Capitulo 32 ~ Una Desgracia Mas Se Asoma.

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Camila desde que había vuelto a casa no hablaba, se mantenía asumida en sus pensamientos y no toleraba la presencia de nadie a su lado, rechazaba con rudeza cualquier contacto físico y no soportaba que intentaran hacerla hablar, Lauren se sentía frustrada y deprimida, entendía la actitud de su esposa, y no intentaba forzarla, pero necesitaba saber que era lo que había pasado, y que le habían hecho en realidad, sentía dentro de sí una ira que tenía que canalizar, quería ver muertos a todos aquellos que le hicieron daño a la mujer que tanto amaba y no iba a descansar hasta lograrlo.

Buenos días - saludo la ojiverde, entrando a la cocina.

Buenos días hija, ¿vas a desayunar? - le pregunto Sinu.

Los padres de Camila se negaron rotundamente a separarse de ella, por lo que decidieron quedarse más tiempo, Lauren volvió a su penthouse ya que también se negaba a estar lejos de Camila, por lo que todos decidieron acomodarse en el lugar, el penthouse era bastante grande y cada quien estaba en una habitación, Taylor, Ally y Clara venían constantemente.

Alejandro y Taylor se unieron mucho más desde el regreso de Camila, los chicos parecían inseparables y es que hasta en las tardes, ambos salían a caminar y compartir, Lauren por el miedo a lo que había pasado con Camila, le colocó dos hombres de seguridad a su hermana y por ende, al hermano de Camila, los chicos no podían andar solos en la calle sin protección, al igual que Clara Jáuregui.

Solo café, Sinu, muchas gracias, ¿Camila está despierta?

Se ha quedado dormida hace un momento, anoche no pudo dormir y en los lapsos cortos en los que lograba conciliar el sueño, se despertaba agitada y con gritos, tiene muchas pesadillas.

Dios - dijo Lauren, colocando sus manos en el rostro con frustración- debería verla un médico especialista, se que el doctor dijo que debemos darle tiempo, pero siento que está sufriendo y le hecho de no quererlo hablar me hace aún más daño.

Hay que darle tiempo Lauren, yo también creo que es lo mejor, que ella poco a poco se recomponga y sola vendrá a contarnos todo, y podremos ayudar - le aconsejó Sinu, colocando la taza de café frente a ella.

Buenos días - saludo Clara, entrando a la cocina.

Buenos días Clara, ¿has desayunado ya? - le pregunto Sinu.

Sinu cariño, veo que no dejas a Rosita hacer su trabajo.

Ayudarla me despeja la mente.

Si, yo también he tenido que mantenerme distraída, no es fácil nada de esto - dijo, tomando asiento al lado de su hija.

¿El vago de tu hijo aún sigue en casa? - le preguntó Lauren a su madre.

Hoy por fin se ha atrevido a salir de la habitación, me comentaba que está sufriendo fuertes dolores de cabeza.

La droga seguramente lo está terminando de matar - comentó con crueldad.

Lauren, por favor - le pidió su madre con molestia.

La chica no respondió siquiera, simplemente se levantó y salió de la cocina, quería ir a ver a Camila, aunque fuera durmiendo, tenerla ahí le reconfortaba el alma.

Cuando abrió la puerta de la que era la habitación de ambas, la observó plácidamente dormida, a su lado, en la mesita de noche se encontraba el frasco con los calmantes que el doctor le había recetado, sabía que el sueño lo tenía profundo y no sentiría su presencia, así que sin más, tomó una silla cercana y tomó asiento, cuidando el sueño de su amada por un largo rato.

Lauren - escuchó a lo lejos.

La chica Jáuregui abrió los ojos con dificultad y se encontró con Camila sentada en la cama frente a ella, observándola sin nunca expresión en el rostro.

Mi vida, mi amor - le dijo, intentando acercarse a ella pero siendo detenida por la chica Cabello, quien alzó su mano pidiéndole que se quedara donde estaba.

Por favor Lauren, no te acerques, por favor - le pidió, con los ojos cerrados.

El corazón de Lauren se rompía cada vez que Camila le hacía aquello, no había sido la primera vez, cuando en el hospital pudo salir de emergencias y le notificaron que Camila había despertado, no dudó en ir corriendo hacia ella y cuando la tuvo entre sus brazos un fuerte empujón la hizo volver a la realidad de golpe, no fue eso lo que le rompió el alma, fue ver como Camila comenzaba con desesperación a rascarse la piel hasta lograr hacerse heridas, ahí descubrió que a Camila la habían destruido en mil pedazos en esos tres días que estuvo lejos.

Perdóname Camz, me dejé llevar, lo siento mucho - le pidió, volviendo a tomar asiento- ¿quieres que me vaya?

Puedes hacer lo que quieras Lauren - le dijo, volviendo a meterse en la cama, arropándose y cerrando sus ojos.

La chica sentía que con cada rechazo de la mujer que más amaba, su cuerpo se iba descomponiendo más, y los fuertes dolores de cabeza la tomaban con más rudeza que antes.

¿Qué tal está? - le preguntó Ally, cuando Lauren salía de la habitación.

Igual - le respondió, secando sus lágrimas.

Tranquila - le consoló, acariciando el brazo de la ojiverde- ya verás que pronto volverá a ser la misma Camila de antes, estoy segura.

Espero que si, no quiero perderla, no podría vivir sin ella - sentenció.

Quiero pasar a verla, si se pone muy nerviosa, saldré en seguida.

Lauren afirmo con su cabeza y siguió luego su camino, se fue hasta la oficina y abrió el cajón de su escritorio, lo primero que pudo notar fue la presencia de su revólver, un arma que había comprado hace varios años y que jamás había usado, había ido a varias clases de tiro, pero nunca tuvo la necesidad de usar el arma, la tomó y limpió un poco, para luego volverla a poner en su lugar, abrió el suficiente cajón y sacó unas pastillas para el dolor de cabeza, tomándose dos al mismo tiempo y cerrando sus ojos para ver si así, lograba que la migraña le diera un poco de tregua.

No supo cuando tiempo se quedó dormida, pues se levantó del asiento con un latente dolor de cuello y salió a las afueras, necesitaba saber cómo seguía su esposa y si había alguna mejoría, en la cocina como era de costumbre se encontraba su madre en compañía de Sinu, Rosita y el padre de Camila, en la sala de está unos tórtolos Alejandro y Taylor, conversaban con tranquilidad.

Chicos, ¿han visto a Ally? - les pregunto.

Aquí estoy - dijo, con una extraña expresion en su rostro llegando al lugar.

¿Te pasa algo? - le preguntó la ojiverde.

Tenemos que hablar, vamos a tu oficina por favor - le pidió, Ally estaba blanca, la chica era de siempre ir a cámaras de bronceado y por eso se notaba claramente, tenía una mala expresión en su rostro, como si hubiera recibido la peor de las noticias.

Ambas caminaron a la oficina de Lauren en silencio, cuando llegaron al lugar la chica comenzó a caminar de un lado a otro, buscando las palabras correctas, gritándole a su conciencia si era buena idea decirle aquello a Lauren.

Allyson ya basta, deja de caminar de un lado a otro y dime que pasa - le exigió Lauren.

Prométeme que vas a tomar todo con calma, por favor - le suplico.

¡Joder! - exclamó- dime que cojones está pasando Allyson.

Lau, Dios, no se como decírtelo - le dijo, colocando sus manos en la cabeza.

¿Tiene que ver con Camila?, ¿te ha dicho algo? - le preguntó con preocupación.

Lo siento tanto Lauren, lo siento porque se que lo que te voy a decir te va a destruir la vida - le dijo, derramando lágrimas.

Lauren se quedó en silencio y con la respiración agitada.

Lauren, quien secuestro y violó a Camila fue Chris, tu hermano.

Dinastía Jauregui.  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora