Me levanté al día siguiente, domingo, con la misma sensación de cuando me acosté.
¿Algún día dejaré de sentirme así?
Cuándo menos me lo esperaba todo cambió.
Empezaba a sentir algo por Pablo.
El primer chico que me gustó se convertía en un gran amigo para mí.
Ahora las Serdis estaban mosqueadas por lo del viernes.
Ver a Álvaro fue mala idea, me dio un vuelco en el corazón.
Tenía el corazón tan vacío.
Echaba de menos a Sandra, mucho
Sabía que la seguía teniendo pero no era lo mismo, le pasaba algo pero no quería presionarla ya cuando quisiera me lo contaría.
Decidí llamar a Ángela, ¿qué haría yo sin Ángela?Sinceramente ella nunca me ha fallado y cuando digo nunca es nunca, siempre he sido yo la que le he fallado.No me merece, nadie me merece.
—Hola Esme...—me dijo seria.
Estaba enfadada podía notarlo en el tono de su voz y ya me podía imaginar que estaba poniendo los morritos que pone cuando esta enfadada.
—Hola Ángela, ¿te pasa algo?
—¿A mí?No.¿Y a ti?¿Tú dolor de cabeza va bien?
—Mira lo siento, no me cuelgues, por favor, déjame explicarte, escúchame.
—A ver...dime.
—Ángela ya estoy cansada de siempre hacer lo mismo, desde que he empezado este nuevo curso esta sucediendo lo que pedí, ¿te acuerdas?, pedí que cambiara mi vida, que no fuera siempre la misma triste vida.Me sigo sintiendo igual de vacía pero poco a poco me voy sintiendo completa.No sé el que es, si darme cuenta que el primer chico que me gustó en mi vida he sido capaz de olvidarlo y pasar una tarde con él sin sentir nada y cuando digo nada es nada.No sé si es porque el chico con los ojos más bonitos que he visto en mi vida, Pablo, tiene interés por mí.No sé si es porque me he dado cuenta que aún me sigue gustando Álvaro pero puedo ser capaz de olvidarlo poco a poco, y que no era para tanto como yo pensaba, ni yo era para tan poco.No sé si es porque ahora te siento a ti más cerca que nunca porque Sandra está pasando por mal momento y no esta contando conmigo.
No sé el porque, pero no me importa tampoco.Solo sé que estoy por irme de las Serdis, Ángela, no me siento querida, ni siento confianza, ni calor de amigas, ni de hermanas.Tampoco quiero fallaros como lo hice ayer.Sé que a partir de ahora prefiero disfrutar los viernes haciendo locuras con Joan y creo que él puede llegar a ser el mejor amigo que siempre me ha faltado.O pasar más días, sin que mis padres se enteren, con el de los ojazos azules.Enfádate si quieres, pero es lo que siento que debo hacer ahora mismo.—Mi chica, me has hecho llorar.Álvaro es un gilipollas, Joan la verdad puede llegar a ser un buen mejor amigo y para mí no esta nada mal, Pablo puede llegar a ser importante para ti, verás.Sandra tarde o temprano se centrará y se dará cuenta que como nosotras ninguna le va a querer.A mí me vas a tener siempre aquí, siempre.Lo siento pero vas a aguantar miles de enfados.¿Esme?¡Tia no llores que lloró!
—Te quiero, siempre—le dije entre lágrimas.
—Siempre.
Estuvimos hablando por teléfono dos horas, una hora de cotilleos y otra hora estudiando.
Me contó que Gonzalo había empezado a tontear con otra, que fuerte, no hacía ni una semana que le había dejado Sandra.
Que Laura y su chico, Ángel habían vuelto.
María estaba hablando con uno de su apartamento que se ve que él estaba enamorado de ella.
Nos dejamos para lo último, lo que me sucedió el viernes cuando Pablo me vio abrazada a Joan y lo del sábado por la mañana.
Ángela me escuchaba en silencio y cuando acabe no callaba.
—Tiaaaaaa esta loco por ti.Me meo de la risa—podía escuchar su risa por el teléfono.—Júrame que quedarás con él, te lo pasarás como nunca y me lo contarás todo, sin dejarte ningún detalle.
—Ángela...
—¡Hazlo!
—Vale, lo juro.