Adiós Lizzie y adiós casa:
"Narra Via"
Ya había pasado tres semanas desde lo de la prisión. Me he dado cuenta de que una de las rejas que rodea la cabaña esta floja y en cualquier momento se abrirá y nos dejará descubiertos.
En fin, me acababa de despertar y me vestí con unos vaqueros ajustados azul claro, una musculosa suelta gris y mis botas. Cogí un cuchillo y me lo puse dentro de mi bota. Cogí mi arma y lo puse en mi cinturón.Cuando fui ha la cocina, noté que había una nota pegada en la nevera. Me acerqué ha la nevera y la nota decía:
Queridas Via, Mika y Judith:
Me he ido con Lizzie ha buscar provisiones. Hos pido que seáis buenas y que se queden dentro de la casa y obedezcan ha Via. Volveremos sobre las una de la tarde.
Ps: Dejé la comida en el horno.
XoXo Carol.
De nuevo cuidando ha la pequeña Grimes y ha la pequeña Samuel.
En el momento en el que acabé de leer la nota, Mika bajó frotándose los ojos.
Mika: ¿Donde estan Carol y Lizzie? Preguntó poniéndose al lado mío. Yo le sonreí.
Via: Se fueron ha buscar provisiones. Dije y mire ha Judith. ¿Que quieres desayunar? Pregunte dirigiéndome ha la cuna de Judith y la cogí porque esta lloraba.
Mika: ¿Puedo comer nutella? Yo reí. Claro, con pan. Yo asenti y le dí ha Judith.
Via: Un bocadillo de nutella en marcha. Dije y se lo empecé ha preparar.
Derrepente, se me vino las imágenes del grupo. ¿Que pasará si alguien muere? ¿Les volveremos ha encontrar? ¿Terminus es un buen lugar para vivir? Estaba tan concentrada en mis pensamientos que no me dí cuenta de que me corte el dedo. Mierda. Me lo curé y seguí haciendo el bocadillo de Mika. Al terminar, se lo di y empecé ha preparar el biberón de Judith.
Mika: ¿¡Porque llora tanto!? Preguntó desesperada. Yo cogí ha Judith rápidamente y la mecí.
Sin más, oímos como la puerta se abría. Judith se calló y Mika se escondió detrás de unos muebles. Me escondí debajo de una mesa que tiene un paño que no te deja ver por abajo.
xxx: ¿Hola? Preguntó. Me alivié al escuchar su voz, aunque sonaba quebrada.
Mika: ¡Que susto, Carol!
Pero cuando salimos del escondite, Carol tenía lágrimas en sus ojos y con las manos, brazos, estómago y piernas con sangre y papa colmo, Lizzie no estaba.
Mika: ¿Y Lizzie? Preguntó asustada. Carol se derrumbó al suelo y Mika y yo la entendimos. No.... ¡NO, LIZZIE! Grito con todas sus fuerzas. ¿¡Porque!? ¿¡Porque ha Lizzie y no ha mi!? Preguntó derrumbándose en el suelo junto ha Carol. Yo también lloraba pero no tanto como ellas. Judith las moraba fijamente, como si intentará averiguar que pasaba. ¡¡Quiero morir!! Dijo y Carol la abrazó.
Carol: Nunca más digas eso, Mika. Dijo acariciando su cabello mientras que la recién nombrada lloraba en el pecho de Carol. Eres fuerte y hermosa. Además, tu hermana hubiera querido verte seguir adelante. Dijo y Mika la miró. Carol le dio una sonrisa débil y le limpió las lágrimas. Ella esta en un mejor lugar ahora, pequeña. Mika le dio una sonrisa triste y la abrazó. Carol se lo devolvió y dijo. ¿Quieres jugar monopoli? Mika asintió entusiasmada.
Y la tarde pasó así. Risas, sonrisas, bromas, comida, lloros (Judith).
Estábamos jugando, cuando oímos unos gruñidos afuera. Bufé y dije...
Via: No nos dejarán nunca en paz? Mika se encogió de hombros.
Miré por la ventana y juró que viajé ha la luna... Había una horda de más de 40 caminantes.
Via: ¡¡CAROL!! Grite y ella vino asustada. Tenemos que irnos... ¡¡Pero ya!! Grite desesperada. Mika, tu coge mi mochila y mete toda la ropa y comida que puedas encontrar. Carol, carga ha Judith. Dijo y ambas hicieron lo que dije.
Cuando Mika cogió mi mochila y Carol cogió ha Judith, salimos por la puerta trasera. Maté algunos caminantes con el cuchillo, evitando atraer al resto de la pandilla. Saltamos un muro y nos adentramos en el bosque. Otra vez desprotegidas. Dejaremos una vez más nuestro hogar. Ahora sólo queda una opción... Ir ha Terminus
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Mi Sheriff (Carl Grimes)
RandomHa pesar de haber sido abandonada por su familia y haber perdido todo y todos, Olivia nunca perdió la alegría y la esperanza de que el mundo volvería ha ser como antes. Carl tiene una historia diferente. El tenía esperanza y alegría al principio. S...