Capítulo 3: Chaqueta oscura.

1.9K 256 122
                                    

POV SAM:

—¿Y no te dijo ni su nombre?

—No.

—¿Edad?

—Menos.

—¿Número de teléfono? —Danna continúa interrogando, y yo blanqueo los ojos ante tanta insistencia.

—No, Dan. Ya te he dicho que sólo me prestó su chaqueta y sin más se desapareció...

—Extraño... —susurra —¿Cómo era su voz? —prosigue con el bombardeo de preguntas —¿De adolescente? ¿De rarito o de presumido?

Fijo la vista sobre la carretera, tratando de recordar y rebuscar entre el montón de recuerdos un poco difusos de ayer por la noche algo que me indicara alguna pista para poder responderle aquella pregunta.

¿Su voz?

Bueno...

Siendo completamente honesta no es que la recordara a exactitud. Sino más bien lo que causó, y lo mucho que me llegó a deslumbrar e intrigar por aquel tono tan electrizante, frío e indiferente.

Con cierto tinte demandante e inclusive arrogante. Más no en extremo.

Tenía voz de hombre apuesto y peligroso, aunque digan que deducirlo de aquella forma fuese una locura.

Y pues aquí estoy yo, bien estúpida, con su bendita chaqueta oscura entre mis brazos.

—No lo recuerdo —me limito a decir —.Estaba muy bebida... —No le miento.

—Bah, que lástima...—termina de darse por vencida.

Luego de ser salvada por aquel extraño pude encontrar a mis amigos bailando sobre la pista.

La mayoría de ellos se encontraban ya realmente ebrios a excepción de Mar que al menos podía mantenerse en sus cinco sentidos.

A Danna se le había descargado el celular y Georgina estaba inmensamente concentrada en vaciar todo el contenido de su estómago dentro de un inodoro.

Bratt se había esfumado durante unos minutos y ya para cuando apareció eran más de las tres de la madrugada.

Sospechoso, si me lo preguntan.

Y más cuando al volver el cuello de su camisa se encontraba bastante arrugado, y me atrevería a jurar que manchado por pintura labial.

De ahí cada quien se repartió a su casa, dejándonos a mi amiga y a mi en nuestro departamento.

Ya hoy martes nos dirigíamos a la universidad, llegando tiempo después a ésta y procediendo a iniciar con nuestra rutina del día a día. 

Clases, debates, estrés, frustraciones y puede que un poco de risas. ¡Y Oh claro! más estrés.

A eso del mediodía me reúno con mi grupo en una de las muchas cafeterías, platicando con ellos sobre la noche pasada y los proyectos a futuro.

—Siendo honesta me llama mucho la atención el periodismo especializado en moda —Fisher inicia con su plan de vida —Es como fusionar mis dos más grandes pasiones en una sola rama ¡Increíble! —Danna comenta entusiasmada, dándole un sorbo a su bebida de manzana.

Gin asiente pensativa, y Mariano sonríe con uno de sus brazos posados por encima de sus hombros.

—Mi sueño o meta de vida sin duda sería trabajar codo a codo junto a la firma de abogados Legal force —manifiesta esperanzado, procediendo a mirarme con diversión —Ya que anhelar trabajar con White Law Group siento que es avaricia —muerde su emparedado tras guiñarme el ojo, y su novia ríe dándole la razón.

Seducida por un Clarck (II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora