Real & Inmortal (Camren)

Capitulo 24

-.... Entonces ¿ustedes no me pueden operar la nariz?- preguntaba Ally delante de la puerta, impidiendo el paso de la enfermera.- no es que lo necesite pero creo que levantándola unos centímetros me vería más hermosa de lo que ya soy.-

-Por enésima vez, señorita Brooke, ya le dije que este no es un centro de cirugía plástica ¡solo es una enfermería!- contestó irritada.- si me permite, quiero pasar- replicaba mientras hacia el intento fallido de entrar.

-Pero yo quiero que se quede aquí, conmigo.- dijo abrazando a la joven mujer.- creo que un psicópata serial anda suelto por el colegio y no quiero que algo malo le suceda.- decía con fingida preocupación.

-¿Qué le ocurre hoy, señorita Brooke?- dijo tocando su frente.- ¿está enloqueciendo?-

-Vinieron por mí.- interrumpió Lauren detrás de la castaña, sonriendo por los delirios de su amiga.

-Está bien, puede irse.- contestó la mujer soltándose del abrazo de Ally.- ¡Y llévate a tu amiga!- exclamó entrando a la habitación y cerrando la puerta con violencia.

-¿Qué hacías?- preguntó sin poder contener la risa.

-Distraía a la enfermera para que no vea a Camila dentro de la... ¿y Camila?- preguntó mirando detrás de la morena.

-Ya se fue.- respondió divertida.- ¿Cómo no la viste salir si estabas cuidando la entrada?-

-Me entretuve un momento platicando con un chico lindo.- confesó con una enorme sonrisa.

-Nunca pienses trabajar de celadora.- bromeó.- Debo irme.-

-¿Hugo llegó?- inquirió mientras caminaban a la salida.

-No, Camila me llevará a casa.- reveló con una sonrisa de lado.- nos vemos mañana, hermosa.- se despidió para dirigirse al estacionamiento. Al llegar Camila ya la esperaba dentro del Volkswagen. Ingresó en la parte del copiloto. La pelinegra encendió el auto y salieron del instituto sin romper el silencio que había entre ellas, hasta que Lauren decidió hablar.

-¿Qué hiciste para poder salir?- preguntó viéndola con discreción.

-Les dije que debía irme.- contestó simplemente, mirándola de forma rápida.- cuando tu comportamiento es bueno, tienes ciertos privilegios.- informó sin despegar la mirada de la vía. – ¿Estás bien?- preguntó después de un momento.

-Solo fue un golpe en la ceja y en el labio, nada que no sane en unos días...-

-No me refiero a eso.- interrumpió la pequeña.- quiero saber, si emocionalmente estas bien.-

-¿Por qué lo preguntas?-

-Por la discusión que tuviste con tu padre esta mañana y por la pelea con el idiota de Michael- Lauren despegó la mirada de ella y la dirigió a su ventana. Camila entendió la situación. -Tranquila.- dijo agarrando su mano y apretándola suavemente. –Si no quieres hacerlo, no hablaremos de esto.- sonrió de manera dulce para calmarla. Lauren iba a seguir hablando pero observó que la dirección por donde iban, no la llevaría a casa.

-¿A dónde vamos, Camz?- preguntó intentando analizar el trayecto.

-A uno de mis lugares favoritos.- respondió sonriendo al escuchar la forma en la que la había llamado. Al cabo de unos 20 minutos la pequeña estacionó el vehículo. Lauren no tardó en salir del auto para conocer el lugar.

-Woooow.- expreso sin más palabras en su boca.

-Lo sé, es hermoso.- murmuró llegando a su lado.

Se encontraban en un mirador de la carretera, en donde, a lo lejos se podía contemplar el esplendor de la cuidad. Lauren observó con más detalle la zona en donde se encontraba. El otoño hacía de este lugar un escenario inverosímil. Las pocas hojas amarillas existentes en las ramas de los arboles mostraban que el invierno estaba por llegar, mientras las hojas secas en el suelo formaban una alfombra dorada digna de admirar.

-¿Por qué estamos aquí?- preguntó mientras se acercaba a la pequeña para abrazarla por la espalda.

-Sentí que necesitabas tranquilizarte antes de llegar a casa, de seguro tendrás que hablar con tus padres y explicarles lo sucedido.- Lauren dejo escapar un suspiro al pensar en ello.

-Gracias.- dijo mientras dejaba un suave beso en la mejilla de la menor. Camila giró en los brazos de Lauren, quedando frente a ella. Sin romper el abrazo.

-Solo quiero que estés bien.- dijo en un susurro mientras agachaba la mirada. Lauren la tomo por el mentón obligándola a verla de nuevo. Era imposible no perderse en aquel oscuro color de sus ojos. Sin resistirlo, junto sus labios empezando un beso cálido y suave. *Solo quiero que estés bien* esas palabras resonaban en su cabeza pero no entendía el por qué. *Solo quiero que estés bien* *quiero que estés bien*....

*Flash Back*

-Entonces ¿dices que no puedo enamorarte? Pues no solo te enamoraré, también te romperé el corazón y te demostraré que aún lo tienes.-

-No lo harás, una vez que yo te enamore, solo querrás lo mejor para mí y hacerme daño no estará en tus planes.-

*Fin del Flash Back*

*La apuesta*- recordó de inmediato respondiendo de forma torpe el beso.

-¿Qué sucede?- preguntó Camila terminando el beso y mirándola inquisitivamente. – ¿Te lastime?- Preguntó con preocupación mirando su labio inferior.- No fue mi intención, debí ser más cuidadosa, lo lamento tanto.- se disculpó agachando la mirada.

-No fue tu culpa.- calmó la morena.- es solo que...- *¡¡Como carajos pude olvidar la maldita apuesta!! En estos tres meses deje de lado el objetivo principal del juego. Olvidé por completo que lo único que nos mantiene unidas es una ¡estúpida apuesta!*  

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N/A: Espero disfruten del capitulo y me dejen saber que creen que sucederá después de esto. 

No se olviden de siempre sonreír... :D

Continuará... :)