, queriendo ser el primero en desearle un feliz y bonito cumpleaños.

—De seguro se ha quedado dormido —suspira, siendo entonces su lado lectora el que la impulsa a viajar hasta la biblioteca que le han obsequiado semanas atrás, convirtiéndose en uno de sus lugares favoritos del mundo, no solo por su contenido, sino por la persona que ha tenido el muy enorme detalle con ella.

Y es que esa persona...

La pelirroja sacude la cabeza, intentando evadir esos frecuentes y persistentes pensamientos.

No era el momento adecuado.

Más no lo lograría por mucho, ya que más cerca de lo que ella se imagina el hombre encargado de volcar su mundo, mente y corazón de cabeza la acechaba, con uno de los planes más descabellados llevándose a cabo a sus espaldas.

Cómo por ejemplo ahora, que diversos hombres encapuchados la esperaban en el destino a llegar de la pelirroja, a esperas de las órdenes pactadas por el jefe que los ha contratado.

De que Sky White se llevaría una gran sorpresa era seguro, ¿Buena o mala? Eso estamos por descubrirlo.

—Buenos días, Denisse —sonriente saluda la chica de ojos verdes y pecas en su rostro a la encargada de mantener en orden el lugar que alberga millones de libros, siendo además cómplice de todo lo que ocurría, y estaba por suceder.