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Mientras las chicas se divertían probando las atracciones, Roshi y Oolong estarían espiando a las mujeres mientras se escondían en un pésimo disfraz de arbusto.
-Jejeje, te lo digo, Oolong, este método para espiar a las jovencitas es perfecto. No tienes por qué agradecérmelo.
-Tiene razón, maestro Roshi. No sé por qué no me di cuenta antes, pero usted es un genio.
-¡PUMM!
Inesperadamente, ambos pervertidos se sobaron la cabeza mientras veían detrás de ellos, con terror en sus caras, a Bulma rodeada de varias mujeres a simple vista furiosas, queriendo caerle a golpes al anciano y al cerdo.
-¡Uyy! ¡Ustedes me hacen pasar vergüenza! Esta vez no se saldrán con la suya, ¿me oyeron? -esbozó la mujer peliazul mientras varias mujeres más se acercaban a terminar con los pervertidos.
-¡Espera, espera, Bulma! ¡Esto es un gran malentendido, en serio! -suplicaría Oolong con la cara cubierta de sudor frío.
Lamentablemente para el pobre cerdo pervertido, en uno de sus bolsillos se alcanzó a ver una esquina de lo que parecía una pantsu. Notando esto, una mujer del público se acercó donde el nervioso cerdo y, sin mediar palabra, tomó la ropa íntima y la mostró a todas en la multitud.
-Ahh, sí... Si esto es un malentendido, entonces ¿por qué tienes una ropa interior en su bolsillo? -La molestia de la multitud de mujeres creció hasta el límite.
Sin forma de escapar, ambos hombres cerraron sus ojos y, con una sonrisa tranquila en su rostro, aceptaron su destino.
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Tiempo después de la gran paliza que recibieron y de una corta visita al área médica, Bulma escucharía por los altavoces el comienzo de los cuartos de final, además de que se pedía a todos los que reservaron sus respectivos puestos que se apresuraran o se revenderían sus sillas.
-Esos idiotas avariciosos quieren aprovechar la mínima oportunidad para ganar más dinero -bufaría molesto Oolong, sentimiento compartido por todo el grupo.
-Es algo inevitable. Desde que el torneo de las artes marciales se volvió tan famoso, ahora las compañías extranjeras buscan la manera de ganar más dinero aprovechando este torneo -diría Roshi mientras tenía una gran cantidad de moretones en su cara.
-Es cierto..., pero, ¿eso no le molesta a usted, maestro? -la pregunta de Launch dejó pensando al anciano.
-Mmm, creo que los tiempos cambian y, aunque sea molesto, sé de primera mano que para que algo dure en el tiempo debe sí o sí adaptarse a los cambios. El torneo de las artes marciales al principio se creó para que solo asistieran exclusivamente artistas marciales; no permitían la entrada de civiles. Después de un tiempo, se les permitió la entrada con un costo monetario que serviría para preservar el edificio. Actualmente, dada la gran cantidad de peleadores y de que las noticias se expresen tan rápido como la pólvora, era de suponer que algo así sucedería.
Ingresando al gran complejo, Bulma y los demás se sentarían en sus respectivos asientos, donde gracias al dinero de Bulma y a apoyo en la remodelación del torneo se les dio a todos un asiento VIP cerca del campo de batalla.
-Wow, Bulma, debo elogiarte por pedir estos asientos para todos nosotros -acurrucándose en el suave asiento, Oolong miraría cómo Mula traería un poco de palomitas para ella.
Sentándose en su asiento, Bulma notaría cómo el cerdo intentaría quitarle su comida. Con mirada letal, amenazaría al cerdito.
-Oigan, por cierto, ¿es verdad que Shingen pelearía primero? -preguntaría Launch emocionada por ver luchar a un gran amigo, haciendo que Bulma se sorprendiera y mirara el cuadrilátero.
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🐉"El Humano Más Fuerte De Dragon Ball"🐉
LosoweDespués de años de puro esfuerzo, en donde gracias al apoyo de mis padres logré impulsarme como peleador profesional de MMA. Sin embargo, lamentablemente, el destino tenía otros planes para mí, y entre ellos estaba el morir en una fría noche después...