-¿Sí?-Pregunta
-Hooooola Pablete-Digo con voz de niña pequeña, mi voz cuando he bebido demasiado tequila
-¿África?-Pregunta confundido, seguro que después de haberle gritado antes de marcharme no esperaba que le llamara.-¿Eres tú?
Sinceramente, yo tampoco esperaba llamarle, pero cuando quise reaccionar ya estaba hablando con él.
¿Que por qué le llamo? Fácil, cuestión de matemáticas: yo borracha+triste-cerebro= estupidez
No voy a echarme atrás ahora, ya he perdido suficiente dignidad.
Más bien toda.
-No, soy tu tía de Murcia, pues claro que soy yo-Digo riéndome cual idiota.-¿Quién iba a ser si no? Estás un poco tontito eh Pablete... Y luego soy yo la medio-tonta...
Tonta-entera más bien...
-¿Estás borracha?-Pregunta serio. Está demasiado lejos como para intimidarme, no puedo ver sus ojos ni su mandíbula y puños apretados (aunque sé que están ahí) por teléfono y me alegro.-Responde África
No me das órdenes rubito
¿Qué le importa lo que yo haga o no haga? Si quiero emborracharme lo hago y punto. No le debo ninguna explicación, no después de lo que pasó en Los Ángeles.
-A mí no me grites guapo-Digo en tono molesto.-Ni se te ocurra gritarme.
Las cosas ya no son divertidas, ahora me he cabreado.
-África...-Dice serio, odio que use mi nombre completo cuando se cabrea conmigo, me molesta.
-Pablo...-Imito su tono
-Vale, has bebido.-Afirma
-Un poquiiiiiiitoooo-Digo alargando las palabras y riendo.
Volvemos a las carcajadas. Me siento tan bipolar, pero es tan genial...
-Bastante más que un poquito, ¿dónde estás?
Río, su tono serio me hace gracia. Gruñe y río de nuevo
-En mi casa, pitufo gruñón, ¿dónde quieres que esté? No estoy para celebraciones precisamente...
-Tú fuiste la que se marchó sin avisar, no yo.
-Claro, porque todo es taaaan fácil a tu lado... Además, tampoco te importó mucho que digamos...-Le escucho suspirar.-Y dijiste cosas malas, cosas muy malas.
-Empezaste tú, tú te marchaste sin decirme nada y sabes que me dolió.
Si te dijera las cosas que haces que me duelen a mí...
-¿Y? Eso no es excusa. Y sabes que tenía mis razones, aunque sé que todo lo que tenga que ver conmigo que no sea sexo te da igual, así que...
-Deberías irte a dormir, ¿para qué me has llamado? Dejaste claro que no querías acercarte a mí nunca más-Dice con brusquedad, como si hablar conmigo le molestase.
Odio cuando está serio, y odio que me hable así.
Soy yo la que tendría que estar cabreada con él, no al revés.
Cómo le gusta darle la vuelta a las cosas... Quiere deshacerse de mí.
No va a resultarte tan fácil.
ESTÁS LEYENDO
Ecos (en edición)
FanfictionElla siempre ha seguido las normas, o al menos eso es lo que muchos piensan... Tiene una apariencia de inocente pero un corazón rebelde que no todos conocen, algo que no muestra a cualquiera. No se deja engatusar y sabe guardar sus secretos, tener s...