El campo de entrenamiento estaba en tensión cuando Genya, con un temblor en su voz, enfrentaba la furia de su hermano mayor.
—¡Deja de molestarme, Sanemi! —gritó Genya, sus ojos llenos de determinación. Sabía que al hablar de lo que había hecho —comer carne de demonios— había cruzado una línea peligrosa, pero no podía seguir ocultándolo.
Sanemi, enfurecido por las palabras de su hermano, avanzó hacia él con la intención de castigarlo por lo que consideraba una completa traición. Los cazadores presentes se detuvieron, sintiendo la rabia pura que emanaba de Sanemi Shinazugawa.
—¿¡Qué dijiste!? —rugió Sanemi, sus ojos llenos de odio. Genya lo miró desafiante, aunque en el fondo sabía que esto no terminaría bien.
Antes de que Sanemi pudiera atacar, Tanjiro saltó entre los dos hermanos, con los brazos extendidos para proteger a Genya.
—¡Sanemi, por favor, cálmate! ¡Genya solo está intentando hacerse más fuerte! —gritó Tanjiro, siempre dispuesto a intervenir por el bien de los demás.
—¡Tú no te metas, Tanjiro! —Sanemi giró hacia él, su mano aferrada a la empuñadura de su espada, dispuesto a atacarlo también—. ¡Este asunto es entre mi hermano y yo!
Tanjiro, sin retroceder, lo miró con firmeza, pero Sanemi no estaba en un estado para escuchar razones. La furia lo consumía, y su ira hacia Genya por lo que consideraba una aberración no tenía límite. Sanemi levantó su espada, listo para cortar a Tanjiro si era necesario.
—¡Voy a acabar con ambos si hace falta!
Antes de que Sanemi pudiera desatar su ataque, una figura veloz se interpuso entre ellos, bloqueando el golpe con una destreza impresionante. [T/N] apareció en el último segundo, tomando el brazo de Sanemi con fuerza para detener su movimiento.
—¡Ya basta, Sanemi! —dijo [T/N], su voz firme y decidida.
—¡Señorita [T/N]!—Gritó aliviado Tanjiro al verla interceder en la pelea.
Sanemi se detuvo de inmediato, más por la sorpresa que por la fuerza de [T/N]. Sus ojos se abrieron ligeramente al ver que ella había intervenido, y una mezcla de frustración y molestia cruzó su rostro.
—¿Qué estás haciendo, [T/N]? —gruñó, su voz baja pero llena de enojo—. Esto no te incumbe.
—Me incumbe cuando estás dispuesto a lastimar a tu propio hermano por algo que no entiendes. —[T/N] lo miró con una mezcla de firmeza y empatía—. Sé que estás enfadado, pero esto no es la manera de resolverlo.
Sanemi trató de zafarse del agarre de la pilar, pero ella lo sostuvo con más fuerza, mostrándole que no iba a dejar que esto continuara.
—¡Suéltame! —exclamó Sanemi, claramente irritado de que alguien interviniera en su conflicto personal.
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𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 ; 𝐒𝐇𝐈𝐍𝐀𝐙𝐔𝐆𝐀𝐖𝐀 𝐒𝐀𝐍𝐄𝐌𝐈
FanfictionONE SHOTS DE SHINAZUGAWA SANEMI¡! KAKASHIFTME 2O24. © ❍ OS en diferentes situaciones, universos paralelos o alternativos.