Capitulo 38 ~ ¿Es de Chris o de Lauren?

276 27 8
                                    

¿Cuál es el plan? - le preguntó Ale.

He cambiado de opinión, no iré a ver a Taylor, iré a la cárcel a ver a Chris.

Es broma, ¿verdad? - le preguntó incrédulo.

No, no lo es, siento que debo hacerlo, debo llevarle a Michelle, no sé porque, pero siento que es lo que debo hacer.

Puedo acompañarte, si quieres, quiero verlo también - intervino Addison.

Muy bien - aceptó Camila con una sonrisa- ¿hablaste con Taylor? - le preguntó a su hermano.

No, me dijiste que no dijera nada y eso hice.

Confía en mí Ale, se lo que hago - le dijo al chico, tomándolo de la mano, sabía que no le gustaba la idea de que fuera a ver a Chris.

Está bien, pero ve con cuidado, vayan con cuidado - les dijo, mirándolas.

Quizá lo que Camila estaba a punto de hacer pudiera tomarse como una tontería, como una mala idea o como, en parte, un síndrome de Estocolmo, aunque claramente no estaba enamorada de Chris, sentía esa necesidad de hacerle saber que tenía una hija, que esa pequeña niña de ojos verdes era también en parte de él, el chico pasaría el resto de su vida en la cárcel. Era como una forma de agradecerle que a pesar de todo, la ayudó y le salvó la vida, aunque todo había empezado por su culpa, pudo haber sido peor, sino hubiese recapacitado a tiempo.

Niño Jáuregui - le llamó el guardia.

Chris se encontraba en su celda leyendo un libro.

¿Qué pasa? - preguntó, mirándolo por encima de sus lentes.

Tienes visita - le informo, abriendo la puerta.

La madre de Lauren usó sus influencias para que su hijo tuviera una estancia medianamente cómoda, una celda para el solo, una buena cama y alguna que otra distracción, y sobre todo, que estuviera protegido, no había que olvidar que los hombres que lo obligaron a cometer los crímenes por los que estaba ahí metido, aún seguían libres y Chris los había delatado.

El chico caminó a pasos lentos siendo acompañado por varios guardias, cuando pasó entre las celdas de los demás presos se escuchó un abucheo.

¿Tienes también beneficios niño rico? - le preguntó uno que tenía la cara pegada a las rejas.

¡Eh guardia! - gritó otro- déjamelo aquí, que yo si lo voy a convertir en un hombrecito.

Chris no podía sentir más que asco al ver a esos hombres y notar como algunos lo miraban con odio, otros con asombro y alguno que otro con asqueroso deseo.

¿Quién ha venido a verme?, ¿mi madre? - preguntó.

Yo que sé Jáuregui, tú sigue caminando o alguno de estos te arrancará la cabeza - le contestó de mala gana el guardia, dándole un empujón.

El guardia abrió la puerta de una habitación privada y le obligó a entrar.

Joder, no es necesario empujarme tanto hombre - le gritó al guardia una vez dentro.

El chico no se había dado cuenta aún de quién lo esperaba sentada, cuando giró su rostro no puedo evitar dar un paso atrás con impresión.

Camila - le dijo, con notable asombro en su voz.

Hola Chris - le saludó.

Hola, ¿qué haces aquí?

Vine a verte y hablar contigo de algo importante.

Dinastía Jauregui.  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora