Valquiria - La princesa vampira

Capítulo 58

Capítulo 58

Mi garganta estaba seca, angustiada por aún estar presa en aquella jaula. El brujo no había cumplido con su palabra. Las horas estipuladas por él para que la fórmula quedara lista ya se habían agotado.

Yo estaba perdida, si él no resolvía sacarme de allí.

Él no había preparado ninguna fórmula, era todo un engaño.

Regresó al lugar después de estar largo tiempo ausente. Con las manos vacías.

- ¿Por qué me encerraste aquí?

Cuestioné.

-¿Aún no te acostumbraste?

Bromeó.

-¿Qué hice yo para que usted hiciera esto conmigo?

-Tú nada... pero tu padre si hizo...

Las cosas estaban tomando forma. Él se quería vengar de mi padre, usándome.

-¿Qué hizo mi padre?

-El problema... es que él "no hizo".

Apreté los ojos, no quería creer lo que estaba pasando.

-Yo quería la inmortalidad de los vampiros.

Se acercó a la jaula, colocó su rostro terrible cerca de mí.

-Yo sólo necesitaba beber sangre de él... Pero nada.

Caminó alrededor de la jaula, desahogando.

-Y él negó eso con todo desprecio. Tuve que recurrir a la inmortalidad de otra forma, inventado una forma de vivir por más tiempo. Eso me da trabajo hasta hoy, porque yo aún no la consigo.

Paró su caminata y concentró su atención en mí, presa en la jaula.

-Tú serás mi nueva tentativa.

Soltó una larga carcajada.

-Y cuando eso suceda, y yo no necesite más de ti, te arrojaré para satisfacer el hambre de mis perros.

-¡Entonces haz lo que deberías de haber hecho y acaba con esto! -Supliqué.

-No tengo prisa. Y verte en ese estado... compensa todo mi tiempo perdido.

-¡Me destruirás más tarde! - Grité.

El brujo ignoró mis gritos y caminó hasta el cuarto de al lado, me dejó sola de nuevo.