13 REASONS WHY 4 - THE FINAL YEAR

''Farewell and Resignation''

En la iglesia estaban los padres de Sarah y Clay recibiendo a la gente en la entrada ya que todos se sentían como una gran familia, Sarah estaba sentada en la primera fila, con las mejillas, ojos y nariz aún un poco rojos, estaba en estado de estupor mirando a un punto fijo en el vacío, mientras tenía la cabeza recostada en el hombro de Clay, él estaba menos ensimismado que ella pero igual de perdido mientras sostenía una de sus manos entre las de él, ninguno de los 2 lloraba, no porque no hubiera lagrimas que derramar, sino porque ya se perdían cada vez más en sus pensamientos, era notable que no estaban nada bien, en eso se acercó Tony aprovechando que la iglesia aún no se había llenado, Clay notó su presencia rápidamente, pero Sarah no, el moreno se agachó frente a ella con una mirada compresiva y adoptando el tono más cariñoso que pudo encontrar...

- Hey...- dice tomando su mano libre, logrando llamar su atención al tocarla y ve que ella lentamente lo mira- ¿Estas bien?- indaga, ve que ella lentamente asiente, se endereza y espabila un poco, así que se sienta a su lado- Esto se ha vuelto un tema recurrente- dice mirando el ataúd- Ojala pudiera decir o hacer algo...- dice ya que no sabía bien como consolarla.

- Si...- dice Clay con una profunda tristeza- Agrademos la intención, me hace sentir mejor...- afirma.

- Solo los acompaño amigo, nada más...- afirma Tony sin soltar la mano de la castaña.

- Siempre lo haces...- afirma ella dándole una media sonrisa.

- Clay baja la cabeza- Yo te he fallado...- dice refiriéndose a Tony.

- No...- lo contradice el moreno negando con la cabeza- Tu también me acompañas, ambos lo hacen...- declara.

- No podemos superar esta vida solos...- añade Clay.

- Así es...- murmura Sarah lo suficientemente audible para ambos y esta vez recuesta la cabeza en el hombro de Tony.

Todos tomaron sus asientos, los padres de Sarah estaban a su lado junto con los padres de Clay y este antes mencionado, Jonathan y Kyle se sentaron con los atletas unas filas más atrás, comprendieron que era mejor dejarla con sus padres y los Jensen, luego se reunirían, una vez todos ubicado, esta vez era una sacerdote mujer quien oficiaba el servicio...

- ¿Cómo llegamos aquí otra vez?- empieza ella detrás del pulpito frente a todos- Creamos un mundo cruel, mi generación, la de mis padres, muy poca solidaridad, hay mucho odio, ira y dolor, siempre hablamos de proteger a nuestros jóvenes, pero no les damos las herramientas que podrían usar para salvarse...- afirma- Justin Foley murió de una enfermedad que, desde su origen avanza en silencio, y hay muchas enfermedades, varios problemas que empeoran cuando no hablamos de ellos, porque dejamos que nuestros miedos, la vergüenza y los códigos morales retorcidos nos mantengan en silencio, mientras la muerte acecha a más jóvenes, ya fue suficiente...- Dice de manera contundente- Basta de culpar a otros, basta de acusar, basta de confundir a los que informan los conflictos con los verdaderos responsables, recordemos a Justin por sus logros, como futbolista y basquetbolista...- a este punto Sarah ya no podía aguantar las lágrimas- Recordemos su sonrisa, que derritió cientos de corazones, según dicen, pero también recordemos su muerte, con tristeza y tenacidad, que nos impulse a actuar, Amén...- dice y todos repiten lo mismo.

Despues de eso dio paso a familiares y amigos que quisieran decir unas últimas palabras para Justin, el primero en pasar sorpresivamente fue Alex, quien solo alcanzó a decir unas palabras, pero no pudo continuar así que su padre tuvo que ir a regresarlo a su asiento, porque había tanto que ninguno podría decir, Zach fue el único que dijo con decisión todo lo que quería decir, habló sobre que rompió la promesa que hizo cuando dijo que los protegería a todos, también hizo una anécdota sobre el entrenador y Justin ya que no le gustaba correr y finalizó con la reflexión que esto que pasó era el recordatorio de que debían mejorar, haciendo que muchos lloraran y reflexionaran, luego fue el turno de Sarah, que pese a lo que pensaban muchos decidió hacer lo que Clay no pudo, subir y tratar de decir algunas palabras para decirle adiós a su mejor amigo y hermano...