Cap 34 "El sirviente de la princesa"

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Narra Helen:
La noche calló pocos minutos de que llegáramos a la entrada del nuevo bosque y bajo un pino nos acomodamos para dormir. Raku calló rendido en cuanto su espalda quedó pegada contra el tronco del árbol.

Kira arropaba entre su cola y piel peluda a las chicas mientras yo les coloco cobijas a todos para que no pasen frío mientras hago una pequeña fogata. Usando la fricción entre dos rocas logro crear chispas para encender la pequeña fogata y poner a calentar un paquete de lo que parecen ser fideos con algunos otros componentes para una rápida sopa.
Imagino que es la mezcla de abastecimiento de este tiempo con el de las chicas.

Cuando por fin está listo despierto a todos para que comamos un poco y de solo llenarse la panza se recuestan nuevamente quedando quietecitos como roca.

En la mañana cuando despertamos tras nuestro "sueño reparador de energías" nos disponemos a seguir el camino a través de los pinos y robles que crecían en el árbol. Las hojas eran curiosamente grises, al parecer características de los pinos y tenían grandes dimensiones los robles.

A unos cuantos pasos logro percibir un olor a demonios y el de alguien más que no logro percibir, sin embargo se parecía al que nos cargábamos Lin y yo.

Nos apresuramos a dirigirnos al lugar para descubrir que sucedía para toparnos con la escena de un pequeño lago rodeado de maleza montañosa donde alguien peleaba una batalla con unos cuantos monstruos que ajenos a nuestra presencia seguían atacando con el objetivo de hacerse la cena con quien sea que les estuviera plantando cara.

Los pocos que nos notaron no recibieron más que ataques de Kaira, de Ayumi que empezaba a dominar la espada y de Raku que siempre era nuestro fiel protector. Lin y yo solo hacíamos puchero, creo que estábamos de acuerdo en que no éramos una damiselas que siempre merecían ser rescatadas.

Cuando todos devolvieron su mirada hacia nosotros nos encontraron a ambas cruzadas de brazos y a Kira sentada a un lado de nosotros con cara de "¿Es en serio?" como si les reprochara el fastidio que sentimos en masa por esa ridícula necesidad de protegernos en todo momento ante cualquier amenaza. Infantil, lo sé, pero es frustrante.

Desvío la mirada queriendo parecer ofendida siendo consciente de sus caras divertidas. Sin embargo vuelvo a guiar la vista al frente cuando todos se ponen en guardia al escuchar ramas siendo quebradas por pasos bastante sigilosos diría yo. Era como si quien sea que se nos acercara caminara sobre algodón.

El sol comienza a hacer acto de presencia en los alrededores iluminando todo a su paso y con ella la cara del acompañante misterioso.

No hago más que quedarme en shock... Se me reiniciaba el Windows con solo verle.

Después todo fue una secuencia de shock's para todos desde el minuto 0 en que las lágrimas descendían desde los ojos dorados-anaranjados de Lin y sollozos salían de su boca hasta que corrió envolviendo sus brazos alrededor del chico.

Narra Lin:
Pequeños hipidos salían de mis ojos mientras lo estrechaba entre mis brazos, había extrañado tanto tenerlo conmigo que no sabía que lo sentiría tanto así. Solo fui completamente feliz cuando él rodeó mi espalda con sus manos, estrechándome también en un abrazo cariñoso.

- Tranquila, ya estoy aquí - dijo, con esa voz tan calmada intentando tranquilizarme.

- ¿Estás bien? - pregunto tras separarme unos segundos para mirarlo a la cara - dime por favor que estás bien, por favor, por favor - pido entonces, paniqueada del susto.

- Estoy bien - dijo revolviendo mi cabello - sigo siendo yo, tengo mis brazos, mis piernas y mi cabeza en su lugar, sigo siendo yo - afirmó nuevamente, esta vez para disimular como susurraba en mi oído - y sigo siendo solo tuyo.

"Mi secreto"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora