Luces Navideñas

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El sonido de las campanas navideñas resonaba en las calles de Bangkok. El ambiente festivo ya se sentía en todos lados, desde las tiendas decoradas con luces brillantes hasta las canciones que sonaban en las cafeterías. Freen caminaba por el centro de la ciudad junto a Nam, disfrutando del frío suave que traía el final de año. A su alrededor, la gente parecía más ligera, más feliz, como si la magia de la Navidad hubiera tocado a todos.

Nam, como siempre, iba hablando sin parar, pero esta vez Freen no se sentía perdida en sus pensamientos. Aunque el recuerdo de Becky aún aparecía de vez en cuando, ya no era una sombra constante que la perseguía a cada paso.

—¿Sabes? Me alegra verte más tranquila últimamente —dijo Nam, dándole un ligero codazo mientras ambas miraban los escaparates decorados con árboles de Navidad.

Freen sonrió ligeramente.

—Sí, creo que... las cosas ya no me pesan tanto —respondió. Habían pasado algunas semanas desde que la había visto en el centro comercial, abrazada a esa otra chica. Al principio, el dolor había sido intenso, pero con el tiempo, Freen había comenzado a aceptar que tal vez lo mejor era seguir adelante.

—Pensé que te costaría más —bromeó Nam, con una sonrisa juguetona—. Pero mírate, ¡pareces toda una nueva mujer!—

Freen rió, y por primera vez en mucho tiempo, fue una risa genuina.

—Bueno, no diría que soy una nueva mujer... pero sí, estoy mejor. No puedo negar que Becky me dejó pensando en muchas cosas. Y no solo sobre nosotras, sino sobre mí misma.—

Nam la miró con curiosidad, pero no dijo nada, esperando que Freen continuara.

—Quiero decir, al principio todo era... confusión. No sabía si lo que sentía por Becky era real o si simplemente me estaba aferrando a la idea de estar con alguien. Y después, cuando todo se desmoronó, me di cuenta de que tal vez... no era el momento para nosotras.—

Nam asintió lentamente, tomándose en serio las palabras de Freen.

—Sí, a veces las cosas no salen como esperábamos. Pero lo importante es que sigas adelante, y parece que lo estás haciendo bastante bien.—

Freen suspiró.

—Sí, aunque no te voy a mentir, a veces pienso en ella. Pero ya no de la misma forma. Ahora, es como si pudiera recordar lo bueno y simplemente dejar ir lo demás.

—Eso es progreso —respondió Nam, dándole una palmada en la espalda—. Además, ¡se acerca la Navidad! ¡Y el Año Nuevo! Es el momento perfecto para dejar todo atrás y empezar de nuevo.

Freen sonrió ante el entusiasmo de su amiga. Nam siempre tenía una forma de ver el lado positivo de todo, y esa energía positiva era justo lo que Freen necesitaba en ese momento.

—Sí, estoy tratando de mantener una actitud positiva. Quiero que este fin de año sea diferente. Quiero concentrarme en mí, en las cosas que realmente importan —dijo Freen con determinación.

Nam la miró con una mezcla de orgullo y alegría.

—¡Eso es lo que quiero escuchar! Además, las fiestas son para estar con amigos y familia. Ya verás, vamos a hacer que esta Navidad sea inolvidable.—

Ambas continuaron caminando por las calles, disfrutando del ambiente festivo que las rodeaba. Aunque el recuerdo de Becky aún permanecía en algún rincón de la mente de Freen, ya no la afligía como antes. Había aprendido a aceptarlo y a seguir adelante, y mientras el nuevo año se acercaba, Freen sentía que estaba lista para lo que viniera.

[...]

Al llegar a casa, Freen se sentó en su cama, mirando las luces navideñas que había colgado en su habitación. Las pequeñas luces parpadeaban suavemente, llenando el cuarto con un brillo cálido. Había algo reconfortante en esa atmósfera, algo que le hacía sentir que, tal vez, todo estaría bien.

Tomó su teléfono y, por reflejo, abrió Instagram. Su dedo se detuvo antes de buscar el nombre de Becky. Durante semanas, había revisado su perfil desde el teléfono de sus amigos, obsesionada con saber qué estaba haciendo, con quién estaba, si pensaba en ella. Pero esta vez, Freen solo dejó el teléfono a un lado, sin siquiera buscar.

—Ya no más —susurró para sí misma.

Se tumbó en la cama y cerró los ojos. Aún quedaba mucho por delante. Las fiestas, el Año Nuevo... y tal vez, un nuevo comienzo.

INESPERADO  ~ FREENBECKYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora