Treinta y seis

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Back here with a new chapter :) Agradezcamos la portada lindísima a @Krawen !!!! Muchisimas gracias! Habían más similares, pero wattpad ahora solo deja cargar una, lo mismo con la del capítulo anterior!! :(

Les quería avisar que estaré subiendo un capítulo por lo menos cada dos semanas, uno no corto por supuesto, tal vez haya veces en las que pueda antes pero no quiero presionarme porque eso me bloquea. Así que diré oficialmente cada dos semanas aunque no sabemos, si lo tengo antes lo publico! Espero que así todos podamos estar más seguros con la historia y no perder el hilo demasiado. Ojalá les guste el cap, y BUUU para los copiones que leen esto. Estoy cansada de encontrar últimamente historias tituladas similares a fanboy y llamando con el mismo atractivo, ORIGINALIDAD CHICOS!

No me pongo mal ni nada, solo quiero que quede claro: YO EMPECÉ CON ESTE PROBABLE FUTURO CLICHÉ!!!! PAAAZ Y BAI

Capítulo 36: Bueno lectores imaginarios, acepto oficialmente mi título de protagonista de novela de wattpad.

Su sonrisa deslumbraba. Y yo lo miré sorprendida de la rapidez y de la manera en qué cambió el aire del lugar.

-Rosi... -empezó.

Y mi mamá tosió.

No hace falta que describa como nos separamos al instante ni qué riesgo de ébola.

-¿Cómo está señora? -rápidamente la saludó él.

La mirada que mi mamá nos clavaba estaba a punto de hacerme desaparecer.

-Bien despierta Hugo -le respondió ella causando que yo la rete con la mirada, y esta tan solo me de un vistazo-. ¿Tú qué tal?

-Super bien señora.

-Me alegro. -Le sonrió más falsamente que alguien diciendo que Tris NO tiene impulsos suicidas.

Y todos de repente estábamos en un incómodo y tenso silencio, pues mi mamá permaneció en su puesto con la misma mirada de hace rato. Y Hugo no sabía dónde fijar la vista, y yo... yo quería entrar en mi culo.

-Vamos a desayunar -comenté y miré a mi mamá ya avisándole de esta manera que por ninguna razón del mundo se quiera unir a nosotros.

-Yo estaré en mi habitación viendo la tele -declaró ella y Hugo asintió-. Acá, a lado nomás -resaltó ella mirándolo fijo y él una vez más asintió.

¡Y al fin salió! Él respiró y me miró con una sonrisa traviesa.

-¡Qué finas son estas paredes por Dios! -la escuchamos decir a lo lejos, y Raziel, qué avergonzada estaba de esa mujer.

Hugo no pudo aguantar la risa, y recostándose en el mueble que tenía detrás, me miró esperando a que yo me uniera a su coro.

-Creo que tu mamá confía mucho en mí.

Y ahí sí no pude evitarlo y liberé una gran carcajada.

-Bueno ya basta, en serio moriré de hambre -le supliqué dirigiéndome a la mesada-. ¿Qué quieres tomar?

-¿Qué tenes?

-Hay toddy, café, té, si no me equivoco hay un poco de jugo también.

-¿Qué vas a tomar vos?

-Toddy.

-Entonces eso también quiero yo.

-Bueno bueno, voy a hacer licuado y si queres calentar vos, ahí después metes en el microondas, porque yo lo tomo frío eh.

-No hay problema.

Quité la licuadora, le leche, el pote de toddy y el azúcar.

Sinceramente creo que tendré 42 y uno de mis desayunos predilectos seguirá siendo el toddy.

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