Capitulo 13 ~ El precio a pagar por estar conmigo.

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Camila seguía asumida en su estado de shock mientras que Lauren la observaba esperando una respuesta.

Mila, no te preocupes, olvida lo que te dije, si quieres seguimos como estamos ahora, tal vez yo me precipite y ...

¡Si quiero ser tu novia! - le dijo de golpe.

Lauren se quedó paralizada y con una sonrisa de oreja a oreja, se había esperado un rotundo "no", a causa de la inesperada propuesta, sabía que era pronto, que quizá se estaba precipitando, tal como lo había dicho, pero lo cierto era que no podía pasar un segundo más sin saber que esa chica era de ella, no había sentido con otra lo que con Camila si.

¿De verdad?

Si, si, quiero ser tu novia Lauren, no sé qué me has hecho, no suelo ser así, pero quiero descubrirlo y quiero llegar hasta el final de lo que siento - le confesó, haciendo que la ojiverde sintiera felicidad.

Yo tampoco sé lo que tú me estás haciendo, pero causas en mi cosas nuevas y sentimientos que me hacen bien, eres como un escape a todo lo que me hace mal, no quiero pasar un día más sin saber que te tengo y haré todo lo posible porque estés bien y podamos estar juntas.

No hizo falta decir nada más, pues sus miradas lo expresaban todo, estaban empezando a sentir y dejándose llevar por los sentimientos a flote, Lauren sentía que volvía a retroceder en el tiempo, que volvía a ser una adolescente risueña, que empezaba a conocer y descubrir la magia del amor, estar con Camila era lo que ella llamaba un escape a todo, la chica le estaba mostrando un mundo diferente al que ella conocía, con el pasar de los días se daba más de cuenta que no era pequeño lo que nacía en ella, miraba a Camila estudiar, hablar, contar algún chiste malo y no podía evitar pensar que lo que pasaba en ella era amor, se estaba enamorado de esa chica, y tenía miedo de aceptarlo, tenía miedo de asustarla, no quería por nada del mundo que se alejara de ella.

Los días siguientes todo marcho según Lauren lo había planeado, Camila se levantaba muy temprano para ir a la universidad, Marco se encargaba de llevarla y traerla, ese lapso de tiempo que la chica la pasaba fuera de casa, Lauren sentía un vacío en su interior, notaba la casa más vacía, cuando Camila estaba en ella había música por todo el lugar y risas, se habían echo fanáticas de una serie y debatían siempre por el futuro que le esperaba a los personajes.

Ally se terminó encargando de todo en la empresa e iba todos los días a darle cuentas a Lauren, la chica se sentía agradecida y feliz por el tiempo que tenía para descansar.

Varios días después, Camila se encontraba en la oficina de Lauren estudiando para una presentación en la universidad.

Mi amor, el punto está en que tú puedes estar diciendo una tanda de tonterías, y si tienes seguridad en ti misma, si miras al público con determinación, ellos van a centrar más su atención en cómo te expresas, en lo segura que estás y no en lo que estás diciendo - le decía Lauren.

Camila valoraba mucho tener a Lauren cerca de ella y recibir sus consejos, le encantaba escucharla hablar de finanzas, cada tema que a Camila se le hacía difícil Lauren lo sabía a la perfección y se lo explicaba de una manera tan sencilla que terminaba entendiendo todo sin problemas, la Jáuregui era todo lo que en las noticas y los medios se decía, era una eminencia y la mejor en el campo.

Para que lo entiendas mejor, hace unas semanas cerré un trato con unos jeques de Turquía, eso es un claro ejemplo del mercado global, somos representantes de dos países que hacen un intercambio comercial - le explicaba a Camila-. Voy a sacarte algunos documentos que tengo sobre la propuesta y vas a entenderlo mejor, es muy fácil mi vida, y tú eres inteligente.

Camila tenía toda su atención en Lauren y mientras la chica más hablaba, más se decía a sí misma lo afortunada que era por aprender de la mejor.

Rosita, ¿dónde está Lauren? - le preguntó la chica, entrando a la cocina.

Dinastía Jauregui.  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora