Real & Inmortal (Camren)

Capitulo 33

-Lauren, hija ¿puedes alcanzarme la pimienta?- preguntó la mujer preparando la ensalada.

-Claro.- contestó tomándola de la encimera. Noche Buena había llegado y con él, la decoración del árbol de navidad y la preparación de la cena. Camila se había negado a dejar que su novia pasara sola una fecha tan importante, así que la convención de acompañarla a ella y su familia para juntos celebrar la Navidad.

-¿Cómo vas con eso?- preguntó Camila abrazando por detrás a la morena.

-Creo que no muy bien.- comentó avergonzada mostrándole el tazón que batía.

-Mi amor, solo debías romper los huevos y batirlos, no batirlos con todo y cascaras.- dijo Camila divertida por el esfuerzo que hacia su novia por batir bien los huevos, sin lograrlo.

-Lo siento.- se disculpó apenada.- es solo que no sé cómo hacer esto.-

-¿Tu madre no te enseñó a cocinar?- preguntó Sinuhe sonriendo al ver el tazón que sostenía la mayor.

-Es un milagro si la puedo ver a la hora de la cena.- contestó limpiando sus manos en un mantel.

-Lo siento y lamento escuchar eso.- se disculpó sabiendo que había tocado un tema delicado.

-No se preocupe.- contestó Lauren regalándole una sincera sonrisa. Camila aprovecho su descuido para regalarle un beso en la mejilla, llamando su atención.

-Te enseñaré como hacerlo.- dijo agarrando el tazón.- primero tienes que meter la mano en la mezcla que hiciste.- explicaba mientras una sonrisa malévola se formaba en sus labios.- segundo, tomas todo el huevo posible que puedas.- Lauren comenzó a retroceder entendiendo las intenciones de la pequeña.

-No lo harías.- susurró, entrecerrando los ojos para desafiarla.

-Y tercero...- dijo acercándose más a la morena.- acaricias el rostro de tu novia con tu mano llena de huevo.- terminó haciendo exactamente lo que decía.

-Déjame ver si entendí.- habló Lauren con su mejilla cubierta de huevo y agarrando el tazón de la mano de Camila.- primero, metes la mano en el tazón.- dijo repitiendo el movimiento de la pequeña.

-Mi amor, no...- imploró siendo ella quien empezaba a retroceder.

-Segundo, tomas todo el huevo que puedas.- seguía avanzando hacia la pequeña. – y tercero...-

-¡Mami!- gritó antes de salir corriendo por la puerta de la cocina, en dirección al jardín trasero.

-Síguela.- animó la madre de la pequeña al ver como Lauren se mantuvo en su lugar riéndose de su novia. La morena hizo lo que la señora le sugirió. Al salir, aun con su mano embarrada de huevo, comenzó a buscar a Camila pero le era un poco complicado ya que estaba oscureciendo y eran varios los lugares en donde podía esconderse, comenzando por una casita de madera color rosa que había a un costado, un gran árbol a su lado y algunos arbustos alrededor de la cerca. Lauren se acercó con cautela a la casita de madera -que tenía un rosado descolorido por el paso de los años- para echar un vistazo dentro de ella, pero al agacharse sintió que Camila se subió a su espalda y la embarró con más huevo en su otra mejilla. La risa de su novia provocaba que muchas mariposas revoloteen en su estómago. Camila se bajó de la morena quedando parada a su espalda. Lauren se giró para poder mirarla.

-Y tercero...- dijo acercándose más a la pequeña.- acaricias el rostro de tu novia con tu mano llena de huevo.- terminó haciendo exactamente lo que Camila hizo momentos atrás. Lauren y Camila estallaron en risas al ver sus rostros embarrados de huevo. Camila se acercó a la morena, colocó los brazos en su cuello, mientras la mayor colocaba sus manos en la cintura de la pequeña, acercándola más a su cuerpo. Camila condujo sus rostros más cerca para poder besarla, sintiendo que la necesidad de hacerlo era mucho más grande que cualquier otro hobby que hubiera podido tener hasta el momento. La mano de Camila se ubicó en la nuca, acercándola en un beso apasionado. Sus bocas moviéndose con calma, reclamando los labios que le pertenecían a la otra.

-Te quiero, Camz.- dijo Lauren mirando profundamente los oscuros ojos de la pequeña.

-Lauren yo...-

-No.- interrumpió volviendo a besarla.- no te lo dije esperando la misma respuesta.- habló acariciando la mejilla de su novia.- te lo dije porque lo siento... porque te quiero y tenías que saberlo.- aclaró con voz calmada.

-Pero...-

-Niñas...- grito la madre de Camila desde la cocina.

-Vamos.- habló dejándole un corto beso en la frente antes de agarrar su mano y llevarla de vuelta dentro de casa.

-¡Oh por Dios!- habló la mujer, cubriendo su nariz.- ¡Apestan!- el huevo de sus rostros y pequeñas porciones en sus cabellos, secándose y produciendo un desagradable olor que se esparcía por toda la cocina. –Deberían irse a bañar.- aconsejo la mujer - ¡Por separado, Camila!- aclaró al ver el rápido sonrojo en la cara de su hija. Lauren sonrió ante lo tierna que se veía su novia cada vez que el tono carmesí llegaba a sus mejillas.

-Lleva a Lauren a tu baño para que se quite ese huevo del cabello y rostro.- dijo mirando a la morena.- tu puedes ducharte en mi alcoba.- aclaró la mujer mirando a su hija. –no tarden, la cena está casi lista.-

-No te preocupes, no tardamos.- dijo agarrando la mano de su novia para salir de la cocina y dirigirse al segundo piso.

-¡Por separado!- volvió a gritar la mujer desde la cocina.

-¡Mamá!- chilló Camila subiendo los escalones y provocando una enorme sonrisa en los labios de la morena.

-De acuerdo...- dijo entrando a su habitación.- En el baño tienes toallas limpias...- decía mientras se disponía a buscar otro jersey ya que el que estaba utilizando tenia manchas de huevo. Lauren al ingresar, observó la habitación de su novia intentando memorizar cada pequeño detalle. Sin duda la habitación era pequeña a comparación de la suya, pero esta era de alguna manera, mucho más cómoda, la cama se encontraba en el centro y sobre ella estaba el dragón que le había regalado en su primera cita; junto y pegada a la pared había una guitarra, a su lado derecho se encontraba su escritorio y junto a este había una puerta, supuso que ese sería el baño; frente a la cama había una ventana con acceso al balcón, y a su lado izquierdo junto a la puerta se encontraba su ropero. –Creo que todo lo que puedes necesitar está en el baño, pero si necesitas algo más, avísame.- pidió agarrando otra toalla limpia en sus mano y su nuevo jersey.

-Tal vez si necesito algo más.- dijo acercándose a la pequeña y abrazándola por la cintura para juntar sus cuerpos.

-¿Ah sí?- preguntó siguiéndole el juego a su novia.- ¿Qué necesitas?- inquirió, soltando lo que llevaba en las manos sobre la cama y colocando los brazos alrededor del cuello de Lauren.

-Te necesito a ti.- contestó besándola apasionadamente, colocando su mano derecha en la mejilla de su novia para acercarla. Las manos de Camila bajaron hasta colocarse alrededor de la espalda de Lauren, agarrando con fuerza su sudadera. Camila gimió cuando sintió la lengua de la morena entrar en su boca, sintiéndose perder la razón. La mano izquierda de la Lauren levantó despacio el jersey de Camila para poder sentir su firme abdomen. La pequeña al sentir la mano de su novia en contacto con su piel se tensó por completo terminando el beso para mirarla fijamente.

-Mi mamá subirá en cualquier momento y no deseo quedarme sin novia.- habló mientras jadeaba por la falta de aire en sus pulmones.

-Tampoco deseo morir siendo tan linda y joven.- sonrió apartándose un poco del cuerpo de la pequeña.

-Ve a bañarte.- dijo la pequeña sonriendo.-la cena está casi lista.- recordó, dejando un beso en la mejilla de Lauren, agarrando lo que segundos antes dejó sobre la cama y saliendo de la habitación.

*Me vas a matar* pensó al ver a su novia desaparecer fuera del cuarto con una sonrisa.

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Capitulo dedicado a DeniiiMelissaAngeles. Sigues siendo mi mayor apoyo. Gracias en donde quiera que te encuentres.

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Continuará... :)