Julie se encontraba en el saloncito, tomando un té cuando oyó que llamaban a la puerta.
En ese momento no había ningún sirviente en la casa así que ella misma salió a abrir. Cuando la abrió, se encontró a un hombre que portaba a su sobrina en brazos, inconsciente.
-¡Oh Dios mío!- exclamó la mujer- ¿qué le ha pasado a mi sobrina?
-Se ha desmayado.
-Pase, acompáñeme al salón- dijo Julie con preocupación y caminando hacia el salón.
-¿No me recuerdas, tía Julie?
La mujer de repente se detuvo. Luego se giró lentamente.
-¿Zachary?
Él sonrió.
-Sí tía, soy yo.
-¡Oh Dios mío! ¡Zachary, has vuelto! Pero ¿cómo has encontrado a tu hermana?
-Es una historia muy larga, primero hay que atenderla.
-Sí, tienes razón, acompáñame, la llevaremos a su habitación.
Los dos subieron a la planta alta y Julie entró en la habitación de Sairin donde Zachary la dejó en la cama.
-Trae agua de rosas para despertarla.
-Pero ¿qué le pasó?
-No lo sé, lleva unos días un tanto rara, como si tuviese nauseas, mareos...
Julie lo miró y luego miró a su sobrina. Notó la ligera curva de su vientre y sonrió complacida.
-No te preocupes, Zachary, son síntomas de embarazo.
-¿Embarazo? ¿Mi hermana estaba embarazada y no me lo contó? ¿Por qué no me dijo nada?
-Quizás no lo sabía. Nunca le comenté los síntomas de embarazo, ni siquiera tuve tiempo desde que recibía las amenazas de muerte y todo lo demás.
Zachary se llevó las manos a la cabeza.
-Dios, he estado a punto de matar a mi hermana y a mi sobrino sin yo saberlo.
Julie lo miró, sorprendida.
-¿Qué has dicho?
-Tía Julie, no te alarmes, pero lo que tengo que decirte es muy duro de asimilar.
-Dime lo que sea, ¿por qué has dicho que has estado a punto de matarlos?
-Yo he sido quien la ha atacado en todo este tiempo.
-No puede ser, la persona que la ataca es un mercenario llamado Depredador...- Julie se detuvo en su discurso y se llevó las manos a la boca para sofocar el grito que pugnaba por salir de su garganta- no...
-Sí, tía, yo soy el Depredador, me contrataron para secuestrar a mi hermana, me dijeron que su padre había robado algo que no le pertenecía y quería cobrársela con ella.
Julie estaba sorprendida. No se esperaba que su recién aparecido sobrino fuera un mercenario buscado por la ley para ejecutarlo.
-Pero... ¿por qué?
-Es muy largo de explicar, tía, primero hay que despertar a mi hermana.
-Sí, tienes razón, creo que por aquí hay una botellita de agua de rosas- dijo la mujer rebuscando en la habitación, cuando lo encontró se lo acercó a su sobrino.
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Atrápame en tu pasión
RomanceSairin vivía felizmente con su tía tras la dolorosa muerte de sus padres. Estaba enamorada de Edward, un hombre que cualquier mujer desearía. Pero una amenaza se cierne sobre la joven, y con la ayuda de Edward intentará resolver por qué quieren ve...