Aquí [Harry Styles]

Treinta y cinco

"Viernes"

*Toc* *Toc*

Escucho como golpean la puerta de la habitación y ruedo los ojos antes de abrir, se de quien se trata y se para que viene también.

-¿Si? -digo mientras trato de abrochar la parte trasera de mi arete. Hoy me he levantado media hora antes de la habitual para poder alizar mi cabello, pero conociendo justamente mi cabello debería haberme levantado dos horas antes si quería llegar a tiempo para el colegio.

-Alika por favor...-suspira y veo como también rueda los ojos.- ¿Podrías bajar a desayunar? Quedan menos de veinte minutos para que entres al colegio, y debo recoger a mi madre del aeropuerto. 

-Todavía no termino, por favor espera cinco minutos más -hago un pequeño puchero con mis labios y resopla otra vez.- Puedo tomar un café en el colegio.

-No entiendo para qué te arreglas tanto -pasa por mi lado y camina por dentro de la habitación buscando algo. Ese "algo" parece ser mi bolso, el cual toma y vuelve su marcha hacia donde me encuentro.

-¿Qué haces? -me pongo en su camino y él aprovecha para tomar mi brazo y salir de la habitación conmigo a rastras.

-Alika eres hermosa tal y como llegaste al mundo. Si sigues comportándote así comenzaré a pensar que hay alguien a quien quieres presumir -gira su vista y me penetra con su mirada. Se que está jugando conmigo.

-Definitivamente no entiendes que significa ser mujer -me suelto rápidamente de su agarre y camino delante suyo hasta el comedor.

-¿Y Noah? -giro a mirarlo y lo descubro observando mis piernas, un pensamiento poco común pasea por mi cabeza. Sus ojos suben de nuevo a mis rostro hasta que parece tomar conciencia de como ha estado mirándome.- ¿No lo llevaremos?

Se aclara la garganta un par de veces mientras sirve mi taza de café, sé que ha visto como lo pillaba y parece que se ha puesto un poco nervioso por eso.

-Si mi madre llega antes que acabes con tu desayuno, seguirá durmiendo. Si no, lo llevaré rápidamente al auto y luego lo traeré de vuelta acá, te dije tal vez debía ir a por mi madre.

-Esta bie... -el sonido del timbre interrumpe mis palabras, una ráfaga de alivio recorre el rostro de Harry. Se precipita hacia la entrada, recibiendo así con un efusivo abrazo a su madre. Me rio ante el rostro de Harry. No le gusta para nada que su madre lo trate como un bebé en frente mío.

Ojalá yo tuviera una mujer como Anne en mi vida. Ojalá tuviera a alguien que me abrace cada vez que me visita. Que me diga lo mucho que ama y que ame a mi hijo tal como lo hace Anne.

Cada vez que Harry intentaba quejarse de alguna manera del comportamiento de su madre. Se lo impedía rápidamente y le recordaba lo afortunado que era. Debía valorar más su vinculo antes de que fuera demasiado tarde para ello. 

-Hola querida...¿Cómo te encuentras? -me envuelve en un fino abrazo y siento esa agradable sensación que te agarra cuando estas en un ambiente familiar.

-Hola Anne, bastante bien ¿Usted?

-Estupendo ahora que los veo, ¿Dónde está el pequeño? -mira hacia todos los lugares, luego nos mira a nosotros y espera respuesta alguna.

-Mamá, has dado en el palo. ¿Podrías quedarte unos minutos a cargo de él? Solo tienes que quedarte aquí hasta que pueda ir a dejar a Ali a su colegio, Noah se encuentra durmiendo y nos da pena despertarlo por un viaje de unos minutos -Harry se encamina hacia la cafetera y empieza a preparar un poco más de café para su madre.