Valquiria - La princesa vampira

Capítulo 8

CAPÍTULO 8

Me desperté en medio de la noche era pasada la medianoche. Estaba bañada en sudor, no se debía a la temperatura, porque la noche era fresca, la habitación se sentía fresca. Mi cuerpo estaba mojado, expeliendo el sueño que tuve minutos antes. Me senté en la cama para volver a la normalidad, mi corazón a mil por hora, no podía reducir el ritmo cardíaco. Traté de pensar en una buena cosa para apartar la extraña sensación dentro de mí.

Las escenas del sueño eran muy fuertes, fuertemente golpeaban mis pensamientos. Eros me persiguió en todo el sueño, me llevó a un lugar oscuro y lúgubre, una enorme sala con varias puertas cerradas.

Abrió una de ellas y me llamó con un simple gesto con la mano, para que yo fuese con él, me desperté antes de tomar una decisión. Fue un sueño estúpido, no tenía pies ni cabeza, no entendí por qué me quedé aterrorizada.

Me llevé otro susto cuando una lechuza se sentó en la ventana.

No recordaba haber dejado la ventana abierta, siempre las dejaba cerradas antes de acostarme.

La lechuza se quedó inmóvil, mirándome todo el tiempo, con esos ojos grandes y grises, no sabía qué me estaba poniendo tensa, si era un sueño o un animal delante de mí. Salí de la cama temblando de pies a cabeza. Caminé hacia la ventana para asustarla con mi almohada.

Ella voló hacia el árbol junto a la casa, debería ser de donde vino. Cerré la ventana y corrí las cortinas, uniéndolas, me sentía a salvo después de que había tomado todas las precauciones.

Volví a la cama...Me llevó horas para volver a dormir otra vez.