Ecos (en edición)

Capítulo 31: Te quiero

La canción se termina y Pablo y yo nos separamos. Mucha gente se está marchando y Alba viene hacia nosotros sonriente, demasiado sonriente diría yo.

Hay dos posibles explicaciones a eso: o ha ligado o se ha pasado de copas de champán. O puede que las dos.

-Holiiiiiiii.-Saluda demasiado efusiva.

-Hola, ¿qué tal?-Saluda Pablo

-Muy bien, y veo que vosotros más... Veros abrazados es demasiado tierno, y demasiado cursi. Olvidemos que lo he dicho.-Río

-Tú nunca has sido sentimental que yo recuerde Alba.-Me frunce el ceño

-¿Y tú sí? Tu lema era estar con un tío y dejarlo a la hora, o a los veinte minutos... Lo que te durase.

Pablo me mira alzando una ceja. Le saco la lengua.

-Bueno, las cosas cambian.

-Sí, cambian mucho. Hace dos días querías matarle y mírate ahora... Me voy con Jorge a casa, me va a llevar. Supongo que a ti te lleva Pablo, ¿no?

-Sí, tú vete tranquila. Yo me iré con Pablo dentro de un rato.-Pablo me abraza con su brazo y me besa la frente.

-Bueno, veo que esta noche no vienes a casa, pillines.

Pablo y yo reímos.

-Antes de que me ponga roja, vete, por favor.

-Qué bonito, tratar así a tu mejor amiga...

-¿Quién ha dicho que lo seas?

-Idiota.-Me abraza y besa mi mejilla, abraza a Pablo y se marcha.

La veo gritando a Jorge para que deje de ligar con una chica (con un vestido demasiado corto, por cierto) y que se centre en ella y le da una colleja antes de marcharse.

Sonrío, son tal para cual.

Dos tontos adorables.

Exploramos el lugar hasta llegar a un bonito balcón.

-Creo que hay algo entre Jorge y Alba.-Le digo y me apoyo en el balcón, puedo ver el mar desde aquí.

-Eso está bien, así no se fijará tanto en ti...-Pasa su brazo sobre mis hombros.

Pongo los ojos en blanco y le miro. No sé si habla en serio o solo lo hace por molestarme.

-Eres un pesadito con ese tema rubio, ni Jorge me gusta ni yo le gusto a él, es cierto que cuando nos conocimos de adolescentes tuvimos algo pasajero pero...

-¿Qué?-Interrumpe alterado.

¿Discusiones hoy? ¿HOY? Lo siento pero no, no voy a discutir por esto. Más que nada porque fue hace siete años.

-¡No te pongas celoso!-Digo riéndome- Teníamos dieciséis años, nos dimos un par de besitos y lo dejamos para ser amigos porque no hay quien me soporte. No hemos vuelto a mencionar el tema y no nos incomoda. Pablo, te prometo que no sentimos nada el uno por el otro. Éramos adolescentes y teníamos las hormonas revolucionadas-aún las tengo a decir verdad- y te aseguro que jamás va a pasar nada entre nosotros de nuevo.

Me abraza por detrás y besa mi cuello con delicadeza. Jadeo

No pienso decirle que Jorge fue el primero. Es mejor que piense que no pasamos de los besos. No fuimos novios en ningún momento, éramos muy amigos y no sé como surgió, simplemente pasó, pero es un momento que solo puedo recordar con cariño y sé que Jorge piensa lo mismo.