ABRIL
Había sido una semana de locos y el estrés me tenía a mil, hoy sería mi primer día de clases, fue mucha la insistencia de mi padre, porque aplicara a una universidad de la ciudad, pero al final mi amor por Alexian, hizo que aplicara a su universidad, para poder estar juntos y aunque papá no estaba de acuerdo, ver lo mucho que estudie para el examen y la nota alta que saque, terminó por convencerlo.
El día es frío, por lo que decido usar un buzo de lana blanca, con un jean azul de cintura alta y un abrigo negro que combinan con mis botines del mismo color, no me maquillo, no me gusta hacerlo, el pelo me lo dejo suelto y sólo decido darle algo de volumen a mis rizos.
—Hija, Alexian está aquí —Llama mi padre— baja o llegarás tarde.
—Ahora voy —Respondo echándome una última mirada, lo que veo me gusta— estoy lista —Digo apareciendo y encontrándome con Alexian, que apenas me ve sonríe y me saluda con un beso corto—.
—Se les hace tarde —Interrumpe mi padre—.
-—Nos vemos en la tarde papá —Me despido al igual que Alexian—.
Subimos al auto mientras escuchamos algo de música y mi chico me explica todo lo que debo hacer y como funcionan los horarios, para que no pierdas ninguna clase.
—Debes tener mucho cuidado hoy, no salgas del salón hasta que yo vaya por ti.
—¿Por qué?
—El primer día, los de las otras fraternidades, molestan a los de primer año, les dan casería y los bautizan.
—Les echan cosas podridas, les tiran pintura y demás cosas, por eso es mejor que no salgas del salón.
Escucho atenta sus indicaciones antes de que Alexian estacione el auto y salga conmigo de la mano, llamando la atención de los ahí presentes que nos miran y murmuran, como si les sorprendiera vernos ahí.
—Carne fresca —Dice alguien haciendo que volteé a ver, es la ex de Alexian—.
—Ignorala, solo te quiere provocar —Comenta mi chico abrazándome y dejándola con la palabra en la boca—.
Su cara es todo un poema al ver nuestra actitud, caminamos por el campus hasta llegar a mi salón, Lucas y Olivia también están ahí, pues al igual que yo, han escogido la carrera de medicina, mientras que Liam y Noah, han decidido estudiar leyes.
—Aby estamos aquí —Llama Lucas acercándose con Olivia —.
—Hola chicos —Saludo, estoy emocionada de tenerlos de compañeros—.
—Debo ir a clases Caramelito —Me besa mi chico— no vayas sola a ningún lugar, vendré por ti en el receso y tú —Se dirige a Lucas— cuídala.
—Así será.
—La cuidaremos bien —Asegura Olivia, antes de que Alexian se despida—.
Buscamos lugares en el salón que nos permita estar a los tres juntos, mientras recibimos clases. La mañana avanza tranquila, aunque tal y como lo ha dicho Alexian, una batalla campal, se arma en el patio al momento del receso, pues los del último año, deciden hacer oficial el bautizo a los nuevos.
—Creo que lo mejor será quedarnos aquí —Comenta Olivia—.
Observamos por la ventana todo el desastre que hay afuera, y no tardamos en ver a Victoria, la amiga de Olivia, que es tomada por un grupo de mujeres, al salir del baño, la toman de forma brusca y la hacen caer al suelo, para acto seguido botarle pintura y otros líquidos que no logro distinguir, la reacción de Olivia es inmediata y no duda en salir en defensa de su amiga, y tomar del pelo a una de las agresoras.
—Ella también es nueva —Grita un tipo que se acerca a Olivia y la separa de la otra tipa— hay que bautizarla —La sostiene y aunque intento salir en su ayuda, no tardó en verme atrapada por el amigo del tipo que sostiene a Olivia—.
—Aquí hay otra —Llama la atención, su brazo rodea mi cintura alzándome del suelo y no duda en llevarme—.
—Suéltame imbécil —Intento forcejear, pero la altura del tipo, termina por dominarme, escucho a Olivia insultar con malas a quien la detiene, mientras este no hace más que reirse—.
—¡Suéltala Hijo de puta! —Advierte una voz acercándose, es Lucas, un solo golpe es suficiente para que el tipo caiga al suelo— ¿Estás bien? —Toma a Olivia de la mano—.
—Sí.
—Lo mismo va para ti —Se dirige al tipo que me sostiene— suéltala —Se acerca de forma amenazante—.
—No te tengo miedo, se pelear mejor que el tonto al que has derivado —Alardea— la chica se queda conmigo.
Un silencio se apodera en el momento del lugar, aunque no entiendo porque, veo temor en algunas de las miradas que observan en dirección al tipo que me sostiene.
—Quítale las manos de encima a mi novia —Ordena alguien a nuestras espaldas, Orden que es obedecía de inmediato—.
—Lo siento —Intenta disculparse el tipo, pero Alexian no se lo permite y pronto empieza a golpearlo, un golpe en el rostro del tipo suena fuerte, seguido de una hemorragia, Alexian le ha roto la nariz—.
—Está bien, ha sido suficiente —Trato de tranquilizar a Alexian— déjalo por favor.
—¿Estás bien? —Me cuestiona—.
—Sí, estoy bien —Me abrazo a él, para que no continúe con la pelea—.
—Te lo dije, llegamos tarde a la pelea —Interrumpe una voz abriéndose paso entre la multitud, es Liam—.
—¿Victoria? ¿Eres tú? —Inquiere sorprendido Noah—.
—Sí, es mi amiga ¿Quién le hizo esto? —Exige saber Estrella—.
—Han sido ellas — Acusa Olivia, a las tres chicas, iniciando una nueva pelea—.
Veo a Lucas intentar contener a Olivia, pero no lo consigue y pronto se a une a Estrella para golpear a las agresoras de su amiga, que no hace más que llorar.
Noah
Se acercó hasta Victoria y se sacó la chaqueta para cubrirla y poder llevarla al baño para que se limpie un poco.
—Tranquila, te sacaré de aquí.
—Llévala a las duchas —Interviene Alexian— le pediré ropa a los chicos del club de teatro, y ustedes dos —Se dirige a Lucas y Liam— sepárenlas, o habrá problemas.
Tanto Liam como Lucas, intentan terminar con la pelea, pero se les hace casi imposible separarlas, razón por la que Alexian termina interviniendo, puedo ver como Olivia y su amiga llevan enredado pelo en sus manos, se lo han arrancado a las tipas que agredieron a Victoria, vaya primer día de clases.
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ALEXIAN "Lo Bizarro Del Amor"
RomanceEra todo aquello con lo que nunca soñé, era oscuridad, era maldad, era esa mezcla exquisita de locura y placer que pocas veces podías conocer, capaz de poner mi mundo de cabeza y de llevarme ha desear lo prohibido, con él podía pasar esos límites qu...