ALEXIAN "Lo Bizarro Del Amor"

Capítulo 58 "La Elejida"

ALEXIAN

Había ido a la estación para que Elon le permitiera acompañar a Abril en lo que terminaba su turno, compró una pizza y unas cuantas sodas, para ver una película con su chica.

Tocó el timbre y no tardó en verse recibido por Abril que lo lleno de besos al verlo, así era ella, dulce, cariñosa y amorosa, amaba la forma en que lo trataba.

—¿Cómo sigues caramelito? ¿Has podido descansar?

—Estoy bien —Respondió abrazándose a él— he podido dormir un poco.

—Vine a acompañarte un rato, mientras viene tu papá.

—Gracias —Lo invitó a entrar—.

ABRIL

Pusimos una película para verla mientras comíamos la pizza, aunque fue poca o nula la atención que le pusimos a ambas, pues era otra la que deseamos hacer. Un beso cubierto de inocencia es el encargado de desencadenarlo todo y no tardó en terminar sentada a horcajadas en el regazo de Alexian.

—Abril —Susurra en mis labios mientras sus manos buscan desesperadas colarse por debajo de mi falda— mi dulce caramelito.

Sus ojos se prenden de mi mirada, atento a mi reacción, sus caricias consiguen estimularme y recorren los lugares más íntimos de mi piel. Su lengua pasea juguetona por mi mi cuello distrayéndome de la intrusión de sus dedos, que se hunden en mi interior.

—Alexian —Pronuncio aferrándome a él, deseando tener algo más que sus dedos, dentro de mi ser—.

—Dime que me amas Aby, dímelo por favor —Pide tomando posesión de mis caderas y guiándolas a su erección—.

—Te amo —Contesto subiendo mis manos a su rostro, antes de besarlo— te amo Alexian —Repito apoyándome en sus hombros y tratando de seguir el ritmo de sus embestidas— ¿Tú me amas?

—Con todo mi corazón, eres la elegida Aby, tu y solo tú.

—¿La elegida? —Inquiero cerrando los ojos, el orgasmo está por llegar—.

—Si Aby.

Intento continuar con los cuestionamientos, pero al final el fervor me invade e incitan a disfrutar del momento, y olvidarme de las palabras que ha dicho.

LUCAS

Tenía mil ideas rondando su cabeza, sabía que su hermano tenía razón, si Olivia descubría lo que le hicieron a su hermano, lo más probable es que ella lo odiaría e incluso podía delatarlo.

—¿En qué tanto piensas Luc —Preguntó Olivia abrazándose a él con fuerza—.

—En nada.

—Mientes, algo te pasa — Lo miró apoyándose en su pecho— has estado muy callado.

—No pasa nada —Repitió besando sus labios en busca de silenciarla—.

—Vas a matarme Lucas —Cerró los ojos al sentir que volvía a tocarla—.

—¿Qué sientes por mí Olivia?

—Te amo.

La culpa pudo con él al escuchar sus palabras y no pudo evitar sentirse mal por la situación, tal vez su hermano tenía razón y lo mejor era alejarse de ella.

—¿Pasa algo Lucas?

—No.

—¿Entonces? ¿Por qué has dejado de tocarme?

—Yo... —Se quedó en silencio— tengo algo de hombre.

—¿Quieres qué te prepare un sándwich?

—Si por favor.

Bajaron hasta la cocina para preparar algo de comer y café, aunque Lucas solo podía pensar en que debía terminar con Olivia, para proteger a su hermano y al resto de sus amigos.

—Lucas —Lo llamó pidiendo su atención— ya está listo el café.

—Gracias.

—Te estás comportando extraño hoy ¿Qué te sucede?

—¿Te molesta si hablamos de tu hermano?

—¿De mi hermano? —Lo miró sin entender—.

—Sí, debes extrañarlo mucho.

—¿A qué viene todo eso?

—Nunca hablamos de lo que le pasó, debió ser difícil para ti y tu familia, siento mucho no haberte apoyado en ese momento —Se lamentó—.

—No tienes que disculparte, eso ya pasó.

—Olivia... —La tomó de las manos, pidiendo su atención— con todo lo que ha pasado ¿Crees qué es buena idea, que sigamos juntos?

—Lo dices¿Por lo qué le hicieron a mi hermano? —Respondió tomándolo por sorpresa—.

—¿Qué?

—Sé lo que tú y Alexian hicieron con mi hermano, y los inútiles de sus amigos.

—Olivia yo...

—Mi hermano estaba acosando a Abril, —Lo interrumpió— la atormentaba, lo descubrí porque vi los mensajes y las fotos que le enviaba, fui yo quien le dio la dirección exacta Alexian, para que fuera a buscarla esa noche, —Le confesó—.

—Lo hiciste sin saber que pasaría ¿No es así? Debes sentirte culpable por ello y...

—Sabía lo que pasaría —Afirmó— por eso lo hice —Contestó con total tranquilidad, mientras le daba otro sorbo a su café— Sé lo que tú y tu hermano hacen, sé lo de su grupo de limpieza.

—Olivia nadie puede enterarse de esto.

—Nadie lo sabrá —Aseguró— yo jamás haría algo que te pusiera en peligro.

—¿Por qué entregaste a tu hermano?

—Porque descubrí que se escribía con el tipo que abuso de mí, pensaba entregarme en baile de graduación, habían acordado en drogarme, a cambio él lo metería en su fraternidad, cuando entrara en la universidad —Contó con tristeza—.

—Ese maldito —Resopló Lucas furioso, golpeando el mesón de la cocina— debí ser yo quien le cortara la garganta.

—Lucas —Se abrazó a él, escondiendo su pecho, en su rostro— no puedo sentir pena por él, lo odio y me alegra que esté muerto, porque sé que así nunca más volverá a dañar a ninguna otra mujer ¿Crees qué eso me convierte en una mala persona? ¿Crees qué soy despiadada?

—Jamás —La tranquilizó— eres una gran chica, mi chica —Dijo con orgullo besando sus labios—.

La sentó en su regazo y la llenó de besos, sintiéndose más tranquilo de que ella supiera la verdad.