~Aunque no me puedas ver. [Camren]

-Capítulo 32.

LAUREN POV.

-¿Segura que puedes ir sola, hermanita?

-Claro-Chris me saludó y me dejó en la puerta del edificio que ya conocía. Me saludó el encargado llevándome hacia el ascensor para poder llegar a destino.

-¿Al mismo de siempre?-Se rió Benjamin, devolví el gesto con una sonrisa. 

Segundos después, sentí como entraba una persona, yo aguardando un poco más por si había alguien cerca.

-Disculpe... ¿A que piso va?

-Lauren-volví a escuchar a Benjamin-la chica está mal de la voz, pero me dice que al piso 4.

-Lo siento, no puedo ver-sonreí-vamos al mismo.

Busqué el número correspondiente, agradeciendo que estaban escrito en Braille. Escuché como se cerraba la puerta y una vez dentro esperé para llegar a destino. Al estar encerrada, pude percibir su perfume, era tan familiar para mí. No pude evitar sentir un poco de nostalgia.

-Me gusta tu perfume, me hace recordar a alguien-sonreí y pude escuchar como ella aguantaba un sollozo-¿Estás bien?

-Sí-apenas escuché su voz, las puertas abrieron y salí lo más rápido que pude, tropezando. Antes que toque el piso sentí sus brazos deteniendo mi caída. Cuando me pude mantener en pie normalmente ella se apartó-ten cuidado.

-Espera-grité-gracias.

-No hay de qué, Lauren-sonrió y se fue. Escuché el ruido de sus zapatos resonando y como abría la puerta.

Sigo pensando que ella me hace recordar a alguien.

-Laur-escuché la voz de Virginia-¿estás bien?

-Sí-sonreí-¿Viste a la chica que recién me ayudó?

-Sí, es la novia de mi vecina, ¿Por qué?

-¿Sabes su nombre?

-¿A qué vienen tantas preguntas?-sonrió y me besó en los labios.

-Fue muy amable conmigo, sólo eso-me encogí de hombros-entremos ya.

Como casi todas las veces la pasábamos bien, pero no  era lo mismo. No éramos nada en sí, pero me hacía sentir bien. ¿La estaba usando para reemplazar el vacío que sentía por Camila? En cierta parte, sí. Si bien sólo me besaba y no volvimos a tener relaciones, me sentía demasiado perseguida por todo esto.

Los días iban pasando y no sabía nada de Camila, Dinah y Ally apenas tenían tiempo ya que estaban ocupadas en su rol de madres y Normani atareada, por lo que casi no venía a casa.

Muchas veces me topé con esa chica de voz extraña, la cual me ayudó en reiteradas oportunidades. Mucho no me hablaba ya que tenía problemas con su voz, pero igual así, me gustaba cruzarla siempre. 

Por eso me extrañó que hoy no haya aparecido.

CAMILA POV.

Ver a Lauren todos los días durante algunos minutos. Sí, eso era la base de mi felicidad. Era lo único que hacía que tenga una hermosa sonrisa todo el día. Si bien era doloroso, pensé que era por su bien, y de cierta forma, me gustaba verla feliz. 

-Amor-Kate se acurrucó sobre mí-¿En qué pensabas? Sonríes mucho.

-Recordaba algo que me dijo Sofi-volví la vista al libro que se encontraba en mis manos, ella lo cerró y lo dejó a un costado, lo cual hizo que dirigiera mi vista a ella.

-Me gusta que leas, pero quiero que pasemos tiempo juntas-entrelazó nuestras manos-ya debo irme, pero podríamos cenar afuera si quieres-sonrió-así estrenas el vestido que te regalé ayer.

-Buena idea-dirigí la vista hacia ella y quedé pensativa un momento.

-¿Pasa algo?-se movió un poco para mirarme directo a los ojos.

-Sigo pensando eso es todo-me removí de mi lugar, incómoda-¿Puedo abrazarte?

-Claro que puedes hacerlo-segundos después estaba en sus brazos con algunas lágrimas contenidas por mucho esfuerzo.

-Te quiero, Kate-cerré los ojos para atesorar ese momento.

-Y yo a ti, Mila. Te quiero muchísimo-se separó para besarme, lo cual me negué. Tomé su mano y deposité un beso allí, otro en su frente y finalmente uno en su mejilla. Kate buscó su bolso y se fue luego de despedirse.

Lo que ella no sabía, es que me despedí en serio de ella.

Busqué mis pertenencias que previamente había guardado y me subí a un taxi. Dejé todo en casa de Normani para después pasarlo a buscar y me dirigí al único lugar en el mundo donde quería estar.

A casa de Lauren.

Cuando llegué a destino y volví a ver aquella casa, supe que hice lo correcto. Desde donde estaba, pude ver a Lauren dentro. No pensé mucho antes de entrar.

OMNISCIENT POV.

Lauren se hallaba sola y por lo que le había dicho su madre, no volvería a almorzar. Se extrañó un poco cuando escuchó la puerta abrirse pero le restó importancia. 

Camila, por su parte, se encontraba nerviosa. Caminó despacio hasta quedar muy cerca de ella. Sintió un dolor en su pecho cuando vio a Lauren sentada en la mesa con dos platos de comida, uno para ella y otro donde siempre se sentaba.

-Lern...-la voz de Camila era temblorosa e insegura. 

Lauren también ignoró eso, ya que había sufrido varias alucinaciones auditivas durante este tiempo. Su psicóloga lo explicó que no era algo anormal pero era más frecuente en personas con ciertas patologías, lo cual la tranquilizó. Había comenzado a creer que en este tiempo sin Camila estaba perdiendo cada vez más la cordura.

-Camz...-apenas susurró, queriendo alejar ese pensamiento de su mente.

-¿Aún es muy tarde o puedo almorzar contigo?

Lauren se paralizó. Era Camila.