Dinastía Jauregui.

Capitulo 33 ~ Me destrozaste la vida.

A Lauren le hicieron falta unos segundos para procesar lo que Ally le acaba de decir, dio un paso atrás recostándose del escritorio.

Dime que es mentira, dímelo ahora mismo - le exigió.

No Lauren, es verdad.

Su mente se nubló en ese momento, no podía pensar con claridad y con buen juicio, lo único que hizo fue girar su cuerpo y posar su mirada en el cajón, respiro profundo, cerró sus ojos y le pidió perdón a su padre por lo que estaba a punto de hacer.

Así que sin medirlo más, abrió el cajón y sacó el revólver, Ally dejó escapar un grito y acercó a ella.

Aléjate de mi ahora mismo Allyson, te lo recomiendo - le dijo con rabia, mientras revisaba si el arma estaba bien cargada.

Lauren, no vale la pena, no vale la pena que te ensucies las manos, vamos a la policía, se va a pudrir en la cárcel.

Se va a pudrir en el infierno - fue lo último que dijo, antes de salir rápidamente de la oficina.

¡No! Por favor, ¡No Lauren! - gritó Ally, yendo tras de ella.

La chica Brooke gritaba por todo el pasillo tratando de detener a la enfurecida Jáuregui, aquello llamó la atención de los demás, los mayores que se encontraban en la cocina salieron rápidamente.

¡Lauren! - le llamó Taylor.

La chica se detuvo y los apuntó con el arma, Alejandro se colocó automáticamente frente a Taylor, Clara, Sinu, Alejandro, Rosita y Ally la miraron con asombro y miedo.

Que nadie me siga - dijo, para luego bajar el arma y salir del penthouse.

Ally esperó un poco para poder procesar todo y que su respiración volviera a ser normal, aunque su corazón latía con tanta fuerza que parecía salirse de su pecho.

¡¿Qué está pasando Allyson?! - preguntó con desesperación Clara.

La chica no respondió, tomó su teléfono y marcó el número de Preston, quien sabía estaba con Marcos.

¡Preston! - le dijo con desesperación, al escuchar la voz del chico-, Preston por favor, por favor, ve tras Lauren, está ahora mismo bajando hacia el garaje privado, detenla Preston, te lo suplico, va a la mansión, va a matar a Chris - dijo al borde del colapso derramando lágrimas.

¡¿QUÉ?! - gritaron en coro Clara y Taylor.

¿Qué es lo que está pasando? - preguntó Alejandro padre.

Ally quien no podía dejar de derramar lágrimas, respiro profundo y les contó la verdad.

Chris fue quien violó y secuestro a Camila, ella misma me lo dijo.

Un grito ahogado se escuchó en el lugar y un fuerte golpe, era Clara que se había desplomado, Taylor se pegó al pecho de Alejandro derramando lágrimas de dolor.

Rosita, Sinu y Alejandro padre ayudaron a Clara, sentándola en el sofá, Rosita salió rápidamente en búsqueda de alcohol para la moribunda mujer.

Voy a ir tras ella - dijo Allyson.

Yo iré contigo - intervino Taylor.

Las acompaño - comentó Alejandro.

Sinu y Alejandro, por favor, ¿pueden quedarse con Clara? - les pregunto Ally.

Sin problema, vayan y con cuidado, por favor - respondió Sinu.

Lauren conducía como si el mismísimo demonio estuviera en su interior, miraba al frente con lágrimas en los ojos porque sabía lo que haría, estaba cansada y harta de que su hermano intentara destruirle la vida, y ahora, lo había logrado le había destrozado la vida, y con ella también la de Camila, el revólver posaba en el asiento del copiloto.

Al llegar a la mansión dio una fuerte patada a la puerta y entro, las chicas de servicio al notar la actitud de Lauren se quedaron estáticas con terror en sus rostros.

¿Dónde está Christopher? - les pregunto.

En el área de la piscina - contestó una de ellas, con miedo en su voz.

Lauren caminó a pasos largos al área, deteniéndose en la puerta observando como su hermano se hundía en una botella de alcohol, el chico tenía las manos en su rostro.

¡CHRISTOPHER! - le gritó, caminando rápidamente hacia el y con el arma apuntándole.

El chico lo supo, lo supo en ese momento, su final había llegado, ya no había vuelta atrás, más que aceptarlo con dignidad, se levantó de la silla y caminó hacia su hermana, la notó demacrada, con los ojos rojos de tanto llorar, hundidos y con grandes ojeras, lo había logrado por fin, le había destrozado la vida.

Eres un maldito enfermo, un maldito hijo de puta - le dijo la chica con rabia.

Perdóname hermana, perdóname por todo el daño que te he causado, me di cuenta demasiado tarde lo idiota que fui - le dijo, con lágrimas en los ojos.

Le hiciste algo a Camila que jamás borrará de su memoria, mi esposa, la mujer que más amo, está asumida en una depresión por tu culpa, por tu maldita culpa.

Lo siento - dijo con tristeza.

Te odio tanto Christopher, te odio y te aborrezco - fue lo último que dijo, antes de apretar el gatillo.

Dos disparos se escucharon por todo el lugar, Chris miró hacia su pecho y notó como dos puntos rojos iban apareciendo, volvió alzar su rostro y se encontró los ojos de su hermana, la chica mantenía la pistola apuntándole.

Perdóname - le volvió a pedir, cuando cayó arrodillado en el césped, sintiendo un fuerte dolor en su pecho.

***

Lauren caminaba como si la vida se le hubiese ido del cuerpo, miraba sus manos y su ropa las cuales estaban llenas de sangre y una electricidad le recorrió el cuerpo, abrió la puerta de la habitación y entró, sentándose al pie de la cama y con la mirada perdida, Camila se levantó de golpe al sentir el estruendo, noto la presencia de Lauren y supo que algo había pasado, por lo que se levantó y caminó lentamente hasta quedar a su frente, dando un paso atrás con terror al verla llena de sangre.

¿Por qué tienes sangre? - le preguntó temblando.

Lo maté - dijo, casi en un susurro y una lágrima bajando por su mejilla.

¿A quien mataste Lauren? - le preguntó con terror, colocando sus manos en la boca.

A Chris, por lo que te hizo.