Capítulo 16

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Al salir del baño junto con Raquel, Claire, Dana; con nuestros bikinis, varios chicos se nos quedan viendo. Mi traje de baño es rojo y resaltan mucho mis pechos. Por las miradas de los hombres, puedo saber que se me ve bien.

Busco a Derek con la mirada mientras caminamos, pero no lo veo. Dejo mi bolsa en la terraza junto con las otras de las chicas. Y ahí es cuando veo a Derek caminando por el jardín con una cerveza en la mano, sin camisa y solo su traje de baño, se ve tan claro su abdomen marcado. Me descubre viéndolo y se ruboriza, que guapo se ve. Me observa todo el cuerpo y sonríe, esa que solo él tiene. Le da un trago a su cerveza y empiezo a sentirme incomoda que no aparte la vista de mi cuerpo, aunque también me gusta que me vea de esa manera.

Cuando me doy cuenta, las chicas ya no están a mi lado. Están cerca de Derek con sus amigos. Camino hacia Derek, tratando de verme bien, caminar perfecto, ya que no me quita la mirada. Camino normal, buena señal de que no estoy borracha. Lo que significa que puedo otra bebida. Llego con Derek, que está rodeado de amigos, pero el solo me presta atención a mí.

Me agarra la mano y me la sube con un gesto placentero, mientras le sonrío.

-El rojo me gusta-sin soltarme la mano me dice bajando mi brazo diciéndome al oído.

-A mí el azul-respondo de acuerdo al color de su traje.

-Ven-me dice jalándome a la alberca de la mano.

Nos sentamos en la orilla de la alberca, con los pies en el agua, y pasa el mesero. Sin pensarlo agarro la misma bebida de la sombrilla, pero de color naranja ahora. Derek sigue con su cerveza. Sabe igual a la otra, solo cambia el color. Esta se ha vuelto mi bebida favorita.

-¿Qué es esto? -le pregunto relamiéndome los labios.

-Creo que un coctel primavera. Te puedo besar-me contesta.

Antes de poder reaccionar, ya lo está haciendo.

Se separa después de unos segundos, y Derek salta a la alberca, salpicándome agua. Me quedo sentada viéndolo sumergirse riéndome.

-¡Ven! -me dice con mucho entusiasmo sonriendo. Me extiende la mano para que la agarre. Yo solo tengo los pies en el agua.

Dejo la bebida en la orilla. Y le entrego mis dos manos a las suyas. Me jala y caigo en la alberca, sintiendo el agua tibia por mi cuerpo.

Los dos nos reímos, mientras rodeo su cuello con mis brazos abrazándolo, y él me abraza por la cintura bajo el agua. Pego mí frente a la suya.

-Anne, cierra los ojos-me pide dulcemente, y obedezco-no los abras hasta que te diga. Ahora aguanta la respiración- quiero preguntar porque pero siento sus manos en las mías jalándome hacia abajo del agua y de inmediato obedezco. Me sumerge al mismo tiempo que él y me acerca. No veo nada, pero siento su cuerpo cerca al mío y luego, sus labios por un instante en los míos. Ya no aguanto la respiración y salgo.

Aún así, no me arrepientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora