Aún así, no me arrepiento

Capítulo 20

-¿Sabes? Acá traje a tu hermano cuando vino-me dice-Le gustó mucho.

-Supongo, le gustaban mucho estos lugares-contesté tocando la pulsera que me regaló.

-¿Lo extrañas?

-Mucho-digo con los ojos vidriosos.

Al darse cuenta Derek, cambia de tema.

-Te quiero invitar a algo-dice apropósito-Mañana tengo una pelea.

-¿Pero sabes que siento? Frustración-continuo hablando del tema de mi hermano-No puedo hacer nada, nada para volver a verlo. Me frustra no poder hacer nada al respecto, y nunca podré-en cada palabra más vidriosos se me ponen los ojos, pero continuo- Yo quisiera por lo menos una vez más volver a verlo, o revivir un recuerdo, porque cada vez son más borrosos.

Derek se me queda viendo en silencio.

-Perdón...-digo casi en un susurro- Dime de tu pelea.

-No te sientas así. Sé que ya te dijeron muchas veces que por algo pasan las cosas. Eso es cierto, no sabrás nunca la razón por las que pasan, pero quiero que sepas que es por algo. Es difícil, pero si tienes eso consciente, te resultará menos-hace una pausa y me ve a los ojos-No puedes regresarlo a la vida, no lo volverás a ver, no puedes cambiar eso, y sé que duele, lo único que te queda es aceptarlo, y no hacerte sufrir más.

Son las palabras perfectas, eso necesitaba que alguien me lo dijera.

Le sonrío.

-Gracias, lo necesitaba.

Extiende sus manos abiertas hacia mi buscando las mías. Se las entrego.

-Siempre.

-Tu pelea...-le digo.

-Ah sí. La organiza mi gimnasio. Es solo una práctica. Pero quiero que vayas, por favor.

-No me gustan esas cosas, pero si, voy. ¿En dónde será?

-En mi gimnasio, en la noche-contesta-Yo te llevo.

-Está bien-digo nerviosa.

No quiero verlo ser lastimado, ni a él lastimando a otro. No quiero volver a ver lo que vi hoy en la mañana en su gimnasio. Pero no le voy a decir que no, me pidió que vaya.