Continuando con el relato.
Un día de tantos decidí encender mi celular, estaba lleno de mensajes, en todos esos mensajes no había ninguno que fuera de Gerard, pero entonces descubrí uno de un número extraño, lo abrí y decía:
"Frank, ¿por qué Gerard estaba tan triste?, ¿discutieron? Soy Mikey".
Vi la fecha y era justo del día en el que él se fue. Lo ignoré y entonces tocaron a mi puerta, era Debbie. Me decidí a abrirle, ella me miró súper sorprendida por mi apariencia y pasó al departamento.
-¡FRANK! –Me abrazó. -¿Qué te ha sucedido? –Se apartó de mí y me siguió mirando.
-¿A qué has venido?
-¡Llevo más de un maldito mes sin verte, sin saber nada de ti, sin hablar contigo, apagaste tu celular! ¿Qué ocurrió? Tampoco he visto a Gerard, sólo a Bert y le pregunté por ustedes y él tampoco...
Mis oídos se aturdieron, ella había dicho "Sólo a Bert y le pregunté por ustedes..." ¿Cómo demonios se supone que pudo ver a Bert?
-¡Haber, haber, haber! ¿Viste a Bert? –Pregunté mirándola serio.
-Sí, lo vi hace mucho, como estaba súper preocupada por ti me acerqué a preguntarle si sabía algo de ustedes, de Gee y de ti.
-¡Pero se supone que Bert está muerto! –Exclamé.
-¿Muerto? Pero si yo lo vi vivito y coleando... ¿Cómo es que está muerto?
-Te explico después. –Tomé mi celular y marqué al número de Gerard, pero me decían que el número no existía. –No puede ser, ¿estás complétame segura de que era él?
-¡Te juro que era él! Frank, explícame lo que está pasando.
-Que Gerard me dijo hace mucho que Bert estaba muerto, él estaba completamente seguro de que estaba muerto, lloró mares por él. –Negué incrédulo. –Tenemos que ir a la casa de Gerard, rápido.
-Vamos, vamos.
Ambos salimos corriendo dirigiéndonos a la casa de Gerard.
Luego, descubrí que yo no era el único que estaba viviendo un calvario durante tanto tiempo, cuando Gerard escribió:"...Te extraño tanto, siento que ya no puedo más, no he comido bien, he perdido peso, mucho peso, mi cara está demacrada, ya no parezco humano. Me han dado tantas ganas de llamarte, pero no lo hago, siempre digo que será mañana, por eso es que no he hecho lo que debí hacer hace mucho. Espero que tú te encuentres bien, que ahora que estoy lejos puedas vivir mejor.
He permanecido encerrado en mi habitación durante más de un maldito mes, salgo por comida cuando no hay nadie y me ducho de igual forma, sólo cuando la casa está completamente sola, estoy técnicamente obligado a no hacer ruido, ellos creen que me fui de viaje, realmente ni siquiera les importa. La verdadera razón por la cual no me fui, fue porque no quería abandonar mi casa, mi ciudad, para morir en otra, eso no es lo que quiero, tengo las fotografías que tomé pegadas en la pared, sólo para verlas cuando despierto, me encanta verte sonreír, porque presiento que estás mejor ahora. Me he tomado la molestia de escribirte muchas cosas, he hecho este cuaderno especialmente para ti, para cuando me vaya tengas una idea de lo que pasó, es una lástima todo esto..."
Debbie y yo llegamos a la casa de Gerard y tocamos como locos, pero nadie abría, se escuchó que algo se quebró y miré a Debbie asustado.
-¡Por favor, abran! –Gritó Debbie.
"...Hoy la casa está vacía, lo único que se escucha son mis pasos, bajé llevar algo de comida para que me alcanzara hasta el día siguiente, entonces escuché que alguien tocó de manera horrible, muy fuerte, me asusté mucho y dejé caer un plato. Una chica gritó que abrieran, pero sólo junté lo que pude del plato y salí corriendo a mi habitación a volver a encerrarme".
-Es inútil, no quieren abrirnos, ahora tengo algo que arreglar con Bert, ¿sabes dónde es su casa?
-No, lo siento.
-No te preocupes, ya sé quién sabe.
Tomé un taxi directo a casa de Billie, Debbie no se separó de mí en ningún momento. Al llegar bajamos y tocamos en la casa de Billie, él abrió muy asustado y me miró con sorpresa, también me abrazó, pero se separó casi de inmediato.
-¿Qué puedo hacer por ustedes? –Preguntó muy sonriente.
-Llévame a la casa de Bert, ahora mismo.
No dijo nada, tomó las llaves de su coche y subimos los tres. Mientras iba conduciendo mi celular sonó, era un número desconocido, contesté, pero nadie del otro lado de la línea contestaba.
-Hola, ¿me escuchan?
-....
Colgué y guardé el celular.
"...Entones decidí llamarte, tomé el celular de Mikey y te llamé, pero no tuve la valentía de hablar, sólo quería escuchar tu voz de nuevo. No había cambiado en nada, fue increíble volverla a escuchar, aunque colgaste, pero al menos había logrado escuchar de nuevo..."
Llegamos a la casa de Bert y toqué desesperado la puerta, mi coraje estaba elevando, esta vez no me importaba lo que pasara, Bert iba a pagar todo el maldito daño que había hecho de una vez por todas.
-Frank Iero.
ESTÁS LEYENDO
Mis Memorias De Gerard Way. [Fanfic Frerard]
FanfictionFrank Iero, un chico de 20 años que estudia psicología en la universidad de New Jersey conoce a un chico de nombre Gerard Way del cual queda cautivado desde el primer momento en el que lo ve. Interesado por si quiera hablar con él, hace lo que sea...