Tu amor es mi redención

Cap 46- Seis meses

Seis meses:

- Se lo llevaron- respondió Sean.

No, no, no, por favor ¡No pueden hacerle daño! Empezó a hiperventilar

- ¿Quien? ¡Qué hacemos aquí, vamos por él!- hablaba desesperada, ansiosa. Quería salir de ese lugar e ir a buscarlo. ¡Él estaba herido! No le importaba poner su vida en peligro una vez más, con tal de salvarlo.

- ¡Ruby, Xavier está bien! Recibimos una llamada telefónica al poco tiempo que despertó, dejándonos saber que vendrían por él. Esa fue la razón por la cual el Doctor insistió que salieras del cuarto. Sabía que también querían acabar contigo y quería protegerte. Lo sacamos antes que llegaran, él está bien

Su corazón se tranquilizó un poco.

-¡Vamos con él! Llévame a verlo.

- Lo siento, no hay nada que pueda hacer al respecto. Ahora él está bajo protección del gobierno de Estados Unidos. Se ha convertido en una pieza muy importante en la investigación, el que lo quisieran matar hace que el gobierno actué.

- ¿Cuándo lo podré ver?

- No lo sé, pero yo estaré al tanto y te mantendré informada. Al menos puedes tener la tranquilidad que estará a salvo.

*****

Seis meses después

Ruby hija, tu madre y yo queremos ir al pueblo a hacer unas compras- sonrió nerviosa la madre de Xavier -¡Es que si no salimos de aquí nos volveremos locas!- a Ruby no le gustaba mucho esa idea, aún no era seguro que salieran a la calle - bueno, lo que queríamos era pedirte permiso para llevarnos al pequeño Ángel con nosotras.

- No creo que sea prudente, no sabemos como están las cosas allá afuera.. - respondió indecisa, pero amablemente.

- Llevaremos escolta si te hace sentir más tranquila- la interrumpió.

¡Que imprudente era! ¿Cómo es que quería sacar al niño a la calle, cuando conocía muy bien en la situación que estaban?

- No hemos hablado con Sean, para que nos diga cómo están las cosas allá afuera y no..

- ¿Hablan de mí? ¡Escuche mi nombre!- la voz de Sean los interrumpió. El corazón de Ruby se aceleró al escuchar su voz, estaba feliz de verlo y no solo eso, por fin sabría algo de él. Corrió a sus brazos feliz y se le colgó del cuello.

- ¡Sean! Tanto tiempo sin saber nada de ti- se despegó de su cuerpo y dio un golpe en el hombro -¿Nunca vuelvas a hacer algo así, me estás oyendo?

Sean río y llevo la mano a su frente, en saludo militar.

- A sus ordenes jefa.

Los dos rieron y se volvieron a abrazar. Como extrañaba la sonrisa de su amigo.

- Escuche mi nombre cuando llegué, en qué puedo servirles. Volteó a ver a la madre de Xavier y le extendió la mano para saludarla.

- Quieren ir de compras y llevarse al niño, pero no creo que sea prudente..

- ¿Por qué no? Que vayan, solo que lleven a uno o dos..

- ¡Sean!- dijo su nombre angustiada.

-Todo está bien, aquí no tienes por qué temer. Mandaré a mis mejores hombres si eso te da más tranquilidad.

- Está bien, pero mucho cuidado- respondió viendo a la madre del amor de su vida, después de pensarlo unos segundos y la mujer se marchó feliz.

- ¡Sean hijo!- habló el señor Fritz, que salía de su oficina -¿Cuando llegaste?- preguntó mientras le daba un abrazo.

- Apenas unos minutos.