Madge embarazada

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 ¡¡Katniss!!

Prim no podía creer lo que veía. Delante de ella su amiga, la misma que conoció años atrás, está igual: con su sonrisa, su físico, su bondad y belleza.

- ¿Luzco la misma persona?

- Estás... wow, si no supiera la verdad pensarías que eres tú realmente.

- Finnick dijo lo mismo. - Katniss se sienta en la cama a su lado- Aunque tengo que reconocer que el traje me da un calor... me mata, te juro.

- Me imagino. Oye pero ¿qué dijeron los demás cuando te vieron?

- Bueno, algunos recién me conocían, otros me abrazaron contentos y... algunas me recibieron con mala cara.

- ¿Y Peeta? - Katniss la mira - ¿Qué pasó?

- Nos besamos- dice ella bajando la mirada.

- ¿Cómo?

- Sí, me vio y conversamos un poco y luego... no sé cómo y pafff estaba besándolo. Esos labios me derriten patito, te lo juro.

- Amiga... quizás no quieres que te diga esto pero sigues enamorada de Peeta.

- ¡Lo sé! Y es lo peor de todo.

- ¿Por qué el amor tiene que ser lo peor de todo?. Tú lo amas, él te ama ¿cuál es el problema?, ¿Madge, sus padres o tus miedos?

- No lo sé... todo supongo. Oye, pero ¿cómo estás tú?

- Mmmm... Cambia de tema no más. Yo estoy bien, un poco aburrida con tanto ir y venir pero en general bien.

- ¿Y cómo fue que el cazador se dio cuenta de tu enfermedad?

Prim iba a responder pero una voz masculina se adelanta, las dos chicas miran a la puerta y por ella aparece el cazador con su típico traje negro.

- Porque yo soy los ojos y oídos de este pueblo.

___

Cuando Marvel entra a la cocina de su casa se sorprende al ver que Sae tiene muchos platos con comidas, postres y ensaladas.

- ¿Y todo esto Sae?

- La señorita Glimmer me lo pidió.

- ¿Ella te pidió unas fresas con yogurt, unas pastas con crema y ensalada surtida?- pregunta incrédulo.

- Una mujer embarazada tiene antojos extraños señor.

- ¿y mis padres?

- En la sala, ¿quiere que los llame?

- No. Sólo preguntaba. Yo llevo la bandeja no te preocupes- Toma la bandeja que Sae ya había levantado y con mucho cuidado sube las escaleras. Entra al cuarto donde está Glimmer. - Un enorme plato de comida para la madre de mi hijo.

- Creí que estarías en el entrenamiento. - Dice ella perpleja al verlo con la bandeja.

- Ya terminamos. Peeta nos hizo trabajar como dos horas... estoy agotado.

- ¿Quieres unas fresas?

- Ya, gracias- Los dos están en la cama comiendo.

- ¿Qué opinas de la llegada de la morsa?

- Uff... ni lo digas. Peeta estaba con una sonrisa en el rostro que no veía hace meses.

- ¿El amor será así?, es decir... ¿cómo lo hace él para seguir enamorado de ella cuando no la ha visto por un año entero?

La gorda mas bella del mundo. (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora