HOLAA GENTE!! Estoy segura que no se esperaban hoy un nuevo capítulo, pues esta es mi manera de pedirles disculpas por mi demora la vez pasada! ESPERO LES GUSTE :)
Y antes de que lean el cap, les voy a avisar de algo que PROBABLEMENTE les interese.
Siempre, siempre, en comentarios, mensajes directos y en mi bio, tocan el tema de mi nacionalidad. Y después de muuuucho pensar, he decidido que la voy a quitar a la luz. Todos tienen sus teorías, entonceeees:
Quiero que comenten aquí mismo, de donde piensan que soy, con su porqué llegan a esa conclusión, todo bien lindito. Y a la persona que de la mejor respuesta la voy a seguir y dedicar dos capítulos!
Diré quien ganó en el capítulo siguiente! Les parece bien? Okay? Okay. ¡BESOS!
Capítulo 22: My milkshake brings all the boys to the yard.
Los cuatro estábamos riendo de una estupidez que acababa de decir Edgar, bueno la mayoría, él, Estela y yo lo hacíamos, mientras que Angelo pichado intentaba hacernos callar de una vez.
—Sí, sí, ríanse lo que quieran —bufó él.
—No hay problema —Edgar le respondió tras una pausa y los tres comenzamos a carcajearnos de vuelta.
—Es que vos no viste tu cara —le dijo Estela intentando aguantarse la risa. Podríamos decir que le estaba costando un poco.
—Wow Estela, ¿cómo has podido llegar a esa tan científica y brillante conclusión? —escupió el fanboy con veneno.
—¿Qué te puedo decir? —preguntó ella sin esperar respuesta, alzando los hombros en un gesto de no saber—. Soy toda una luz de sabiduría.
Yo me seguía riendo. Prometo que la cara que puso Angelo fue inolvidable. Y cuando recién pasó lo que pasó, nadie dijo nada, todos nos quedamos como en pausa, hasta que Edgar abrió la boca y largó un coqueto “admítelo, la deseas”.
Fue imposible no estallar. Fue el detonante de la bomba.
—Pobre chica —declaró Estela una vez que nos tranquilizamos.
Mm sí, pobre.
Pobrecita chica que le pidió tan inocentemente su número para salir en una cita a Angelo.
HORMONAL.
—Pobre en serio —concordó Edgar—, ella que se animó a pedirte, y vos le respondiste de esa manera. —Y le pegó en la cabeza a Angelo, mirándolo con decepción.
—Hay que tener coraje para hacer eso —añadió mi parabatai. Y yo la miré sin reconocerla, esa no es la manera de pensar de Estela, está hablando raro—. Tan solo quería salir contigo.
Bueno, definitivamente me está hablando sin hablarme. Cosa de mejores amigos.
Ya que, que esté diciendo esas cosas, y mientras resalté “quería salir contigo”, pase su brazo derecho por mis hombros y me apriete: significa algo.
—Soy un fanboy. ¿Qué podía decirle?
—No sé, tal vez: algo —se burló de él una vez más su amigo—. Te quedaste mirándola sin decir nada. La pobre tras unos segundos muy incomodos se dio la vuelta y caminó de manera rápida —resaltó—, muy rápida.
—Te quedaste como si fuera que Medusa haya entrado al baño mientras vos estabas haciendo del número dos, y la miraste con una expresión de sorpresa y vergüenza extrema por el olor que había dentro.

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Fanboy
HumorEl sueño de toda fangirl. ¿Qué chica con graves problemas mentales, reacciones psicóticas por situaciones que suceden en libros, y enamoramiento obsesivo por gente que no existe en la vida real; no ha soñado con encontrar un fanboy? Un chico que pa...