Sobrevivir

CAPITULO TREINTA Y UNO

- ¡¿que?!- la potente voz de mi padre retumba en todo el negocio- ¿que que? - vuelve a preguntar mirando fijamente a Ignacio intentando atravesarlo con su mirada- repítelo- ordena.
-Izzy está embarazada, vamos a tener un bebé- le repite lentamente con calma. Papá no se mueve, no pestanea, solo crispa las manos en un acto de nerviosismo.
- papá, no te alteres- digo acariciando su brazo.
- no estoy alterado- dice con calma, luego de un rato de silencio habla- ven para acá renacuajo- le dice con los dientes apretados mientras lo agarra del cuello de la camisa- mas te vale cuidarla y tratarla bien- le dice, su cara está peligrosamente cerca de la de Ignacio- cualquier problema quiero ser el primero en enterarme, y por favor que esto se mantenga un tiempo en secreto, hasta que todo el lio de tu padre y de tu ma...ma... esa mujer Sandra se tranquilice- dice soltandolo.
- si, señor- dice con una sonrisa. Comienzo a ver todo borroso, y pierdo algo de la conciencia, me apoyo un poco fuerte en el hombro de papá. Los dos se apuran a sostenerme antes de que caiga al suelo. Alguien trae una silla y me sientan, siento algo frío en mi frente y poco a poco comienzo a reaccionar de nuevo, al primero que veo es a Ignacio con cara preocupada y a papá sin expresion.
- mejor?- pregunta papá. Asiento sin poder emitir palabra.- muy bien, reposo. - dice obligandonos a irnos a casa.
Media hora despues aparecen de improviso por la ventana mis hermanos. Los tres.
- Izzy- gritan los tres a coro- te queremos- vuelven a gritar, me río junto con sus vitores y los abrazo en cuanto vienen a la cama de Ignacio.
- ¿que quieren ahora?- pregunto con una sonrisa, ponen cara de inocentes pero pongo los brazos en jarra dandoles a entender que no me lo creo.
- vale, ¿nos dejas salir con unos amigos a unos juegos?- pregunta Pedro.
- yo si, pero pregúntale a tu tutor- digo señalando con la cabeza a Ignacio.
- si pueden- responde el aludido- pero vuelvan antes de las seis- les dice serio. Ellos asienten y se vuelven a ir.
- vas a ser un gran padre- digo en forma soñadora mientras toco mi panza.
De golpe corro al baño y devuelvo todo lo que he comido. Luego de lavarme los dientes sacandome el mal sabor salgo del baño. Ignacio está sentado en su cama con los dedos entrelazados appyabdo sus codos en sus rodillas, mirando el suelo. Me escucha caminar e inmediatamente levanta la cabeza.
- todo eso de los síntomas del embarazo me pone mal, tengo miedo de que te pueda pasar algo, de que te desmayes estando sola y te lastimes o se lastime el bebé- dice mirándome con los ojos cristalinos.
- gracias- digo con la voz afectada sentandome a su lado y abrazándolo- gracias por todo, eres lo mejor que me ha pasado en estos meses- digo y beso su sien- me aseguraré de estar siempre acompañada- digo. Gira su cabeza y me besa de forma tierna al tiempo que una de sus manos acaricia mi msejilla. Unos golpes en la puerta nos separan, y esa voz nos pone alerta.
- Ignacio- lo llama Sandra.- contestame, se que estas aqui-vuelve a decir. Me hace señas para que me esconda pero me niego, quiero enfrentarla.
- ¿que quieres?- pregunta una vez abre la puerta, su tono es hosco.
- que te alistes, mañana llega tu padre- dice sin inflexion.
- ¿que? ¿no llegaba dentro de dos semanas?- pregunta, su voz suena perpleja.
- se adelantaron las cosas, y por favor respeta a tu padre.
- él me odia, usted no puede pedir eso- le responde con asco.
- no importa, no viene solo- dice con un deje de resignacion. Mira hacia el interior y me ve- ¿y tu que haces aqui?- pregunta
- soy su novia- digo como si hubiese preguntado una locura.
- bien, ella no aparecerá mañana aqui- espeta, se gira y está por cerrar la puerta pero me avalanzo a ella y la abro de golpe.
- ¿disculpe? ¿y usted quien es para decirle eso? - pregunto furiosa.
- Izzy, dejalo- me susurra Ignacio.
- sueltame- le ordeno furiosa.- dígame señora Sandra, ¿porque? ¿que le hice? digame, quiero escucharlo- digo intentando mantener la calma.
- callate niña, no entiendes- dice.
- ¡¿que no entiendo?! ¡¿no entiendo porque abandonó a sus dos hijos en medio de una calle?! ¡¿o no entiendo porque obligó al padre de esos niños a que no se acerque?! ¡¿o tampoco entiendo porque permite que su marido le pegue?! ¡¿eso es lo que no entiendo?! - le grito y le escupo en su cara, la ira me puede y exploto.
- tu... ¿como lo sabes?- pregunta igual de calmada que antes. La mano de Ignacio intenta arrastrarme pero me suelto de un tirón.
- entonces es cierto- susurro- ¿cómo lo se? no le importa- espeto.
-tu... pero no... entonces tu... tu eres Isabel Alai Renner, con cambio de apellido, eres mi hija- dice realmente sorprendida. Ahora es mi turno de sorprenderme.- hija- intenta acercarse pero me alejo asqueada.
- ¡no me toque!, ¡usted no es mi madre, mi madre es la que ahora está en coma por culpa de su marido y de su mierda de fábrica!- le grito. No logro verlo pero siento el golpe de una mano en mi mejilla. La toco y está caliente.
- suficiente- le espeta Ignacio, y me coloca detras de su espalda- vayase y no regrese, no la quiero volver a ver al menos que quiera recibir otra denuncia por violencia contra su hija- dice y cierra la puerta. Apenas lo hace me giro y camino con una mano puesta en mi mejilla y la otra acariciando mi panza. De la furia saco la almuhada de una cama y la tiro con fuerza por la habitacion, saco la frazada, le pego una patada a la pared, y la golpeo hasta que unos fuertes brazos me separan de ella y me abrazan con fuerza. Recien ahí siento el ardor en los nudillos y las lágrimas salir.
- la odio, la odio- repito con la voz ahogada por su camisa.
- ya, pero no logras nada con lastimarte- me reta.
- es que no lo puedo entender, ¿como fue capaz de hacer eso? no... no lo entiendo- digo sacando mi frustracion en lágrimas.
-no importa eso, importa que vamos a tener un bebe y que hay que poner la mejor cara a la situacion mañana- dice hablando contra mi pelo.
- pero... es la mujer que me tuvo en su panza, asi como yo estoy ahora-digo tocandome mi estomago en el momento en el que me separo de él para seguir hablando- esa misma mujer me odia - digo-no, no lo entiendo- susurro mirando mi estómago.
- mi amor, a todos nos gustaría entender todo, pero hay cosas que no se entienden, me pasa lo mismo con mi padre, no lo entiendo, pero eso no significa que yo vaya a ser igual que él- dice acariciando mis mejillas- tu tampoco vas a ser igual que ella, vamos a ser buenos padres, lo vamos a queres y darle lo mejor- sigue diciendo- se lo merece- dice y me besa.
- claro que si- digo abrazandolo por la cintura- me siento completa- digo- este bebé no va a sufrir nada, lo quiero mucho, al igual que a ti- digo y termino con un beso.
__________________________________

https:/www.facebook.com/vickyortiz/