Sobrevivir

CAPITULO TREINTA Y CINCO

- ¿ustedes son...?- nos señala con el dedo Mario mientras intenta entender la situacion- ¿ustedes son... marido y mujer?- pregunta por fin, reimos y asentimos con la cabeza mientras nos abrazamos.- bien, a ver si entendí, tu estas embarazada- me señala- y ahora son esposos, ¿cierto?- pregunta e intercala la mirada entre nosotros.
- si- decimos al mismo tiempo.
- y no me dijeron nada- termina Mario cruzandose de Brazos- ¿Porque?- pregunta con voz histerica.
- era algo intimo- le explica Ignacio intentando aguantar la risa.
- pero fue Nicole y yo no- lo acusa- soy tu primo- termina ofendido.
- calmate, pareces una niña a la que le quitaron el dulce- dice de repente la voz de Nicole, ni cuenta nos dimos que había llegado.
- lo dices porque te invitaron, y ¿quien es ese niño?- pregunta curioso.
- es mi hijo adoptado- dice Nicole y Mario se hecha a reir.
- es un buen chiste, ahora dime la verdad- dice poniendose serio de repente.
- esa es la verdad, ahora calla y ayudame a cargarlo- le dice tendiendole al niño. Le frunce el ceño pero lo sostiene.
Pasamos toda la tarde con ellos. Ya es la noche y estamos cenando, yo por mi parte ceno el triple que ellos. Son patas de pollo con puré.
- estaba pensando en hacer la boda mientras tu tienes pansa chata o poca pansa asi puedes lucir el vestido- habla Nicole como si lo hubiese memorizado.
- espera... que?- pregunta un Mario aun ofendido por no ser el centro de atencion.- no solo se casan por el civil y no me invitan sino que tambien por la iglesia y no me entero?- pregunta mientras se cruza de brazos por encima de la mesa.- que lindo primo que tengo- dice sarcásticamente.
- ya, no te ofendas- le dice Ignacio con una mueca.
- no- digo- no quiero casarme con un vestido producido, no puede venir el cura a la casa y ya?- pregunto saliendo por la tangente.
- si se puede- me susurra Ignacio.
-pero van a cumplir mi deseo como cuñada y madrina- dice mirandonos divertida. Miro a Ignacio suplicante y el me mira igual.
- hazle caso, por una vez- pide con esos ojitos azules y su mirada triste- por favor, sino se va a poner insoportable y no conoces a mi hermana en ese plan- me suplica mientras hace un puchero.  Ruedo los ojos y asiento.
- esta bien- digo y me cruzo de brazos- pero con una condicion-sigo mirandola fijamenete y la apunto con mi dedo indice- nada de amigos de amigos de amigos- digo seria- solo una fiesta familiar.
- hecho- dice Nicole sonriente.- tu pon  los invitados. - asiento satisfecha.
- todo muy lindo pero algo importante no tienen encuenta- interviene Mario y nos mira- cuando va a ser?- pregunta ganandose un punto. Nos miramos entre los tres sin saber que decir.
- ya se- exclama Nicole aplaudiendo y asustandonos - dentro de tres semanas, el primero de Junio es el cumpleaños de Ignacio- dice Nicole tomandome por sorpresa, nunca me dijo nada sobre eso. Lo miro acusadoramente pero eso es algo que solamente él lo sabe.
- vale, linda fecha- decimos los dos al mismo tiempo.

Estamos paseando por una calle tranquila y en silencio, disfrutando del lindo día soleado.
- porque no me dijiste nunca cuando era tu cumpleaños?- pregunto de golpe sacando al aire esa pregunta que me carcomía la cabeza. Lo miro con el ceño fruncido y la mirada espectante y vigilante de cada uno de sus movimientos y expresiones. Él cuando escucha la pregunta no reacciona, simplemente sigue caminando unos pasos pero luego suspira y me mira sin expresion alguna.
-malos recuerdos, ademas tu ni me querías ver- me recuerda, logro distinguir cierto sentimiento de dolor en sus ojos.- y me lo merecía- dice adivinando mis pensamientos en ese instante, al recordar esas situaciones donde él se comportaba como los típicos ricos despreciando al resto.- ademas fue el día en que mi mamá murió- dice sincero. Agarro su mano entrelazando los dedos sintiendo el frío del metal del anillo. Le hago una sonrisa complasciente.
- lo siento- digo mirando el cielo y recordando a mi mamá en estado de coma.
- no lo hagas- me susurra- yo estoy bien, no es necesario- me dice y me besa el pelo.

- mira estos modelos, dime cual te gusta- me interrumpe Nicole. Estamos en la casa de Mario, esperando a que los hombres vengan a comer. Estoy estudiando, Ignacio quiere que aprenda y me ponga al día con temas de los que ya tendría que saber para mi edad, por lo tanto estoy estudiando historia francesa, Napoleón, precisamente. Nicole me pone una revista en mis ojos tapándome el libro que estaba leyendo. La miro con cara de pocos amigos pero acepto mirar. Luego de hacer ta te ti mentalmente me decidí por uno cencillo pero elegante.
- este- le señalo mi vestido.
- perfecto, dentro de dos días van a venir unos modistos para tomarte la talla- me advierte. Asiento sin darle importancia y vuelvo a mi interesante lectura de historia. Pero me vuelve a interrumpir- y elige los zapatos.- me ordena, le devulevo la mirada y le señalo los zapatis que me hipnotizaron.
- ya, no me interrumpas- le digo un poco de mal humor.
- no te caigo bien, cierto?- pregunta captando al instante mis sentimientos.
- un poco- digo mientras sigo leyendo.
- te entiendo, a mi me pasa lo mismo, eae sentimiento de incomodidad- dice sentandose al lado mío- tienes miedo- me ataca- de que te desprecie por la vida que has tenido hasta hace poco, no quieres dejar salir tus verdaderos sentimientos- dice analizandome a la perfeccion- solo te liberas con mi hermano y solo porque él te entiende, pero acuerdate que yo pasé por lo mismo tambien, se lo que se siente que te desprecien, que te dejen a un lado, que no puedas comer para que los demas lo hagan, lo que es no poder sonreir porque ya no te quedan fuerzas, lo se- dice haciendo que se me humedescan los ojos por esos horribles recuerdos- pero eso no significa que no puedas mirar el presente y divertirte, eso es pasado, estamos en el presente y ahors esramos preparando la fiesta para tu casamiento por segunda vez- me dice palmeando mi rodilla- y se que me relacionas con algo frívolo, pero no me conoces- dice y se levanta con una sonrisa.
- tu eres psicologa o algo por el estilo?- pregunto por fin.
- no, pero se me da bien analizar a las personas- dice guiñandome un ojo, no puedo evitar reirme- deja de pensar en los demas por un minuto y piensa en ti, solo en ti ni siquiera en mi hermano- me sugiere. Niego con la cabeza divertida. Sigo con mi lectura pero no puedo concentrarme, sus palabras resuenan en mi mente todo el tiempo.
- una ecografía- exclama Mario sacandonos a todos de nuestros pensamientos. Todos al mismo tiempo alzamos la cabeza mirandolo como si se hubiese vuelto loco- que? me acordé - dice levantando los hombros. Miro a Ignacio y levantamos una ceja y nos reimos.
Luego de comer Mario nos arrastra hasta el hospital donde trabaja, a la sala de ecografías. Estamos esperando a que todos vengan. Ignacio llamó a papá y papá a Rodrigo y así se hizo una cadena. Ignacio mira el reloj y luego el pasillo. Poco deapues llegan todos en banda. Mis hermanos se me aferran a las manos, Rodrigo y papá estan con Ignacio y Nicole. Al pensar que mamá no puede estar aqui una ráfaga de tristeza pasa por mi semblante, ninguna de las dos está y eso me da un sentimiento de angustia. El único que lo nota es Pedro quien me aprieta la mano dandome fuerzas. Mario nos llama, me recuesto en la camilla, Ignacio me levanta la camisa, tengo mis ojos cerrados cuando siento el gel frío recorrer la parte baja de mi estómago.
- mira- me susurra Ignacio. Lentamente los abro y no logro distinguir nada raro, pero algo doble que muestra la pantalla me llama la atencion. Miro a Mario, él me asiente con la cabeza captando lo mismo que yo.
- tengo que informar algo nuevo- dice provocando silencio y que todos pasen sus miradas de mi a Mario. Yo solo me atengo a mirar la pantalla tratando de ignorar la incomodidad que reina en el lugar.- no van a tener un solo niño sino dos- dice, esta vez lo miro y luego a Ignacio que no quita la mirada de su primo- son mellizos- informa. Enseguida se escuchan murmullos. Alzo la mirada hacia Ignacio esperando ver su reaccion, su boca está ligeramente abierta, sus ojos mirando la pantalla, sus manos tiemblan ligeramente. Está en shock. Inmediatamente coloco una mano mano sobre la suya que está en mi estómago acariciandolo inconscientemente. Ese ligero roce entre nuestras manos lo traen a la realidad, pestanea y me sonríe, sus ojos se humedecen. Su mano libre sale disparada y me limpia una lágrima que cae por mis ojos.
-padres por dos- dice y me besa la frente.
Luego de ese emotivo momento salimos de esa sala y Nicole se encarga de anunciar nuestro casamiento por la iglesia. Inmediatamente todos se lanzan a abrazarnos, el primero es Rodrigo que se larga a llorar en mis brazos.
- y lucía?- pregunto aprovechando que lo tengo cerca.
- se quedó con Yago- dice- no quería incomodar- explica.
- ella no lo hace, es mi mejor amiga- digo sin entender.
Luego de que se separe mira a a Ignacio y lo apunta con el dedo.
- tu y yo tenemos que hablar- le habla serio, él asiente con igual expresion.