Mientras conversaban entre tragos de café, salió el tema de Lizeth.
—¿Alguien sabe cómo está? —. Preguntó Luana.
—Está bien. Tiene lastimada la nariz y perdió algo de cabello, pero se repondrá —. Respondió Max entres risas.
—Ella se lo buscó —. Afirmó Priscila.
—Recordará lo que hizo durante mucho tiempo cuando se mire al espejo —. Bromeó Checo.
—Estuvo buena su fiesta de madrugada eh —. Comentó Carlos.
—¿Nos oíste?
—¿Te queda alguna duda?
—Le dije a Checo que se callara —. Afirmó Max.
—¡Qué vergüenza! —. Dijo el chico.
—Cómo si Carlos fuera un santo —. Agregó Isadora.
—Estuve durmiendo, ustedes se estaban besando con unos locos.
—Sí, seguro —. Dijo Marcos.
—¿Qué opinan de ir a la playa? —. Propuso Charles para cambiar de tema.
—¡Sí! —. Chilló Checo.
—Yo también quiero ir —. Coincidió Isadora.
—Vamos a cambiarnos, entonces —. Indicó Lucas.
—Vamos a tomar unos tragos, Carlos —. Dijo Max.
—Está bien.
Ellos se fueron por los tragos, y los demás que estaban listos se quedaron en la mesa. Después partieron hacia la playa. Tras encontrar un buen lugar con mesas para quedarse, los chicos decidieron ir al agua. Charles y Checo las playeras y quedaron sólo con los shorts; antes de que los demás pudieran decir algo, corrieron al agua.
Carlos y Max se miraron el uno al otro y después fulminaron a los demás con la mirada. Charles llevaba un bañador amarillo; Checo llevaba un bañador con estampado azul.
—¿Viste las caras de los chicos? —. Preguntó Checo.
—No me importa. —. Afirmó Charles.
—Mierda, ¿de verdad? Yo confieso que me gusta ver a Max celoso.
—Pero no debe exagerar.
—Exagerado es su segundo nombre. Ja, ja —. Bromeó el chico.
—Vamos a nadar.
Nadaron y conversaron un rato y, cuando volvieron con los chicos, ellos estaban muy serios. Los ignoraron, tomaron dos alfombras de playa y se acostaron en la arena boca abajo. Tomaron sol como si nada, aunque, por dentro, se morían al verlos enojados. Carlos y Max los miraron incrédulos y, al ver que sonreían a escondidas, decidieron provocarlos también. Max comenzó a sacarse la ropa y Carlos también; sólo se quedaron en bañador y fueron al mar. Carlos y Checo se miraron incrédulos al ver que se fueron sin discutir.
—No puedo creer que Max se haya quitado los pantalones —. Le dijo Checo.
—No pelearon con nosotros, ¿por qué? —. Preguntó Charles.
—Mira cómo se derriten por ellos —. Checo señaló a una mesa al lado de la suya, en la que otras chicas se estaban babeando por ellos.
Max y Carlos volvieron enseguida y buscaron cervezas, pero, cuando notaron que sus chicos los miraban mal, se dieron cuenta de que las mujeres de al lado los estaban comiendo con los ojos. Todos los demás estaban en el agua, así que sólo quedaban ellos cuatro en la mesa. En ese momento, Checo se levantó para sacarle la cerveza de la mano a Max.
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Un padre por contrato || Charlos
FanfictionCharles esta buscando trabajo desesperadamente, lo que lo lleva a firmar un contrato un tanto extraño que tiene como principal regla nunca enamorarse del padre del niño, llevando una relación distante con su jefe Carlos Sainz. ¿Quien romperá el cont...