-¿A mí? No Juan, no me vas a tener. Lo primero, no soy un objeto, lo segundo, ni loca estaría contigo.
-Ay preciosa... Lo dices como si te estuviera preguntando...-Dice burlándose de mí.
Esa frase me recuerda a Pablo y me tenso, no quiero que Juan haga nada conmigo, no quiero que me toque, solo quiero estar con Pablo, daría lo que fuera por estar a su lado ahora.
Daría lo que fuera por no estar aquí con Juan, sola.
-Vete
-No, tengo que aprovechar que estás sola y que no están tus guardaespaldas. No voy a desaprovechar la oportunidad, preciosa. Espero que lo entiendas...
Se acerca a mí y me alejo, intento abrir la puerta pero no tengo la llave. Juan ríe y la agita en el aire con una sonrisa victoriosa.
Me da asco
-¿Te crees que soy idiota?
-Sí, lo creo.
-Eres muy contestona... ¿Por qué no cierras la boca de una vez?-Agarra mi rostro con fuerza y le escupo en la cara.
Aprieta la mandíbula y me da una bofetada que me tira al suelo. Toco mi mejilla que arde y me alejo lo máximo posible de él.
-No me toques.
-Eres una zorra, ¿lo sabías? Pero me gustas, y no sé por qué. Quizás porque no eres como las demás y me rechazas...
-¿Te gusta que te rechacen? ¿Sabes que eso significa que yo no quiero estar contigo? ¡Entiéndelo joder!
-Eres dura, y eso me gusta.
-Déjame en paz, te juro que si me dejas no diré nada de esto... Por favor.-Susurro con un hilo de voz mientras limpio una lágrima.
Tengo miedo, mucho miedo. Soy una chica fuerte y dura, sí, pero no puedo yo sola con esta situación.
-Claro que no vas a decir nada...-Se agacha y coge mi cara con sus manos.
Acerca sus labios a los míos y me besa con fuerza. Aprieto los labios e intento separarme de él sin éxito.
Las lágrimas siguen cayendo por mis mejillas y me aprieta el cuello, quitándome el aire. Me estoy ahogando.
-Necesito... Respirar.-Susurro
-¿Vas a estar tranquila?
Ni de coña, cabrón.
-Sí...-Susurro
Afloja su agarre un poco y besa mi cuello, dejando marcas en mi piel. Me da asco pensar que está dejando su rastro en mi piel.
-Cabrón... Suéltame hijo de puta.-Susurro intentando quitármelo de encima.
Por decirle eso me gano una patada en el estómago y otra bofetada.
-Te he dicho que te calles, ¿tan estúpida eres?
-No pienso callarme. ¡Suéltame! ¡AYUDA!
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Ecos (en edición)
FanficElla siempre ha seguido las normas, o al menos eso es lo que muchos piensan... Tiene una apariencia de inocente pero un corazón rebelde que no todos conocen, algo que no muestra a cualquiera. No se deja engatusar y sabe guardar sus secretos, tener s...